Capítulo 51 : Los caballeros de Hogwarts V

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Por unos instantes el único movimiento en la arena fue el provocado por las últimas brisas del verano, esta revolvió un poco el pelo de Harry quien veía a su rival desde unos 30 metros de altura, por otro lado David parecía indemne a las partículas de aire que chocaban contra su armadura, pero no dejando su postura de hoplita, ambos se observaban fijamente, esperando a ver quien haría el primer movimiento, no solamente en el campo de quidditch observaban la pelea, desde el cuartel general del MI7 John Stark, los cazadores de la muerte junto a Daniel y Elizabeth Anderson veían la escena, todo gracias a las cámaras dentro de la armadura del cazador siete, en la habitación se podía sentir la tensión, finalmente fue el Slytherin quien hizo el primer movimiento.

-Bombarda maxima.

Una tenue luz salió desde la punta de la varita de Harry, pero la siguieron muchas más, estas recorrieron rápidamente la distancia entre los dos combatientes chocando contra el escudo de David, grandes columnas de fuego y humo se elevaron, el joven Potter sometió a su rival a un bombardeo constante.

La tribuna de la casa verde-plata gritó con fervor pensando que el combate se habría acabado, solamente Daphne, Neville y Tracey estaban con el ceño fruncido.

Luego de más de una docena de explosiones Harry se detuvo, sudor caía por su cara, el hacer tantas detonaciones en tan poco tiempo lo agotó un poco, pero no podía perder tiempo, sabía que el escudo estaba hecho de metal duende, por lo cual era virtualmente indestructible y que las explosiones por si solas no bastarían para sacar de la arena a su rival, pero le darían un poco de tiempo, de su monedero mágico hizo salir tres serpientes, estas empezaron a caer, pero antes de que esto ocurriera el niño que vivió apunto su varita y dijo:

-engorgio

Las pequeñas serpientes de no más de 15 centímetros crecieron exponencialmente ahora alcanzando cada una 15 metros de largo.

-Empujen al tipo de armadura fuera de la arena, eviten que las hiera a toda costa.-ordenó en lengua parsel.

El humo se había despejado, los aficionados de Hufflepuf gritaron de emoción al ver la imagen que tenían en frente, el chico muggle estaba cerca del borde de la pista sin ningún rasguño, con su brazo derecho sostenía su escudo que lo había protegido de cualquier daño, mientras que desde su brazo izquierdo salía un cable, mirando hacia el otro extremo de este se notaba que había desplegado el arpón que tenía y se había incrustado en el piso, así evitando que la explosión lo lanzara lejos, el agente del MI7 retrajo el cable y miró a las 3 serpientes, estas se abalanzaron sobre él, la primera abrió sus fauces y trató de tragarse al muchacho, pero este fue más veloz, colocó su escudo en la boca de la bestia, iba a atravesar la mandíbula del reptil cuando la segunda vino  por la izquierda de este para intentar darle un cabezazo, pero el chico soltó su escudo y saltó sobre la primera serpiente, sin que ninguna de las dos lo notara, había desplegado el arpón de su brazo derecho sobre su propio escudo, mientras estaba en el aire materializó su espada que brillaba con un tono rojizo, finalmente retrajo el cable y con eficiencia clavó su arma en la cabeza de la serpiente que mordía su escudo, esta emitió un grito de dolor que fue breve, pues cayó al piso, su gran tamaño se redujo drásticamente hasta volver a su humilde forma, las otras dos serpientes estaba por atacar cuando se escucharon nuevamente explosiones, pero estas no fueron producto de un bombarda , sino de unas pequeñas rocas, más específicamente polvo peruano de oscuridad instantánea, del día se pasó a la noche en un instante.

-Ataquenlo ahora que no puede ver.-ordenó el niño que vivió.

Las serpientes obedecieron a su amo, Harry había estudiado a sus sirvientes, sabia que estas podían ver en el infrarrojo, por lo cual la oscuridad no les sería un problema.

Harry Potter y su conquista del mundo mágicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora