Personaje: Steve Rogers
Advertencias: Si. Smut.
Titulo: Ya es tiempo.Llegaste al departamento después de tu trabajo. Soltaste tu pelo y dejaste de lado tu cartera.
Dentro la mesa del comedor estaba llena de comida y parecía de un restaurante.-Amor.. bienvenida a casa. Espero no estés tan cansada.- dijo Steve. Que parecía un poco nervioso y más animado de lo normal.
- No Amor.. para lo que tu quieras estoy disponible.- Te sentaste en la silla que el corrió de la mesa, acerco los platos servidos y te entrego el tuyo.
-Espero te guste es tu favorito, fideos con salsa blanca. Como una vez me habías dicho.- sonreíste ante su detalle y empezaron a comer juntos, charlando y riendo de vez en cuando recordando anécdotas.
Juntos limpiaron todo lo que se ensucio, el te daba besos de vez en cuando.
-_________, yo, necesitaba pedirte algo, no sabia como hacerlo, ni como ibas a reaccionar. Yo quiero que esta noche tengamos... Sexo- dijo la ultima palabra casi en un susurro. Reíste bajito.
-¿Que cosa amor?- el suspiro.
-Sexo, quiero que tengamos sexo, como ese que vemos en las películas y en los vídeos.- dijo casi muerto de vergüenza.
-Steve, cuando dos personas son pareja, esto es lo mas normal. Ni siquiera hay que pedirlo con palabras. Con acciones basta.- el asintió y se acerco tomando tu cintura y levantando solo un poquito de esta para tocar la piel.
-Es tan linda, y tu piel tan hermosa.- acerco sus labios a tu vientre y empezó a besar, lamer y dejar marquitas. Jadeaste y levantaste mas arriba la remera blanca que cubria tus pechos que llevabas sin brazier siempre que estaban asi cuando andabas en casa.
-Steve, llevame a la cama por favor.- dijiste con la voz temblorosa.- el asintio y te cargo alrededor de su cintura. Ambos cayeron en la cama de plaza y media besandose y toqueteandose.
El dejó de lado cada prenda tuya y tu la de el. Te mordisteel labios al ver lo que era su paquete ahora liberado.-Steve... la tienes muy grande.. - murmuraste excitada y lo miraste.
- Se que te gustará.- dijo abriendo tus piernas mientras se acomodaba entre estas. Besándote, entro en ti y soltó un gemido de satisfacción. Te miro a los ojos y empezó a moverse lento contra tu cuerpo. Sentiste sus músculos tensarse y gimio sobre tus labios. Le diste aliento al arañar su espalda y empezo a aumentar su ritmo para dar más placer a ambos. Los vidrios del cuarto por el calefactor y sus cuerpos se empañaron. Sus gemidos se unieron en el vaivén de sus cuerpos y algunos que otras estocadas fuertes.
Steve te cambio de posición. ¿cómo sabía eso? Vídeos.
Te puso en cuatro y entró en ti. Sosteniendo tus caderas y dejando una nalgada.
-Oh steve.. Dios.- le murmuraste al sentirlo moverse fuerte contra ti. Su cuerpo tembló y el tuyo también al momento que se vinieron en un orgasmo intenso.
Salió de ti y se quedó arrodillado en la cama mirándote a ti como intentabas recuperar tu respiración.
Asi es steve al fin dejó la timidez de lado y ambos tuvieron el encuentro que estaban deseando desde hace tiempo.