WOLF SONG 》JINSU

Capítulo 3

TEMOR A LO DESCONOCIDO

YOONGI NO ESTABA SEGURO sobre la manera en la que había amanecido en su cama, envuelto en sus sábanas, con la luz del sol pegando directamente en su cara. Extraordinariamente, los rayos tiernos entraban desde su ventana, avecinando una mañana cálida, desvaneciendo un poco las nubes espesas que siempre estaban sobre sus cabezas.

Él había abierto los ojos cuando sintió el calor de su cuerpo subiendo, y se levantó de golpe cuando los vestigios de la noche anterior golpearon sus recuerdos.

Espera, ¿fue sólo un sueño?

No recordaba mucho sobre cómo es que había dado a parar al bosque, pero si tenía muy marcado lo que sucedió dentro del espesor de los árboles. En su mente retumbaba un aullido, recordó haber tenido de frente un par de ojos centellantes, colmillos filosos y una nariz húmeda recorriendo su cuello, haciéndolo entumecer y paralizarse. Pero, aunque no supiera exactamente los detalles, no dejaba de pensar que, aquel sentimiento angustiante había desaparecido inmediatamente, trayendo consigo una familiar sensación de pertenencia, de ser querido por alguien.

Cuando bajó su vista a lo que estaba usando esa mañana, se dio cuenta que, efectivamente, tenía sólo su ropa interior y una camiseta suave, nada más. Había sido un milagro que en la noche no se hubiese muerto del frío, porque en las madrugadas, la temperatura descendía hasta el punto de verse en la necesidad de taparse con dos mantas extras, por si al caso.

Extraño, pensó, pues de alguna manera se sentía tremendamente tibio. Tendría que debérselo al pequeño sol queriendo entrar por su ventana.

Luego, se tocó el cuerpo buscándose algún rasguño, mordedura, o señal de que lo que había sucedido fuese real, pero, así como la fugaz noche se había desvanecido, de igual manera lo habían hecho todas las señales. Sólo logró tocar debajo de su camiseta el collar que nunca se quitaba, aquel que permanecía en su cuello desde niño.

Un suspiro de alivio lo dejó, y de nuevo, Yoongi se estuvo preguntando exactamente qué era lo que había acontecido la noche anterior.

Entonces, ¿sí fue un sueño?

Y cuando giró el rostro, el cristal de aquella abertura estaba corrido y la brisa entraba sin permiso, colándose entre sus mantas.

La mente de Yoongi estaba echa un lío, pero de una cosa si estaba seguro: sea lo que sea, aquella había sido la mejor experiencia que tuvo en toda su vida viviendo en Hiddenville. Esa adrenalina, ese temor y angustia, y esa sensación de protección, eran cosas que nunca había sentido, pero que pensó, valía absolutamente la pena.

Nunca se había sentido tan vivo.

—CREO QUE ES BUENO para ti salir de este pequeño pueblo, hijo —Yoongi miró a su madre con el ceño fruncido mientras se metía otro bocado de pan a la boca.

Minkyung le había estado contando esa mañana que había reunido el dinero suficiente para mandarlo a estudiar, finalmente, a la preparatoria que estaba a un par de horas fuera de la villa.

Toda su vida Yoongi había recibido educación desde casa, y nunca había tenido esa experiencia de integrarse con otros chicos de su edad. Y aunque la idea no le gustara en lo absoluto, se preguntaba cómo sería tener que convivir con otros jóvenes, compartir con ellos y comportarse como un adolescente normal.

Si tuviese que admitirlo, diría que estaba un poco curioso por entrar a la escuela, pero el pensamiento de dejar a su madre sola durante tanto tiempo, añadiendo el gasto excesivo que no tenían el lujo de darse, aplastaba totalmente toda ilusión que estuviese naciendo de su interior.