Marinette podía sentir el aire frío expandiéndose por todo su cuerpo. Consumiendo, quemando. Respiraba entrecortadamente, sentía que se sofocaba. Ella no sabía si lo que estaba viendo era una visión del akuma o no, sólo era consciente de que Adrien se estaba retorciendo frente a ella, gritando su nombre. Lucía como si estuviera agonizando. Se le encogió el corazón. Estaba sufrimiento y era por ella. ¿Por qué? Sentía que lloraba por dentro. ¿Por qué Adrien no le contó la verdad en su momento? ¿Por qué tuvo que esconder todo? Ahora era tarde... y ella no podía hacer nada.
Entonces se dio cuenta de por qué Spooky no le hacía ver ninguna visión: perder a Adrien era algo aterrador, tan horrible que su mente no podía concebirlo propiamente. El humo a su alrededor sólo era una ilusión, como todo lo que ella simbolizaba, como todo lo que el miedo era: algo que te paralizaba. Sólo tuvo que conseguir que Marinette sintiera miedo para poder tener control sobre ella, y ahora también tenía control sobre Adrien, y el miedo de él la alimentaba.
—Ahora es cuando su miedo se hace realidad —le sonrió Spooky a Marinette mientras señalaba a Adrien.
Marinette vio cómo un polvillo dorado se acercaba a ella y entró en pánico. No de nuevo, ¡no lo soportaría de nuevo! Sostuvo con fuerza su bolso, procurando que aquel polvillo no tocara a su kwami. Seguía temblando y no sabía de dónde sacaba las fuerzas para poder hacer eso. Entonces el polvillo comenzó a escalar por su cuerpo y ella sintió la desagradable y familiar sensación. Comenzó a entrarse por su boca, asfixiándose como si la mismísima Style Queen lo hubiese ordenado.
Se quedaba sin aire. Sólo contaba los segundos para desmayarse y, de nuevo, dejarse arrastrar por la oscuridad. Entonces sucedió. Adrien dijo un nombre y luego...
—...transfórmame.
No.
Adrien ya no estaba allí. Chat Noir había tomado su lugar y atacaba ferozmente a Spooky, quien lo esquivaba mientras reía. Sin embargo, a causa de eso Marinette era libre del encantamiento del akuma y podía respirar de nuevo... sólo que en verdad no podía. El miedo, el shock..., todo fue demasiado para ella. Spooky reía y ella sabía, mientras en rencor crecía dentro de ella, que no lo hacía para provocar a Chat Noir, sino porque era consciente de lo que había hecho: había quebrado la voluntad de Marinette.
—Tikki —logró decir Marinette, aún temblando. Duró unos segundos para abrir el bolso, lo que hizo que la risa de Spooky se intensificara.
Sólo estaban ellos tres. No había rastro de las chicas, quienes habían conseguido huir. Al menos ellas estaban a salvo, y ese era un consuelo para Marinette. Pero no era suficiente. Sólo Dios y Hawk Moth sabían a cuántos había matado Spooky antes de encontrarlos.
—Ti-tikki —tartamudeó Marinette—. Transfórmame...
Pero Tikki seguía allí, aterrada, observando el combate.
—Transfórmame —dijo una vez más y Tikki siguió paralizada, como en un trance. Aquello no estaba supuesto a ocurrir—. ¡Transfórmame!
—No puedo... —musitó Tikki, y Marinette comenzó a llorar. A penas podía moverse y estaba indefensa, su única oportunidad era Tikki y ella parecía lucir peor que ella.
—¡Plagg, ruge! —gritó Chat Noir e impactó el suelo con un gran cataclismo, haciendo que apareciera un gran agujero a mitad del parque y parte del suelo saliera volando a pedazos. Uno estuvo a punto de golpear a Marinette, pero él fue rápido y la empujó hacia unos arbustos, y siguió luchando, furioso, contra Spooky, sin dudar ni un segundo.
¿Qué hago?, se preguntó Marinette, sintiendo espinas atravesar su piel.
Entonces aparecieron Queen Bee y Rena Rouge, rápidas, a ayudar a Chat Noir.
ESTÁS LEYENDO
¿Quién es Hawk Moth? [#3]
Fanfiction"Ella lo tomó del brazo y le obligó a darle la cara. -¿Dónde está Félix? -le instó-. Adrien, ¿quién es Hawk Moth?"