¿Cómo le explicas a un niño cosas que ni un adulto entiende?, ¿cómo le pides que mantenga un equilibrio emocional conforme a su edad y no a sus sentimientos?
Imagina lo complicado que resultaría convencer a un grupo de personas para que tuvieran la misma manera de pensar a la tuya; es imposible. Podrás lograr cambiar algunos aspectos, pero no una mentalidad por completo, porque no todos pensamos igual y porque cada quien se va a dejar llevar por si mismo, no por lo que quieran los demás.-Tuvo dos ataques de pánico ésta semana y no hubo motivos severos para que lo hiciera.
Anne se sentía preocupada. Louis se comportaba como cualquier otro niño, pero a veces sus estados psicológicos cambiaban rotundamente y provocaban conductas fuera de lo común. Decidió consultar a un profesional para que la ayudara a saber lo que ocurría y esta era la primera cita, así que mientras ella respondía al cuestionario que el psicólogo hacía, Louis jugaba con bloques de colores en una esquina de la habitación.
-¿Ha tenido conflictos con su alimentación o lo ha visto caído de ánimo?- cuestionó y empezó a marcar algo en su libreta.
-No. Por ahora sólo han sido ataques, sin embargo, me preocupa que algo le pase.
-Hablaré un momento con él.
Con un movimiento de cabeza le indicó que saliera del lugar y ella asintió tomando su bolso y caminando hacia su pequeño.
-Louis, cariño. El señor de bata blanca quiere hablar contigo. Estaré afuera por si me necesitas, ¿de acuerdo?
-Ajá- sacudió su ropa y fue directo a donde el hombre le hablaba. -Hola, me llamo Louis.
-Hola, pequeño- removió sus orejas gustoso. -¿Cómo estás?, ¿todo en orden?
-Uhum... Mi mami dijo que hablaríamos- pegó un brinco encima de la camilla. El hombre no mencionó nada. Fue hasta su escritorio y sacó un par de hojas blancas junto a un puñado de crallones.
-Así es, Louis. Tú y yo tendremos una pequeña charla. ¿Te gusta dibujar?
Lo hacía tan a menudo que ya ni siquiera sabía si era su pasatiempo favorito o sólo un método para matar el tiempo. Sin embargo asistió estando seguro de lo mucho que le encantaba rayar papel mientras se deleitaba con las melodías que Harry tarareaba sin parar.
-Me gusta mucho dibujar árboles y rosas.
-¿De verdad?- preguntó. -Me encantaría que dibujaras para mí.
-Oh, lo siento, pero sólo dibujo para Harry.
-¿Quién es Harry?
-Harry Edward Styles es mi novio y sólo dibujo rosas blancas para él- sonrió sintiendo como sus mejillas ardían de inmediato. -Siempre las dejo en blanco para que se parezcan al color de las que él me regala.
-Vaya... ¿Te regala rosas blancas?
-¡Sí!- alzó las manitas. -Si no me regala rosas blancas no tengo permiso de besarlo.
-¿Besarlo?, ¿es un niño cómo tú?
-Sí, pero sin orejas, bigotes y cola.
El hombre sonrió por la ternura que Louis poseía. Era bastante simpático y le estaba dando información que sería de gran ayuda. Observaba como ese par de fanales índigos centelleaban al hacer mención de ese novio suyo que tanto recordaba, y a pesar de que la charla se hubiese desviado de tema poniendo toda la atención en Harry, sabía que en muchos en los casos, las personas suelen estar felices a base de otras.
-Dime, Louis... ¿tu novio es lindo?
-Lindo, sí... Como las burbujas. Y la pelota verde del color de sus ojos. Mucho, mucho lindo novio Hazzie.
-¿Lo quieres mucho?
-¡Así de grande!- extendió sus manos lo más que no pudo intentando demostrar lo demasiado que amaba a su dueño.
-Eso es mucho amor. ¿Podrías dibujar a tu novio Harry en esta hoja?- le tendió el papel y uno de los bolígrafos que colgaban de la bolsa de su bata.
-Novio Harry tiene rulos- garabateó circulos. -Y su boquita es muy rosa, ¿tienes color rosa?
[...]
