Ojos plateados.

《26》

-Luego de que dios creara esta dimensión....

Creo la dimensión divina; un pequeño mundo bajo el cielo, como dije me dio el poder de crear a seres con mis mismos poderes, así cree a la raza vangetiriergo, ahí habitábamos nosotros junto a criaturas mágicas, todos estábamos esperando el momento en el que dios nos diera la orden de comenzar con la misión. Pasaron siglos y no recibíamos la orden, pero esperábamos pacientes, sin embargo algo ocurrió en esos siglos.

El rubio suspiro ante el recuerdo pero sonrió levemente, haciendo que los demás lo miren con curiosidad.

-Dios no quería que bajáramos al mundo humano, decía que a pesar de que la raza humana sea maravillosa algunos tenían miedo de lo desconocido, ademas los únicos que podían descender a la tierra eran los ángeles, quienes eran guardianes de los humanos, los humanos gracias a un arcángel, que se transformo en humano, conocieron a dios, se hicieron creyentes gracias al arcángel miguel; que se encargo de sanar a un ciego y les contó a todos sobre las maravillas de dios, claro que dejando de lado el que eran de otra dimensión, algunos les creyeron otros no, su misión estaba hecha así que volvió al cielo. Los pocos que creyeron en miguel empezaron a  rezarle a dios y él les respondía mediante milagros.

Los creyentes iban aumentando día a día, eso ponía feliz a nuestro señor, hasta que uno de mis hermanos o hijos como gusten decirle.

El rubio cerro sus ojos con seriedad, claro que anteriormente se refería sobre hermano o hijo a los seres que él creo; los vangetiriergo. Todos estaban atentos a su historia, incluso kaname, el cual por algún motivo sentía que esa historia tenia que ver con su amada y con su pasado.

-Desobedeció la orden de dios, se cansó de esperar y su curiosidad por las personas que debíamos de salvar era mucha, así que sin que me diera cuenta salió shirlikithia y bajo al mundo humano, él se llamaba keitaro, cuando me di cuenta que se dirigía al mundo humano estaba por detenerlo pero dios me detuvo, me dijo que lo dejara ir y que vea su creación, que keitaro era parte de su plan para esta dimensión, yo me quede en mi puesto y mire a keitaro desde la dimensión divina, lo vi mirar a los humanos con adoración, sin embargo al ir observando a cada humano que se encontraba en la tierra se empezó a decepcionar, esos humanos tenían maldad en sus corazones había muy pocas excepciones, esos humanos habían perdido a sus seres amados y desde el fondo de su corazón gritaban para que alguien los salve de la oscuridad. 

keitaro empezó a mirar con asco y decepción a los humanos, hasta que vio el motivo por el cual dios amada a los humanos, keitaro uno de los vangetiriergo se enamoro de una humana.

Dijo sonriendo con felicidad al recordar el bello amor que se tuvieron esos dos, los demás estaban sorprendidos.

-keitaro vio que dios amaba a los humanos, por su forma de ser, por más que estuvieran hundidos en la oscuridad al recibir una pizca de luz, se convertían en los seres más puros que pudiera haber, su forma de amar era maravilloso y lo sigue siendo, keitaro se enamoro de hanako tsuyu, los humanos al ver que no eran de mismas familias se ponían distintos nombres luego del primer nombre, lo que nosotros conocemos como apellidos, hanako era hija única, sus padres habían muerto cuando era niña, su abuela murió a sus 16 años y luego de 2 años, al tener 18 años conoció a keitaro, ella pensó que era alguien normal pero notó que había algo raro en él.

Al pasar el tiempo, keitaro le contó lo que era, ella lo acepto, los dos empezaron una relación, al año hanako chan quedo embarazada, estaba esperando una hermosa niña, al principió me asuste no sabia lo que pasaría, por más que en el mundo humano estuvieran los ángeles y estuviera keitaro, la maldad aún estaba y solo era cuestión de tiempo para que hicieran su aparición, pasaron sorprendente mente 4 años de embarazo, por algún motivo el desarrollo de un arcángel en el vientre de la madre era de 3 o 4 años, todos estábamos sorprendidos, todos los vangetiriergo sabían sobre el caso, algunos se enojaron con keitaro pero al ver la felicidad de su hermano lo superaron y les dieron sus bendiciones para que sean felices.