Cartas a Nam Joon (Namjin)

10

Jin retornó a la escuela después de sufrir con su enfermedad.

Sorpresivamente, diferente a lo que esperaba, nadie notó su ausencia debido al estrés que todos manejaban al estar corriendo por doquier, preparando hasta lo mínimo para la fiesta institucional que conmemoraría el cumpleaños del establecimiento.

Mientras caminaba por los pasillos se encontró con el entusiasta Ho Seok, el cual reparó de inmediato en él.

—¡Hola! ¿Dónde estabas? No te he visto en ningún comité de organización— interrogó el de gran sonrisa, quien al parecer sí habría notado la falta de Seok Jin.

—Estuve enfermo. Siento no estar ayudando en nada, pero hoy mismo veré en qué me meto.

—Tranquilo, lo bueno es que te recuperaste. ¿Puedo acompañarte lo que queda del camino a la clase?

—Claro, si eso quieres.

—Por primera vez no me evitaste.

—Se me hace cruel sacarte el cuerpo cuando tú procuras ser tan bueno conmigo. No lo mereces.

—Jinnie es adorable— comentó Ho, empleando una voz melosa y en suma graciosa.

—¡Se te da el aegyo!— exclamó el de hombros anchos a la vez que soltaba una de esas risas tan características de él.

—Jinnie ríe muy lindo— continuó.

—Basta, me va a doler la mandíbula.

Cualquiera que los viera pensaría que son amigos de años; sin embargo, no era el caso, y su esfera se vio rota al llegar al salón, donde cada uno se ubicó en su asiento; Jung con su grupo y Jin en solitario.

—Buenos días, chicos— saludó Ho Seok.

—Hobi, pregúntale a Nam qué lo tiene tan amargado. La respuesta te hará carcajear— invitó Jimin.

—Ya paren con eso, no es gracioso— replicó el susodicho.

—No entiendo qué sucede— quiso saber el más sonriente de todos.

—Sucede que a nuestro amigo, Kim Nam Joon— intervino Yoon Gi—, aquel que detestaba recibir las cartas y si las respondía lo hacía con desinterés o molestia, se encuentra en un estado de estrés gracias a que no ha recibido un escrito más desde hace varios días.

—¿De verdad?— preguntó Ho— Pobre Nam Joonie, se cansaron de ti. No debiste ser tan malo.

—¡Nunca fui malo! Es decir, sé que fui un tarado al inicio, pero ya me empezaba a acostumbrar, o sea, con el pasar de las semanas conocí más a esa persona, al punto de entender que la situación no era mala después de todo.

—Qué cursi— intervino Taehyung. —Aunque, ¿sabes? Deberías intentar colocar una carta. Hoy.

—No lo incites, sólo gastará fuerzas— expresó Min.

—Cállate, Yoon Gi, no seas mala leche— se le refirió Jimin, dejando al nombrado con una expresión entre seria y sorprendida. —Ahora, Nam Joonie, escribirás algo que le quieras decir al ó a la que está detrás de aquellos textos, cualquier cosa. En la hora del almuerzo lo pondrás en tu casillero como siempre lo has hecho y esperaremos escondidos a que el ser no identificado aparezca. Así sabremos de quién se trata y por qué no volvió a mandarte cartas. Matamos dos pájaros de un único tiro.

—¿Ser no identificado?— cuestionó Tae por la rareza del término.

—Sí— asintió con suficiencia el de mejillas prominentes y amasables.

—A mí me parece bien— accedió el más alto, provocando que sus amigos tragaran en seco por su repentina actitud en disposición al plan elaborado por Jimin.

—Entonces saca papel y esfero— ordenó Taehyung. —Manos a la obra.

🖎❤✍

La campana que anunciaba la hora del almuerzo se hizo oír por la totalidad de la estructura, provocando con ello que la horda de estudiantes abarcara los pasillos.

En el curso de los alumnos de último año yacían sus ocupantes recogiendo los libros utilizados para la asignatura culminada.

Un joven Jung Ho Seok observó cómo Kim Seok Jin salía del aula; entonces, decidido a ir tras él para brindarle su compañía, pasó al lado del puesto perteneciente al sujeto que pretendía perseguir. Un papel doblado en el asiento llamó su atención, por lo que lo recogió suponiendo que se le había olvidado a Jin. Desdobló el objeto para verificar; no obstante, su contenido lo descolocó.

"Hola, Nam Joon.

Lamento no aparecer durante estos últimos días. Atrapé un resfriado horrible y no pude asistir. Espero que no te hayas creado teorías raras a cerca de mi ausencia.

Sólo ansío que recibas ésta carta y entiendas el por qué no respondí. No abandonaría esto sin antes avisarte.

Deseo que continuemos hablando como lo veníamos realizando.

De nuevo, lo siento.

K."

Ho Seok lo unió todo: Jin enfermo durante el tiempo que su amigo no recibió textos, Jin evitándole en actos que contraen la presencia de Nam, el papel recién leído en el puesto de aquel chico.

No cabía duda.

Kim Seok Jin era la persona que dialogaba a través de puño y letra con su queridísimo amigo Kim Nam Joon.