Capítulo 82 : La batalla de Hogwarts I

778 56 6
                                    

-AQUÍ ANDERSON REPORTANDO UNA AMENAZA NIVEL OMEGA, NO ES UN ENSAYO, RIDDLE ATACARÁ SIMULTÁNEAMENTE LONDRES Y EL COLEGIO HOGWARTS.-dijo David con tono marcial a través de su reloj hacia el cuartel general del MI7.

En el mencionado lugar todas las alarmas se encendieron, las personas que estaban de turno empezaron a trabajar rápidamente, poniendo todos los protocolos de emergencia activados.

-AQUÍ STARK ENVIANDO UN MENSAJE A TODAS LAS FUERZAS DE ORDEN Y SEGURIDAD, EL PAÍS ESTA BAJO ATAQUE DE LORD VOLDEMORT.-dijo mientras su mensaje era enviado rápidamente tanto a las fuerzas armadas como a las agencias hermanas de inteligencia como el MI5, el MI6 y las demás organizaciones anti-mágicas como la agencia de seguridad mágica de norte américa, el servició mágico Francés o el centro contra amenazas mágicas de Alemania, entre otras.

Por otro lado Sirius Black y su novia Alison Walker cenaban en un restaurante en un barrio bohemio del centro de Londres, estaban pasándola de maravilla, había olvidado la última vez que fue a una cita formal con una chica, si es que tuvo alguna, cuando joven no creía en las relaciones formales, quizás se debía a que esto lo veía muy de la mano con las costumbres de su familia, la antigua y honorable casa de los Black, incluso en un momento recordaba que su madre hablaba de la posibilidad de casarlo cuando cumpliera trece años con su prima Narcissa, lo cual le daba asco de solo pensar, pero volviendo a la realidad tenia a una rubia que le causaba placer solo de verla, esta compartía su mismo espíritu libre y aventurero, le encantaban las motocicletas igual que a él, pero por otro lado era alguien con quien se podría proyectar, con quien poder formar una familia.

"Si James supiera lo que pienso se burlaría de mi igual que yo me burlé de él cuando empezó a ponerse más serio para conquistar a Lily "

-¿Te ocurre algo Sirius?.-dijo preocupada la mujer.

-Solo pensaba..solo pensaba.

-No se te vaya fundir el cerebro.-dijo mientras llevaba una de sus manos a la frente del animago haciendo ademán de tomarle la temperatura.

-JA-JA-JA que graciosa.-dijo el hombre de largo pelo negro de forma sarcástica.

-Y dígame señor Black, ¿que problema lo obliga a llevar al límite sus facultades mentales y el ignorarme totalmente?.-dijo mientras entrelazaba sus manos sobre la mesa y ponía su mentón sobre estas.-soy todo oídos.

"Por Merlín...QUE SEXY SE VE..contrólate Black, ya ideaste un plan, aunque fue cortesía de lunático y en general sus planes solo salen bien para él...bueno no importa, eres un Gryffindor, no puedes tener miedo ahora".-se dijo a si mismo con ímpetu el hombre.

-Yo..-dijo mientras metía su mano derecha al bolsillo y sacaba una pequeña cajita.-¿quisieras ser mi esposa?.-dijo ahora abriéndola.

"Genial Sirius, el galán de Hogwarts fue el menos romántico al pedir matrimonio, estoy seguro que James me diría algo como eso"

La rubia abrió la boca sorprendida, en sus ojos se vio claramente emoción, justo cuando iba a responder con una sonrisa en su cara su rostro se desfiguró, su reloj empezó a brillar con una letra griega omega en tono rojo sangre.

-OH NOoo.-dijo inconscientemente.

El corazón de Sirius se rompió en ese momento y su rostro lo dejó saber.

-Ya veo..-dijo con toda la tristeza del mundo.

-NO, no me refiero a eso amor, si quiero casarme contigo, solo que tenemos el fin del mundo en este momento.-dijo mientras le señalaba su reloj.

El ex-Gryffindor entendió que significaba ese símbolo.

-Vayámonos.-dijo mientras sacaba un montón de billetes y los dejaba en el lugar.

Harry Potter y su conquista del mundo mágicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora