Harry Potter y su conquista del mundo mágico

Capítulo 77 : Juegos de guerra VIII

Harry caminaba por la sala de menesteres de un lado a otro nervioso, esta habitación había sido acondicionada para que tuviera el espacio de aproximadamente una cancha de baloncesto, en una de las esquinas habían varios libros con hechizos de defensa contra las artes oscuras, otros especializados en duelos o en curaciones, junto a él se encontraban Astoria, Daphne, Neville y Tracey, por otro lado ya habían llegado también Draco y Hermione, además de Crabbe, Flint, Goyle, Pany y Zabini de Slytherin, solamente faltaba el otro grupo, en la cabeza del niño-que-vivió se arremolinaban varias ideas.

"¿Podría efectivamente crearse un grupo que lograra unir a las cuatro casas?".

"¿Se lanzarían maleficios a la primera discusión?".

"¿Sabría llegarle a los alumnos que no eran de su misma casa?".

Harry se dio cuenta en ese momento que en sus tres primeros años de escuela había compartido principalmente con alumnos de Slytherin, la única excepción era Neville, pero este siendo sangre pura y con el respaldo de sus amigas se adapto bien a su grupo, su mejor amigo no era el estereotipo de Gryffindor arrogante, sumado a que este entraba cuando quería a la sala común de la casa verde-plata hacia que en ocasiones se le olvidara que este no vivía con ellos, por otro lado estaba acostumbrado a un cierto en sus relaciones con otros alumnos, el mostrarse seguro y un tanto amenazador, imponerse frente a otros, ese era el estilo de la casa de Salazar, pero las otras tres casas no funcionaban así, la casa de Godric funcionaba en base al heroísmo, a demostrar que no retrocedían de un desafió, la casa de Rowena era de los intelectuales, buscaban siempre demostrar que sabían más, tenía que mostrarse sabia con ellos, por último la casa de Helga valoraba el trabajo duro y el juego limpio.

"David no encaja muy bien ahí".-pensó mientras se llevaba inconscientemente la mano al cuello.

Los pensamientos del joven Potter fueron rotos cuando la puerta se abrió, ahí ingresó David liderando al contingente de Hufflepuf y Ravenclaw, estos estaban compuestos por los amigos del tejón, Cedric, Jacob y Edward, además de Hanna Abott , Ernie Macmillan y  Justin Finch-Fletchley, Harry conocía a estos últimos tres pues estaban en su mismo año, al lado de Cedric estaba su novia Cho Chang, Rogers Davies el capitán del equipo de quidttich de Ravenclaw y por último Rose Killigan la chica que el buscador de la casa de las serpientes creía que estaba enamorada de David.

-He guiado al primer grupo, el otro lo está trayendo Sofia.-dijo David a Harry.

-Excelente, de momento estamos bien con la hora.

-Mientras tanto, ¿podríamos hablar tú y yo un momento?, en privado preferiblemente.-dijo con mesura el ayudante de estudios muggles.

-Claro, no hay problema, acompáñame.-dijo el pelinegro.

Una puerta apareció y dio acceso a los dos muchachos a una nueva habitación, mientras estos conversaban los dos grupos se miraban con un poco de desconfianza, por suerte de ambos no tuvieron que mirarse de mala manera por mucho tiempo pues el grupo con los Gryffindor llegó, esta delegación era encabeza por Luna, Sofia y Ginny, acompañada por sus hermanos de esta última: Fred, George, Percy y Ron; por otro lado muchos miembros del equipo de quidditch de la casa de los leones los acompañaban, como Oliver Wood, Katy Bell y Angelina Johnson.

Murmullos se podían oír en el ambiente, en un momento pareció que tres cuartas partes de la sala estaban en un lado y los Slytherin en otro.

Daphne contemplo la situación, sus manos estaban entrelazadas en actitud de calma, pero sus dedos hacían un tamborileo que denotaba su nerviosismo esperando que David y Harry terminaran de conversar luego para así evitar una discusión mayor, para alivio de ella ambos chicos salieron de donde estaban, estos pudieron ver rápidamente el estado del ambiente, el tejón llamó la atención de todos con un silbido muy fuerte.