Harry Potter y su conquista del mundo mágico

Capítulo 31 : Días del futuro pasado IV

Draco Malfoy abrió los ojos , reconoció el techo sobre su cabeza, nuevamente estaba en la enfermería, las últimas semanas de su vida había estado ahí, ya no sentía dolor o cansancio, pero había algo que le afectaba tanto o más que eso, no podía hacer magia, o no al menos sin sufrir por ello, tanto madame Pomfrey como la señora Anderson habían hecho todo lo posible para sanarlos pero había sido infructuoso,

-Draco despertaste!

El rubio se giró a quien lo nombró, pero el abrazo fue más rápido, reconoció el pelo castaño alborotado y el aroma de su amiga Hermione.

-Hola Granger, ¿cuanto rato llevas aquí?.

-No mucho, salí de clase de transformaciones y decidí pasar a verte, mira, estaba cortando una naranja en trozos, mis papas dicen que las naranjas son buenas para la salud, he estado leyendo muchos libros, tanto mágicos como muggles, pero ninguno habla de una enfermedad sobre la que tienes tú, lo más cercano por los síntomas seria leucemia, pero no explicaría tu perdida de habilidad mágica.

-¿Leu..que?

-No importa, dejame atenderte, abre la boca.

-Puedo estar débil pero aun puedo tomar el tenedor y comer por mi mismo.

-Le recomendaría no tratar tan bruscamente a una dama señor Malfoy, especialmente si se tomó la molestia de venir a verlo y atenderlo.-dijo madame Pomfrey de manera reprobatoria.

El rubio no tuvo más opción que obedecer de mala gana y dejarse alimentar por Hermione que no podía ocultar su sonrisa, al comer Draco pudo ver que la enfermería estaba muy llena, parecía que cada día un alumno nuevo de Slytherin llegase enfermo, alumnos de séptimo año iban de camilla en camilla revisándolos a todos, la puerta de entrada a la enfermería se abrió, entró Severus Snape caminando de tal modo que su capa parecía un murciélago volando, detrás de él , venían muchos adultos, reconocía a varios, habían sido "amigos" de su padre cuando sirvió al señor oscuro.

-Madame Pomfrey, necesito que les pida a todos los que no estén en una camilla que se retiren pro favor, también necesitamos a la señora Anderson aquí.

-Entendido Severus.

La sanadora echó rápidamente a sus asistentes de último año y a las visitas, Hermione le dio un rápido beso en la mejilla a Draco y se fue corriendo con las mejillas coloradas, los padres del rubio levantaron la ceja esperando una explicación, pero su hijo no hizo más que ponerse tan colorado como un Weasley.

-Buenos días padres, para quienes no me conocen soy Elizabeth Anderson , soy medi-maga en el hospital San Mungo, he sido designada para tratar la "enfermedad" que aqueja a sus hijos, hemos llegado a una conclusión con madame Pomfrey y le pedimos al profesor Snape poder compartirla junto a ustedes y sus hijos.

Los adultos no dijeron nada, solamente asintieron en silencio para que la mujer continuara.

-Hemos podido estabilizar los síntomas, pero con un precio, descubrimos que las habilidades de sus hijos....se han ido..-dijo de forma pausada y con tristeza en su voz.

Por un instante hubo un silencia sepulcral, pero fue bastante corto.

-QUEEEE?-exclamaron al unisono la mayoría de los padres.

-¿ME ESTA DICIENDO QUE MI HIJO ES AHORA UN MUGGLE?-exclamo una madre

-ESTO ES IMPOSIBLE!-exclamo un padre.

-USTED SE EQUIVOCA!

El rostro de Elizabeth empezó a mostrar un poco de miedo, pensó que los padres la empezarían a agredir.