VICTORIA

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Juan Carlos era el factor que necesitaba para conseguir convencer a mi madre de que expandirnos hacia el extranjero, en concreto a Londres sería una idea fantástica, gracias a él mis padres me han dado la oportunidad de empezar a trabajar en la marca ya, ahora mismo tengo algunos bocetos de las ideas que tengo sobre como podrían ser las tiendas y todo lo que esto conlleva, pero hoy, vienen él y su mujer a cenar a casa, para acordar unas fechas en las que podamos trabajar, yo ahora estoy super liada con primero de bachillerato, pero quien algo quiere algo le cuesta.

-Que pena que hoy no vengan a cenar los gemelos - dice mi hermano, está tirado en mi cama mientras yo estudio.
-Que pena que no venga Jesús, quieres decir ¿no? - le pregunto y suelta una leve carcajada.
-Pues si, Daniel es más seco que la mojama - dice y le miro mal - es broma, es broma.
-Cuando le tengas de cuñado dile eso, a ver qué pasa - le digo y se empieza a reír.
-Ojala, ojala - dice y pone las manos como si estuviese rezando.

Hablamos un rato y coge su teléfono y empieza a hablar con el rey de roma mientras yo me centro en mis maravillosos apuntes. A la hora de la cena mi hermano y yo estamos arreglados en el salón esperando a que llegue la familia.

-Pero bueno ¿dónde están los gemelos? - pregunta mi madre al ver que no vienen junto a los padres.
-Se han quedado en casa estudiado - dice Eva - están super agobiados.
-Anda, llámalos, que salgan y se despejen un poco - dice mi padre.

No sé cómo hemos llegado hasta aquí, pero Mateo y yo vamos en el coche de camino a recoger a los gemelos, como no, mi querido hermano está feliz de volver a ver a Jesús, yo la verdad agradecía que no hubiesen venido ya que su presencia me da bastante vergüenza.

-Victoria - me llama mi madre, acabamos de cenar y Rosa, la chica que trabaja en casa está terminando de recoger - Mateo, ayudar a Rosa y después subid con los gemelos arriba, nosotros vamos a salir a tomarnos algo, vendremos en un par de horas.

Hacemos lo que mi madre nos ha dicho, y ayudamos a Rosa, también los gemelos, luego mi hermano se ofrece a llevar a Rosa a su casa y mientras yo subo con los chicos a mi habitación.

-Ala, que pasada - dice Jesús al entrar en mi habitación - pero si es como nuestras habitaciones juntas - le dice a su hermano sorprendido - madre mia, ¿te los has leído todos? - me pregunta al ver mi estantería llena de libros.
-Sí - respondo con una sonrisa - ¿os gusta leer?
-Mi hermano es un obseso de la lectura, hermanito - le coge por el hombro - bienvenido a tu paraíso. ¿Por qué no me recomiendas un libro? - dice observando todos los que hay - no me gusta mucho leer, asi que algo sencillo a poder ser.
-Pues... - empiezo a mirar la estantería y me decanto por La chica del tren - este - se lo doy - yo me lo leí en dos días, al principio cuesta pillar el hilo, pero luego te enganchas enseguida.
-Gracias - sonríe - voy a empezar ahora mismo.

Se sienta en mi cama con toda la confianza del mundo y empieza a leer como si su hermano y yo no estuviéramos con él.

-Recomiéndame uno a mi ahora - me pide Daniel, estaba en la puerta pero se ha ido acercando y ahora está a mi lado.
-Sin duda este - le doy un libro y lo ojea - es mi favorito, espero que te guste.

Estábamos a viernes, el martes Daniel y yo quedamos para ir a una cafetería a devolverme el libro que le había prestado y también el de su hermano.

-¿Te ha gustado? - le pregunto y asiente.
-La verdad es que admiro a Amelia, hizo algunas cosas mal, pero que mujer... - dice y sonrió.
-A mi también me gusta mucho su personaje.
-Te he traído un libro - me dice sacándolo de su mochila - no se si te lo habrás leído, yo lo hice hace relativamente poco - me lo da.

Es Todo esto te daré, el Premio Planeta de 2016, ya me lo he leído pero decido cogerlo como si no lo hubiese hecho.

-Muchas gracias - sonrió - de haberlo sabido te había traído otro - digo apenada - la semana que viene te lo doy.

Y así fue como Daniel y yo empezamos a quedar todos los martes, en la misma cafetería, a la misma hora, merendábamos y nos intercambiamos libros de los que charlamos durante toda la tarde.

Todo es por ti. [gemeliers]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora