Aislada; Bryan Mouque.

30

Escucho un ruido en la planta baja que hace que me sobresalte, veo a Bryan dormir plácidamente así que decido no despertarlo.

Me escabullo de sus brazos y camino hasta la puerta.

La abro sin hacer ruido, camino hasta las escaleras y centro mi atención en el dúo de idiotas que pelean.

-¡No imbécil! Tiene un problema, tiene un problema con esa chica, con Alize- dice Freddy, frunso el ceño.

-¿Y qué quieres que hagamos?- responde Navarro confundido.

-¡Apenas sale de esa habitación! Cuando menos lo esperemos, nos traicionara, nos apuñalara por la espalda, lo sé, me ha pasado, esta enamorado de ella, tenemos que terminar con esto-. siento como mi respiración se acelera.

-¿Que haremos, Freddy?-.

-Los mataremos, a ambos, el lunes, cuando mañana entregan el dinero, así que no será necesario tenerla con vida, es lo mejor, no queremos ir a la cárcel por su culpa- Navarro asiente.

-Hay que hacerlo-. siento como me falta el aire y corro hasta la habitación sin hacer ruido, cierro la puerta con seguro y me recuesto denuevo.

Estoy temblando, no puedo respirar, la vista se me nubla; nos mataran, nos mataran en dos días, a ambos.

Una mano se posa en mi cintura, las lagrimas comienzan a salir descontroladas de mis ojos.

-¿Que pasa?- murmura Bryan con voz adormilada.

Un sollozo sale de mis labios, sigo temblando, estoy en shock, nisiquiera puedo hablar.

-¿Alize?- murmura denuevo, se levanta- ¿Que pasa? ¡Hey!- dice, me envuelve en sus brazos, suelto otro sollozo.

-Nos mataran...Bryan, nos mataran- digo con voz apenas audible, otro sollozo.

-¿Freddy y Navarro?- asiento- No lo haran, no dejare qué te pongan una mano encima, nos iremos antes, lo haremos- murmura besando mi cabeza.

Mis labios me tiemblan, tengo miedo, tengo pánico, de que le hagan algo a Bryan, tengo tanto miedo por nosotros.

-Tranquila- murmura acariciando mi cabello, yo cierro los ojos e intento tranquilizarme.

-No quiero que nada te pase, Bryan- murmuró con la voz entrecortada, el niega.

-Nada pasara, cariño, duerme- señala, mis parpados pesan y caigo dormida.

(...)

Despierto cuando recién amanece, no puedo sentirme tranquila, me siento desprotegida, asustada y débil.

Observo el techo unos segundos, una fina capa de sudor se coloca en mi frente.

La limpio con la manga de la sudadera, estoy impaciente, el brazo de Bryan se aferra a mi cintura, y el mio se aferra a su cabeza.

Quiero estar así con el, por mucho tiempo más, no quiero que nadie arruine nuestra felicidad, nuestro amor.

No dejare que nada le pase, no lo haré.