capitulo 44

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                    Cristhian

Estaba sentado en el sofá de el salón donde Samuel indico que podríamos trabajar con Samantha, mi cabeza trataba de pensar la manera de hacerla hablar sobre lo ocurrido sin que fuera muy cruel con ella. Cosa algo complicada y lo peor para mi no era precisamente hacer hablar del tema a Samantha, no. Lo que de verdad iba a ser complicado era conseguirlo con Samuel presente que se había medio que impuesto en que se hiciera con el al lado de su mujer ya que ella lo había pedido de esa manera. Podía entender a la chica, incluso  entendía a Samuel, pero estaba seguro que cada palabra que saliera por la boca de Samantha le causaría más daño a Samuel.
Mi amigo se sentía culpable por no haber apartado a su mujer de ese tipo y el costo de haber aceptado lo que Samantha había pedido fue la vida de su hijo.
Me costaba entender como Samuel seguía en pie, ese bebé era el segundo hijo que perdía. Pero el en lugar de culpar a nadie más se culpaba a sí mismo, por haber echo caso a Samantha cuando le pidió la dejara.
Yo ya tenía todo preparado, la cámara filmadora estaba lista para filmar las entrevistas a Samantha, solo restaba que ella bajara.
Cómo si fuese su llamado la puerta fue abierta por mi amigo que sostenía de la cintura en forma protectora a su mujer  y la guiaba al interior del salón privado. Me puse de pie y esperé a que llegasen frente a mi con las manos en mis bolsillos, trate de poner una afable y sincera sonrisa a Samantha, pero realmente me costó aceptar lo que mis ojos tenían frente a mi. La chica estaba de verdad muy desmejorada, la chica que tenía en mi mente no parecía ser la misma que hoy veía...
Lo que si note, es que Sam prestaba especial atención a todo lo que giraba en torno a su mujer, la trataba como si fuese una obra de incalculable valor, con una delicadeza y cuidado, no muy propio en el.
Realmente la amaba comprendí satisfecho por ver que mi amigo había encontrado una buena mujer y está había conquistado su corazón. Estaba seguro que Samantha era una mujer integra con una vida difícil, pero una mujer que podía imaginar haciendo verdaderamente feliz a Samuel.

- ( Samantha) Cristhian, hola...

Susurro la chica apenas si sosteniendo un par de segundos sus ojos en los míos, luego de eso busco los ojos de Sam que de inmediato la acerco más a él y reacomodo el largo saco que la chica traía puesto sobre sus hombros y besaba su frente con serenidad. Ese gesto pareció lograr que ella suspirara más tranquila y eso me dio una buena pista de cómo manejar el asunto que me había traído al Caribe.

- ( Cristhian) Hola Samantha, es bueno verte de nuevo.

Respondí sin intentar acercarme, no quería que ella estuviese incómoda, por eso mantuve mi distancia y permití que Sam fuese el que la guiara al sillón dispuesto para ella.  Les seguí un par de pasos detrás y cuando ellos estuvieron acomodados en los dos sillones individuales me senté frente a Samantha, fijando mi entera atención en ella, sus manos aferraban con cierta presión la mano de Samuel.

- ( Cristhian) Antes que nada Samantha, quiero explicarte un poco como pienso trabajar contigo...

Empecé a decir a lo que ella asintió mirando primeramente a Samuel y luego fijo su atención en lo que yo le decía.

- ( Cristhian) No es muy usual tener este tipo de consulta con un tercero presente y si soy sincero generalmente no lo recomiendo...
Pero entiendo que has sido tú la que pidió a Samuel el estar junto a ti mientras charlamos...

Porque dije esto? Simple, necesitaba la confirmación verbal de ella para la filmación que ya había empezado a correr, desde el segundo en que la puerta fue abierta.

- ( Samantha) Me sentiría más segura si el permanece aquí conmigo, es que...
- ( Cristhian) Tranquila, yo entiendo muy bien la situación y si con el aquí tú te sentirás más cómoda y tranquila, por mi parte no hay problema.
Lo que si voy a pedirte a ti Sam, es que se diga lo que se diga permanezcas en silencio y trates de no interrumpir lo que hablemos.
- ( Sam) Claro...

Tu y yo... todo o nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora