Harry Potter y su conquista del mundo mágico

Capítulo 29 : Días del futuro pasado II

Ron Weasley se sentía seguro, más seguro de lo que se había sentido en su vida, gracias al dinero que recibieron sus padres por ayudar a atrapar al animago ilegal Peter Pettigrew por parte de Sirius Black muchas cosas habían mejorado, ya no usaba túnicas de segunda o tercera mano, pudo comprarse una varita propia, podía comprar muchos más dulces de los que en toda su vida anterior pudo, pero no solo eran las cosas materiales lo que lo hacían sentir seguro, era su último descubrimiento, un diario que pilló en uno de los basureros de la sala común de Gryffindor.

Cuando bajaba las escaleras de los dormitorios de los varones, vio como su hermana con mucho nerviosismo botaba un cuaderno y salia rápidamente en dirección a las habitaciones de las chicas, le llamó la atención el hecho, por suerte no había mucho alumnos en la sala común de los leones, por lo que disimuladamente se acercó al basurero ahí vio el cuaderno, tuvo una sensación muy extraña, era un diario con cubierta de cuero negro, por alguna razón se sentía muy interesante, tanto como para sacarlo de donde se encontraba, le limpio un poco del polvo que tenia y se lo guardo en su túnica, ya que no era muy grande.

Al principio pensó en ver que había escrito su hermana, para así quizás reírse un poco, como lo había hecho durante gran parte del verano cuando su madre le contó que se desmayó en los brazos de Harry Potter cuando este y Sirius Black vinieron a su hogar. Pero no encontró nada de ese incidente y tampoco nada de nada, el diario estaba totalmente vacío, se decepcionó un poco, pero decidió ocuparlo, años reutilizando cosas habían dejado una costumbre que era difícil de quitar, tomo pluma y tinta, iba a anotar unos apuntes de encantamientos para tenerlos un poco más ordenados, cuando la tinta toco el papel esta desapareció , esto le llamo la atención, no importaba que anotara esto desaparecía.

De repente unas palabras empezaron a formarse.

-Tus apuntes están incorrectos, si haces este hechizo de la siguiente forma tendrás una nota mucho mejor.

-Por las barbas de Merlin.-Exclamó para si mismo Ron.

El pelirrojo colocó más tinta en su pluma y volvió a escribir.

-¿Puedes hablar?.

La tinta desapareció y se formó una respuesta.

-Técnicamente estoy escribiendo, pero si, puedo comunicarme contigo, eres alguien bastante listo para darte cuenta, ¿como te llamas tú?.

El alago alegro al varón menor de la familia de pelirrojos.

-Me llamo Ron Weasley.

-Un gusto Ron Weasley, mi nombre es Tom Riddle.

Desde ese día a mediados de Enero todo empezó a cambiar en la vida, Tom como le había empezado a llamar le dio los mejores consejos del mundo, siempre estaba dispuesto a ayudarlo en sus tareas, no como esa sabelotodo de Granger, sus notas empezaron a subir exponencialmente , además Tom siempre estaba dispuesto a hablar con él, era el único que no lo veía como otro Weasley, sino que lo veía como realmente era.

-Gracias Tom por tu ayuda en transformaciones, Mcgonagall no pudo quejarse de la transformación que hice, incluso me dio varios puntos para mi casa.

-Excelente Ron, sabia que lo lograrías, pronto todos verán el gran mago que eres, después todos conocerán el apellido Weasley por ti.

-Lo se, lo se, pero gran parte de esto es por tu ayuda, me gustaría poder devolverte el favor.

"Era ridículo, Tom no era más que un diario encantado, pero aun así le tenia bastante aprecio, había sido el mejor amigo que había podido pedir, no se porque Ginny lo habría dejado, bueno seguramente este le dijo algunas verdades incomodas, Ginny podía ser muy insoportable, siempre haciéndose la niña buena ante los adultos, pero siendo grosera conmigo, junto con los gemelos, para ellos yo solo soy un objeto de burlas, nunca me valoran, para mis padres soy solo uno más.."