-¿Esta lista para proceder señora Anderson?.
-Si profesor Flamel.
-De acuerdo aquí tiene la poción.
Elizabeth y Nicolás Flamel estaban en la habitación donde descansaba Daniel Anderson, esta pieza había sido adaptada para realizar la operación con todo lo que pudieran necesitar, la medi-maga adaptó a una jeringa un frasco que contenía un liquido color rojo vino , era una poción especial diseñada entre el alquimista francés, el profesor Dumbeldore y ella, el problema con la condición de su esposo , era que habían podido evitar que las maldiciones que le aplicaron se esparcieran por el resto del cuerpo, pero no tenían una poción con el poder curativo lo suficientemente fuerte como para poder regenerar los tejidos dañados, hasta ahora, con la legendaria piedra filosofal todo era posible, le hubiese gustado que David y Sofia hubiesen estado ahí con ella, pero sabia que tenían que cumplir con su deber, al igual que ella tenia que hacer el suyo ahora, con miedo pero con firmeza en su pulso empezó a apretar la jeringa, esta estaba conectada a un pequeño tuvo que a su vez de unía con una de las venas en el brazo izquierdo de su esposo , parecía que el liquido se movía a la velocidad de un caracol, pero era solamente su ansiedad alterando su percepción del tiempo.
Una vez que el liquido rojizo estuvo dentro del cuerpo de Daniel, Elizabeth tomó su varita he hizo algunos movimientos sobre el cuerpo de su marido, una representación tridimensional del mayor de los Anderson se formo, con otro movimiento de su instrumento mágico, la sanadora pudo ver ahora los conductos de magia del hombre, era equivalente a ver un sistema circulatorio pero en colores, había muchas zonas en color negro, que denotaban las áreas contaminadas por las maldiciones que recibió, por otra parte, desde el brazo izquierdo se extendían lineas de color rojo vino , al principio lentamente, pero luego se expandieron a mayor velocidad, la mujer apretó su varita con fuerza, sus labios estaba apretados y sudor corría por su frente, veía como las lineas rojas se acercaban lentamente a las zonas negras, finalmente estas colisionaron, pareció no hacer efecto, pero lentamente las áreas oscuras fueron disipándose, miró el resto del cuerpo y era el mismo procedimiento, lento pero estaba funcionando, su marido se estaba sanado.
-Esta...funcionando...-dijo casi en un susurro.
-Si mi muchacha esta funcionando, pero debemos esperar un poco para ver si la poción que hemos utilizado solamente elimina las maldiciones o también repara el tejido , de ser lo primero le podríamos aplicar otra dosis o recurrir a técnicas más tradicionales para sanarlo.
Nicolás no podía ocultar su alegría al ver al rostro lleno de esperanza de la ex-alumna de su amigo Dumbeldore, no podía imaginarse por todo lo que esta familia había tenido que pasar , pero había podido ayudar, en comparación su vida desde que "descubrió" como crear una piedra filosofal había sido bastante tranquila junto a su esposa, esperaba que esta joven pudiese tener esa misma tranquilidad con su marido.
Pasaron varias horas, hubo que utilizar más de una dosis para poder no solo eliminar completamente las maldiciones aplicadas en el cuerpo del Hufflepuf , sino para regenerar los tejidos dañados, finalmente habían terminado con un resultado un tanto inesperado para los dos.
-¿Señor Flamel?.
-Si Elizabeth.
-¿Es idea miá o Daniel se ve más joven de lo que estaba hace unos horas?
-Por lo visto así es querida, mmm no me esperaba este resultado, aunque es fascinante, utilice el elixir de la vida como catalizador para la poción curativa que estabas administrando regularmente, pensé que el efecto rejuvenecedor no seria tan grande, lo voy a anotar en mi cuaderno.-dijo el mago francés mientras sacaba una libreta y anotaba su último descubrimiento.
ESTÁS LEYENDO
Harry Potter y su conquista del mundo mágico
FanfictionUn ataque de ira mientras era maltratado por sus tíos iniciará una serie de acontecimientos que no solo cambiaran la vida de Harry Potter, sino también las de todo el mundo mágico. Todos los derechos de los personajes originales de Harry Potter le p...