Primera prueba: Parte II
Halen y yo nos fuimos a la parte trasera del castillo pasando por el sendero de piedras y luego por el de tierra. Me quedé quieta en un momento produciendo que él se tropezara con mi pié y cayera.
De pronto, unas piedras salió del suelo y lo sujeto de inmediato estabilizando de nuevo su postura.—Vaya, es realmente sorprendente.— digo mirando como las rocas volvían a su lugar.
—¿Sabes? Lo bueno de ser puro es que nuestro elemento siempre nos protege.—declara mirándome con una sonrisa.
Saber esto, me ayuda aún más. Si es así, espero que siempre me proteja.
—Que bien.Llegamos a una pequeña colina rodeada de hiervas y algunas que otras flores.—¿Halen, dónde estamos?
El empezó andar más deprisa.—Ven, está detrás de esta pendiente.
Empeze a alcanzar su velocidad y llegué a la cima. Había muchísimas personas luchando unas con otras. Contra más nos acercabamos, más contemplaba el campo de tierra y a los guerreros practicar. Mientras pasabamos por al lado ellos, empezaron a parar. Todas sus miradas eran dirigidas a mí. Me puse un poco nerviosa, pero no paraba de sonreír. A medida que avanzábamos, escuchaba murmullos diciendo.-Es ella, la descendiente de luz.-sí, haber que es capaz de hacer. Todas sus palabras llegaban a mí oído, hasta que el puro de tierra les ordenó.
—¿Se puede saber que hacéis parados? ¡Vamos, moveros! —Grita provocando que apartaran la vista.
Había una chica y un chico que resaltaban en una de las peleas. Ella tenía el pelo oscuro y lanzaba agua de sus manos, él tenia el pelo de color rojizo y lanzaba llamas muy ardiantes. Me quedé embobada ante la situación, sus poderes desprendía una gran cantidad energía que te envolvía en una sensación de tener fuerzas destructivas.
—¡He johana! ¡Ven, es aquí!— dice levantando la mano a unos cuantos metros.
—Sí.—Respondo en el acto yendo hacia él.
—Bien johana, por lo que sé ya sabes manejar más o menos tus poderes. Pero no sabes utilizarlos y controlarlos.—Me dice serio mientras le observaba con atención.-—Bien, tu primera prueba. Crea una barrera.
No dejé que mis nervios actuarán en mí una vez más. Así que me puse a unos cuántos metros de él, y coloqué las manos colocandola una detrás de otra con la palma abierta.
Una luz salió formando la misma barrera de antes. Brillaba y reflejaba un manto transparente como si fuese crital. Él levanto una mano convirtiéndose en un pilar de rocas cada vez más grande y grueso yendo hacia mí.—¡Vamos!—grita Halen aumentando la velocidad de su mano. Al chocar, empezó a quebrarse la barrera rompiéndola a trozitos. El paró en el mismo momento y hizo regresar su mano a su estado actual.
No pasa nada. Es la primera vez hago esto contra alguien realmente fuerte.
—Bueno Johana, ahora tienes que profundizarte. Deja sacar ese poder. Concentrate realmente en lo que estás haciendo, de ninguna manera puedes distraerte mientras lo utilizas. Así es como pierdes fuerzas al invocarlo.
Hice un respiro hondo que llegara a llenar mis pulmones, y luego lo solté poco a poco cerrando los ojos.—Está bien, otra vez.
Empecé a imaginarme la barrera, y se formó dejandola aún más resplandeciente. Esta vez era más grande que la anterior, y su reflejo estaba más iluminado. El volvió ha hacer lo mismo aumentando de nuevo la velocidad. Justamente al casi impactar, fije la mirada apreté más mis manos.
Al chocar, una luz cegadora iluminó gran parte del área. Todos volvieron a fijar la mirada en mí. De pronto una honda salió disparado del reflejo y empezó a destruir sus rocas trozo a trozo. El volvió a colocarlas de nuevo formando otras piedras.
—Bien hecho, ¿así siempre entendido? —pregunta contento y asombrado.
—Sí.—Respondo agradecida.
—Ahora intenta crear una barrera circular que proteja cada extremo de tu alrededor. Para ello, tendras que conectrarte en tu fortaleza interior y sentir lo fuerte que realmente eres.
El junto las manos creando un circulo de piedras calizas que cubría todo, y al ser de piedras él no se veía en absoluto. Luego se destapó impulsando las piedras por la zona.
—Bien, te toca.
Cerre las manos y me concentre totalmente en que es lo que me hacía fuerte en realidad.
Mientras pensaba, descubrí que todo lo que había sostenido bajo un pilar, no era más que el simple hecho de que mí padre desapareciera perdiéndose mí infacia, y que tenía esa esperanza de volver a verlo algún día.
Estoy segura de que es relamente el motivo, nunca me he acercado a chicos. Porque siempre pensaba en mi padre. Desde los siete años, le he tenido presente.
A medida que iva averiguando la respuesta, notaba como se desprendía algo en mí, y salía en forma de luz pareciendose a una estrella de seis puntas. Al volver a darme cuenta, ya sostenía una barrera circular defendiendo el interior.
Se queda mirándome extrañado.
— ¿De cuando sabes manejarlos tan bien?— expresa con la cara descompuesto.—No sé.— Digo feliz bajando las manos.
Él se acercó rápidamente asustado.
—¡No! — declara echándose las manos ala cabeza.—Espera, ¿Puedes mantenerlos sin usar tus manos?— ¿Qué ocurre? Pensaba que todos inclusos los impuros podían hacerlo.
Se acerca y empieza a tocar la barrera.—No. Solo lo he visto dos veces.
—¿A qui..— No me dejó terminar.
—Bueno Johana, preparate para ser golpeada.Recuerda en lo que te acabo de decir.— pronuncia concentrándose.
Una serie de rocas empezaron a flotar y a unirse en formas enormes de bolas. El levanto una mano, y hizo un simple movimiento con la mano señalando a mi lugar. Las piedras enormes se dirigirán hacía mí por diferentes perspectivas. Al chocar, mí barrera de nuevo hizo su efecto devolviendolas aún con más fuerza.
Las rocas empezaron a caer por el campo y por otras zonas de la montaña dando al parecer meteoritos.
Una fué hacia él impactando con su mano tranformada en piedra, parando así el ataque destruyendolas por completo.—Vaya, has aprendido dos pasos en una. Sí sigues así, terminaremos antes del anochecer.— Dice quitándose los trozitos de piedra de la cabeza.
Pues sí que se va hacer largo el día. Quiero irme a descansar, y luego a investigar un poco más esto.
—¿Cuánto queda?—Aún tienes que saber controlar varias cosas más. Bien, este paso es el más difícil, ¿Estás preparada?— se gira y se aleja varios metros de dónde se encontraba.
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Al Otro Lado Del Mundo.(La Profecía De La Luz)
FantasiJohana Harrison era una chica normal con una vida común y corriente, o eso pensaba ella. Desde sus dieciséis, empiezan a desencadenarse varios factores para su verdadero propósito, Destruir la oscuridad con un destino inminente. poder salvar a su...