DANIEL

169 8 0
                                    

-Daniel Oviedo levanta el culo ya - oigo a Victoria - es que vamos a llegar tarde.
-Que no - la cojo con el brazo y la tiro a la cama junto a mi - buenos días.
-Buenos días, en una hora sale el vuelo y vamos a llegar tarde - dice histérica.

Me río y le doy un beso, acto seguido me levanto y empiezo a hacer la maleta junto a ella.
Mentiría si dijese que estos meses han sido los mejores, diría la verdad si dijese que han sido los peores. Mi idea de cambiarme de instituto era más una realidad que una propuesta, pero Victoria se negó, quería que acabase el curso con mis amigos de siempre, y aunque en ese momento no me sentó bien que no quisiese que me fuese a su instituto y me enfadase, ahora no puedo estar mas de acuerdo en no haberme cambiado. Este curso me lo he pasado genial con todos mis amigos, cada día disfrutaba, daba igual que hubiese exámenes, trabajos exposiciones, disfrutaba al máximo ya que sabía que era el último año y probablemente no volviese a coincidir con todos a la vez nunca más. Fuera de clase estaba muy estresado, me pasaba el día y la noche estudiando, tenía miedo de no llegar a la nota que yo mismo me exigía, Magisterio, que es lo que quiero estudiar, pide una bajísima nota, pero yo me he exigido a mi mismo no bajar de un ocho de media, y para cualquier persona puede parecer una chorrada, pero para mí que en la vida he estudiado, que soy un vago, me ha costado muchísimo pero estoy muy orgulloso porque mi nota de selectividad fue un diez, y la verdad es que tanto esfuerzo a merecido la pena.
Al estar tan estresado por estudiar, estar pensado todo el rato donde estudiar, si coger un piso, si no... Victoria y yo peleábamos día si, día también, ella es la persona más insistente, trabajadora y constante que he conocido en mi vida, al principio empezó muy bien, pero cada vez estaba más agobiada hasta el punto de bajar en los exámenes a notables cuando ella no baja del nueve jamás. Por lo que a la mínima acabábamos discutiendo, todo por culpa de bachillerato.
Por suerte llegó Navidad, y ambas familias nos fuimos a Sevilla a celebrarla allí, juntarse con Elena y María de nuevo le hizo muy bien, estar juntos de nuevo, sin discutir todo el rato fue genial, y así conseguimos estar bien unos cuantos días, pero al volver seguimos igual, si ella ya salía poco dejó de salir, por lo que siempre iba a su casa a estudiar para estar con ella al menos unas horas.
Por suerte, hace unos días que nos dieron las notas de selectividad, y ahora nos estamos yendo de viaje a Italia. Cuando fuimos a pasar las vacaciones, a Victoria se le ocurrió que podríamos hacer un viaje Carlos, Mel, Mateo, mi hermano, ella, nuestros amigos de Sevilla y yo, y eso es lo que estamos haciendo.
Por otro lado, mi hermano y Mateo siguen juntos, están súper enamorados, tal punto, que se van a ir este año a vivir juntos a Sevilla y allí estudiar en la universidad. Mis padres están viendo como uno a uno nos vamos yendo de casa y están súper tristes, me dan mucha pena y me quedaría con ellos, pero deseo vivir con Victoria ya.

El viaje a Italia resultó ser lo que Victoria y yo necesitábamos para volver a ser nosotros, me sentí como el año pasado en Sevilla, todo el rato juntos, todo el rato en la cama, solos nosotros, menos cuando paso toda aquella movida. Elena y Álvaro lo han vuelto a intentar, esta vez con protección, Óscar dice que cada semana está con uno y que es feliz así, por lo que si él es feliz, todos somos felices. María la cual no había tenido novio nunca, nos sorprendió en Navidad cuando llegó de la mano de Marta, su vecina.
Ahora estamos todos en Sevilla, como el año pasado, haciendo vida en cualquier jardín, sin salir de la piscina y saliendo todos los días.

-Tenemos que hablar - me dice Victoria.

Estamos los dos en su habitación echándonos la siesta, y para nada pensaba que está siesta acabaría con esas palabras.

-¿Qué pasa? - pregunto.

Se incorpora y se queda sentada.

-Ya sabes que este curso ha sido una mierda básicamente, que hemos discutido todos los días, que estaba muy agobiada y todo esto... - empieza a decir y asiento en silencio - todo ha sido por mi culpa, por no ser honesta desde el primer momento contigo.
-No estoy entendiendo lo que me quieres decir Vic - le digo y ahora me incorporo yo quedándome de frente a ella.
-Cuando abrimos la tienda en Londres, desde un principio ya sabíamos que yo era quien la iba a llevar cuando terminase bachillerato - dice y juraría que mi cara es un poema ahora mismo.
-¿Qué dices Victoria?
-Ya sabes que voy a estudiar Administración y Dirección de Empresas, por eso voy a dirigir esa tienda, mis padres me van a dar la empresa cuando acabe la carrera - dice y de verdad que estoy flipando - me voy a vivir a Londres Dani.

Me levanto y me llevo las manos a la cabeza, ¿enserio esto es verdad?

-¿Por qué no me lo has dicho antes? - pregunto y resopla.
-No quería hacerte decidir, no quiero que dejes todo por venirte conmigo, por eso no te lo he dicho, no quiero pedirte que lo dejes todo por mi - dice.

Cierro los ojos y me quedo en silencio unos instantes, después me pongo delante de ella y la cojo de la cara.

-No me lo pidas - digo - no hace falta que lo hagas, su tú te vas a Londres yo también.

Todo es por ti. [gemeliers]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora