Recorrias el castillo como cada mañana. Te encantaba hacerlo mas si cuando pasabas por la tercera columna del tercer pasillo Loki se unía Ti
-Hola Bella Asgardiana. ¿Que me has traído esta mañana?- dijo extendiendo su mano donde dejaste una manzana verde.
-Bien sabes mis gustos.-dijo sonriendo de lado.
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-¿Que historias me contarás hoy Loki?- dijiste mirándolo de perfil.
-El día que te conocí. A ese día lo atesoro muy dentro de mi. Ese día fue especial tuve una amiga más que no sea mi madre.-
-¿De veras?- él asintió.- Bueno cuenta me.-
-Estabas sola en la biblioteca y varias mujeres más se te reían porque suspirabas ante las páginas de un libro. Cuando te vi me di cuenta que eras la aprendiz de mi madre. Esa vuelta quedamos dos días dentro de la biblioteca hablando juntos.-
-Lo recuerdo dijiste poniéndote frente a el. Esa es una de mis aventuras que me gusta contar.-
-Y esta es otra que siempre la contaras.- dijo acrcandote a el por tu cintura y atrapando tus labios en un beso lleno de amor y pasión. Que a poco fue tomando color y calor mientras te tomabas de su cuello.
Te separaron por el oxigeno que pedían a gritos. Pero al recomponer sus respiraciones volvieron a un frenesí de besos en aquí el rincón del castillo de Asgard.