Personaje:Bucky.
Advertencias:No.
Titulo:Citas.~•~•~•~•~•~•~•~•~
Estabas nerviosa muy nerviosa. Era tu primera cita con Bucky en la semana que el se te declaro. Mirabas una y otra vez tu ropa. Estabas bien. Para hacer frío supiste elegir bien lo que llevarías. Mas el maquillaje.
Sentiste unos golpes en la puerta de tu apartamento y saliste del cuarto para abrir la puerta.
-Hey Buck... Pasa hasta que termine.- le dijiste sonriendo. Como acto de amor el se acerco a tus labios para dar un suave beso. Tal vez sus palabras no son dulces. Pero sus actos si. Se sentó en uno de los sofás hasta que tu terminaste con tu abrigo y saliste dando una vuelta.
-¿Como me veo?- dijiste levantando las manos.
-Te ves preciosa. Ahora vamos. Tengo un lugar que te gustara.- dijo dándote su brazo para que lo tomarás. Salieron se su apartamento hasta el conserje y dejaste la llave. Una vez afuera caminaron unas cuantas cuadras hasta un lugar que ni conocías. Al entrar viste que era una pequeña biblioteca para poeta. Con gente que recitaba algunos. El se acordó de tus gustos por los poemas. Se ubico en uno de los asientos con una taza de café y te incito a subir al escenario. Cediste porque te gusto ese detalle.
Tomaste el micrófono y todos prestaron atención. Las notas que habías escrito salieron de tu labios como susurros:Amor no solo un sentimiento
una fuerza mas real que la gravedad y el tiempo.
Una fuerza invisible
la única capaz
de hacer posible lo imposible.
Amor como claridad
como una luz pura y dada
como una antorcha sagrada.
Amor como un torbellino.
Amor como un hilo fino
que va tejiendo las redes
del que llamamos destino.
Amor como fuerza real
como pura inteligencia
como una sed insaciable
de verdad y belleza.Terminaste y bajaste hasta donde tu novio te esperaba mientras aplaudía. Te tiraste a su lado y lo abrazaste.
-Eres tan talentosa.- sonreiste por sus frías palabras cargadas de sentimientos.
-Soy talentosa cuando me conviene. Cuando debo ocultar mis dones se hacerlo.- dijiste mientras te inclinabas a darle un beso.
Con sus manos en tu cuello y las tuyas apoyando te en el sillón del café. Con una sonrisa tonta te separaste y te volviste a recostarse sobre él.
-Es oficialmente la primera cita con poemas.- mencionaste.
-Y eso que no sabes como serán las próximas citas.- sonríes abrazándolo con un sonrojo de solo pensarlo.