capítulo 19

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Darkana.

En las oscuras tinieblas se encontraba el castillo llamado Eterno. Creado hace Díez años por paredes tenebrosas inmersas de maldad y por lápidas de bestias oscuras. Era realmente enorme, sus pasillos cambiaban constantemente haciéndolos parecer infinitos. Allí, vivía la hechicera más poderosa de los reinos, juntos a sus bestias y soldados que permanecían a la orden inmediata de su reina, puesto que quién no le obedeciera en el momento, sería castigado y obligado a morir ante su presencia maligna.

Ella permanecía sentada en su gran trono con forma de serpiente hecha de diamantes. Su vestido largo de color negro con espinas le daba un aspecto terrorífico. Su corona estaba creada de huesos y pedruscos de minerales valiosos.

-¡Larry! Ven inmediatamente.- Grita comiendo de una bandeja sujetada por un trolls.

-¡Sí majestad, dime lo que deseas!-Responde un hombre mayor con ropa hecha trozos.

Se levanta lentamente observandolo cuando de repente tira la bandeja de un manotazo.- Ejecuten a este trolls, tiembla mucho al sujetar la bandeja.

-Sí mi reina.-se dirige hacia él.

El trolls gritaba y lloraba negándose pidiendo perdón, pero nada de eso le hacía cambiar de opinión. Mientras se lo llevaban a rastra junto a un soldado vestido con ojalata de color negro, Darkana les interrumpió.- Y Larry, reune a Mark y a Manson en el salón Lorraine.

-Entendido alteza.-responde llevándose al nuevo prisionero.

Ella bajó a un sótano, y se sentó en una silla roja.- ¡Escuchame, voy a actuar ya! No puedo esperar a oír como esa niña aumenta sus poderes.

-¡Silencio!-Se escucha dentro de ese cuarto oscuro.- Recuerda seguir los pasos que ¡te indiqué!

-¡Sí, lo se! ¡Pero no podemos dejar crecer a esa niña! Sabes perfectamente lo poderosa que es la luz.- Dice calmandose.

- ¡¿Y que pretendéis, matarla?! ¡Eso arruinara por completo que podamos obtener la luz y convertirla en oscuridad! Lo sabes de sobra.

-Lo sé.- declara levantándose yéndose de la habitación.

Cerró y subió por las escaleras hasta llegar a los pasillos eternos. Su enfado hacía que todo ser vivo cerca de ella se marchitaran o quedaran inconscientes. Llegó a la gran sala y entró. Estaba hechas de figuras oscuras y materiales valiosos. Una gran mesa de diamantes incrustados, una lámpara de acero pulido con rubíes rojos, y una alfombra de animal gigantesca colocada en el centro del salón. Mark y Manson estaban sentados.

Un Whilfor levantó la silla para que así se sentase.

-¡Bienvenidos de nuevo! Mis mejores amigos.- dice tomando asiento.

-Hola, mi doncella.-responde Mark.
Hola, mí señorita- responde Manson.

-Estoy alta de hacer caso a esa insolente. Voy a tomar medidas por mí cuenta.- comenta fijando la mirada a cada uno.

- ¿Y que sugieres?- pregunta Manson molesto.

-Yo sugiero tenderle una trampa más rápida, en la qué caiga sin remedio alguno confiando en esa persona.

-¿A quién le enviamos para que confíe?- pregunta Mark produciendo unas gotas de agua de sus dedos.

La hechicera se reía con voz maligna y repulsiva hasta que soltó el nombre.- Antares.

Ellos se miraron y Manson se puso de pié.-No sabemos si Antares está de nuestra parte alteza, podríamos brindarle una ayuda si se va de las manos interrumpiendo el verdadero plan.

-Exacto reina, no podemos arriesgarnos de esa manera y pro...

-¡Callaros!- Un silencio permaneció al instante.

Sus cenizas oscuras empezaron a salir de su cuerpo, invadiendo el alrededor con polvo oscuro y toxicidad. Sus ojos se volvieron complemente de color rojo con grietas en su rostro. Sus uñas se hicieron más largas y su pelo cobró vida retorciendose entre ellos.
-¡Escuchadme bien!-grita con intesidad.- ¡No he esperado tanto tiempo para qué el único plan acabe mal! ¡Ella se hará más poderosa y acabará con todo esto!

-¡Bien majestad, le convenceremos!- responde Manson aterrorizado mientras los pelos cada vez le estrujaba más fuerte.

-Entendido.- Dice Mark volviendose agua y formándose de pié para esquivar el pelo.

-Más os vale. -Declara Darkana relajandose volviendo a su estado normal.- y ahora, id a hacer vuestra misión.

- Sí. alteza. -Responden a la vez marchándose de la habitación.

Ella volvió a su gran trono de diamante. Mientras estaba sentada aburrida dos soldados abrieron la puerta trayendo consigo una jaula con una Whilfo dentro.-Majestad, le traemos una nueva servidora. Ha sido apresada cerca de este bosque. Andaba sola mientras recogía frutas del árbol Sabio.

- ¡Um! Interesante. -dice con una sonrisa malévola colocándose un dedo en los sus labios.- traédmela.

Ellos se acercaron poniéndose en frente de la hechiera junto con la jaula. Uno de ellos cogio el manto que la cubría y la destapó.

-Vaya, es una Whilfa joven.- expresa a gusto observandola apoyada a los barrotes sin energía.
-¿Cuál es tu nombre?

Ella alzó la cabeza poco a poco y la miró.- Me.. llamo.. Whil..lia..na.- pronunció apenas sin voz.

-Bien, te llamarás Basura. ¿Entedido?- Ríe burlándose.

Ella apartó la mirada y se quedó inscociente cayendo rendida.

-Vaya, soy más poderosa de lo que pensaba.- Se ríe junto a sus soldados.
-Denle cobijo y vigilad su salud. La quiero despierta lo antes posible, será mi nueva mesera.

-Entendido majestad.- Se llevan la jaula y se van de la sala.

Ella se fué a su cuarto en lo alto del castillo. Tenía una gran cama con cortinas corridizas de color negro. La pared, la alfombra, sus armarios y el suelo de madera eran del mismo color. Menos el hermoso espejo forjado por tres elementos; planta, fuego y agua. Tenía incrustaciones de piedras color verde, azul y rojo. Puestas en la pared con forma de triángulo.

Se acercó y se reflejó como otra chica distinta. Era alegre, y reflejaba dulzura y seguridad en sí misma.
-¡Maldito espejo! - dice mientras se miraba. Empezo a recitar un conjuro.- ¡Cambiun deus persondas! Se transformó en una chica joven. Su cabello se volvió dorado y rizado, sus mejillas eran pálidas y su mirada era de una mujer joven y seductora.

Empezó a reir de nuevo con su voz de malvada.- Ahora, iré a dar una vuelta.-dice viendo como se ríe reflejada en el espejo.

Al Otro Lado Del Mundo.(La Profecía De La Luz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora