Dos año después.Ya habían pasado un año desde la partida de Matt, los primeros días para Camila fueron muy devastadores, se sentía morir, ella pensaba que no podría salir adelante con su hija. Ella sola no podría, pero lo que no sabía era que Lauren estaba a su lado para apoyarla en todo, y eso era lo que la ojiverde estaba haciendo con ellas. Camila llegó un punto en que no se levantaba y ni salía de su habitación, ella se sentía muy mal por la pérdida de su esposo. Lauren siempre estaba ahí para cuidar a Kate mientras Camila no salía de su habitación. Ahora que ya han pasado dos años ya todo estaba un poco mejor, siempre tenían a Matt en sus memorias pero la vida sigue y deben levantarse.
Lauren estaba muy enojada con Samantha, desde hace días y también una año ellas no se encuentran. Lauren la ha evitado muchas veces, no quiere saber más de ella, no la odia, solo que odiaba que no hubiera sido sincera con ella. Dinah se había calmado un poco con Lauren. La polinesia siempre se la encontraba en la casa de Camila, pero aún no se quita ese rencor de lo que llegó hacer en el pasado.
La ojiverde estaba la vez en que Kate dijo mamá, fueron sus primeras palabras. La ojiverde ha estado con ellas los dos años que han pasado, la pequeña Kate siempre le pregunta a Camila sobre su padre, la morena ya le explicó que él está en el cielo y la pequeña lo entiende. Lauren se pasaba todo el día en casa de la morena jugando con la pequeña Kate, simplemente la quería. Ambas se llevaban bien.
—Lolo, jugar —la pequeña Kate no se cansaba de jugar. Ella no podía decir el nombre de Lauren aún.
—Debes comer Kate —le dijo su madre mientras llegaba a donde ellas estaban.
—Mamá, Lolo jugar un rato más —Kate a pesar de su edad ya podía formular más frases que se entiendan.
—Si mamá, jugar un poco más —dijo la ojiverde imitando a Kate. La morena dio una risilla al notar eso.
—Las dos son iguales. Venga ya, primero deben comer y después jugarán.
A regañadientes ambas se levantaron del suelo, estaban en la habitación de Kate, bajaron con cuidado la escaleras para llegar a la mesa donde ya estaba servida la comida. Era medio día y debían almorzar. Se sentaron y comenzaron a comer. Lo típico que hacían en la mesa era hablar acerca de lo que habían hecho todo el día ya sea en la guardería; para Kate, y sobre trabajo. Mientras hablaban la ojiverde notó un poco decaída a Camila y supuso que estaba así por que recordaba a su esposo fallecido. Al terminar de comer la morena siempre hacia que cada una recogiera su plato y lo lavara.
—¿Que te parece peque si lavamos los platos y dejamos a mamá descansar un poco? —le preguntó con una sonrisa a la niña.
—Shiii.
Camila le dio una sonrisa y se fue hacia el sofá donde se tumbo un poco, mientras las chicas iban al lavado. Claro que todo lo hacía Lauren, Kate solo jugaba con su vaso de plástico en el suelo. A Lauren no le molestaba ayudar un poco a Camila pues era algo que había prometido y también algo que le gustaba mucho. Ella podía pasar más tiempo con ambas y eso le agradaba demasiado. Al terminar de fregar los platos, se dio cuenta que la pequeña se había quedado dormida en el suelo y le dio ternura. Con cuidado la cogió en brazos y se dispuso a llevarla a su habitación. Al pasar cerca donde Camila estaba; Lauren le dio una mirada y una seña para decirle que subiría, la morena asintió. Mientras subía las escaleras con cuidado, no dejaba de verle la carita toda preciosa que tenía Kate, es que era una niña muy tierna y hermosa.
Entro a la habitación con la niña en brazos y con mucho cuidado la dejo en su pequeña cama, la cubrió con su sabana rosa con dibujos de princesas, le dio el típico beso en la frente y salió de la habitación. Ambas pasar el tiempo con ella, Lauren era buena con los niños eso lo sabía muy bien. Bajo las escaleras, luego de bajar camino hacia donde estaba la morena, ya era hora de irse pues no se quedaba a dormir en las noches. Sería un tanto incomodo para ambas o eso era lo que pensaban. La morena le dio una sonrisa al verla llegar y sentarse a su lado.
ESTÁS LEYENDO
Entre Pinceladas 2 (Camren)
RandomSEGUNDO LIBRO DE "Entre pinceladas" Antes de leer te recomiendo leer la primera historia. Una vez fuiste mía pero no eras tan mía, ahora me doy cuenta de que de verdad errar es de humanos, entiendo que fui una cobarde y que tu pensarás que solo te...