-¿Qué le están haciendo a Lou-Lou?- dijo Harry enfurecido caminando de lado a lado dando pasos marcados sobre el piso. Sin duda, un berrinche nada agradable.
-Harry, calmate. Él está bien, sólo le están haciendo preguntas.
-No me calmo. Dejame ir con Lou, mamá; tengo que decirle algo.
-Cuando salga puedes decirle lo que sea, entiende que está ahí por su bien- la abrazó dejando un beso en su frente. -Después podemos ir al cine.
-¿Me prometes que no le están haciendo nada?
-Lo prometo.
[...]
Su dibujo estaba terminado, y el psicólogo lo ayudaba a enmarcarlo en un cuadro rojo con puntos amarillos. Se había fascinado por el buen trabajo que había hecho. Un niño con muchos rizos y unos enormes ojos verdes; una sonrisa brillante y un par de hoyuelos resaltados.
-¿Puedo regalarle mi dibujo a Harry?
-Claro. Estoy seguro de que le encantará. Ahora vete con Harry y dile a Anne que pase.
Ella caminó hasta las sillas frente al escritorio, muy nerviosa por una respuesta. Estaba aturdida de nervios, a pesar de haber visto cuán feliz se puso su niño rizado cuando supo que Louis estaba en perfectas condiciones y que además había hecho un detalle lindo para él.
-Digame qué pasa- desesperó entrelazando sus manos encima de su regazo orando porque no fuese nada grave.
-El niño sufre de algún tipo de trauma. Desafortunadamente ha puesto su felicidad en una persona y esa misma persona es la que lo puede ayudar a dar un paso adelante de sus temores.
-No entiendo.
-Me habló de Harry, todo el tema fue puesto en él. Considerando el hecho de que ustedes lo encontraron en la calle, quizá su trauma provenga de ese suceso.
-¿Quiere decir que Louis sufre de traumas por ello?
-No, aún no está descartado. Sólo es cuestión de tiempo, con cada terapia se descubrirán más cosas. Por ahora...- hojeó su cuadernillo y apuntó algo rápido -sé que el niño es muy feliz estando con Harry y que él puede influir tanto de buena como de mala manera en su desarrollo emocional. Si Louis deposita toda su atención en ese niño, probablemente sufra de otras consecuencias conforme crezca. En cambio, es recomendable hablar con ambos chicos y ver si, con suerte, Harry ayuda a que los traumas del pequeño sean olvidados en menor tiempo.
-Entonces...
-Por ahora trataré únicamente a Louis. Quiero saber más sobre él. ¿No le han preguntado si recuerda por qué estaba en la calle?
-No lo he hecho por respeto a si mismo. Sé que puedo herirlo de cierta forma y es un dolor que prefiero evitarle.
Y así continuaron por otro rato. Definitivamente sería un caso difícil, pero Louis era un niño fuerte y todos estaban conscientes de ello. Así que juntos lo ayudarían a superar sus miedos.
¿Harry?
Él llegó directo a colgar su dibujo a un lado de su cama y no dejaba de agradecer por tan delicado detalle.
Gemma y Anne se dedicaban a consentirlos, a demostrarles amor y comprensión todos los días. Porque ya estaban hartos de soportar burlas y rechazos y aunque eso nunca terminara, juntos como familia, aprenderían a enfrentar cada palabra, cada situación, cada mueca, por el resto de sus vidas.
No somos almas diferentes, somos personas.
Tenemos un corazón con el que sentimos y sentimientos con los que amamos.
Eso es lo asombroso de vivir.
Disfruta, equivocate, tropieza, ama, siente... Porque si desperdicias la vida que te ha sido prestada, nunca sabrás lo que realmente significa seguir respirando.
Louis era diferente. Pero tener orejas, bigotes y cola nunca le pudo evitar amar.
![](https://img.wattpad.com/cover/140889219-288-k180947.jpg)
ESTÁS LEYENDO
CANDY CAT
Fanfiction-Mami, mami... ¡Quiero ese gatito! -No es un gatito, Harry. Es mitad humano. El rizado ladeó su cabeza confundido. -Déjame quedarmelo. -Metió sus manitas dentro de la caja donde el híbrido estaba y acarició su pelaje. -Anda, mami, -tiró de la blusa...