Capítulo 39

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DECADENCIA


SOEUN


"Eso significa que sus suposiciones no son más que una terrible realidad. El innombrable ha vuelto, y su ejército está formado por lobos salvajes".


MIENTRAS CAMINO HACIA el Gran Salón de la Reserva, el aire que choca contra mi rostro trae consigo un aroma familiar.

Hay una mezcla de incertidumbre y temor que me regresa a los últimos minutos del juicio, y creo que esto se debe a las palabras que Jin dijo sobre lo que él mismo inquirió.

Amo estar en mi hogar de nuevo, pero los recuerdos de días oscuros que han ocurrido en el pasado opacan completamente mi felicidad. No puedo pensar en disfrutar de mi gente, de la comodidad o la libertad que debería sentir dentro de mi pueblo, todo lo que sé es que debo estar preparada para cualquier adversidad, y hay una que está de camino hacia aquí, inevitable y devastadora.

Sigo creyendo que fue lo correcto. Haber decidido que Jin y Taehyung no estarían más en el Concejo era lo mejor, dada las circunstancias. Debo proteger a mis hijos por todos los medios, y ellos no deben saber absolutamente nada, al menos, hasta que tengamos un plan y aseguremos la información.

"El veredicto es el siguiente: teniente Kim Seokjin, los cargos que se le han impuesto se retiran al comprobarse que usted no es el verdadero culpable de las atrocidades ocurridas en la misión de reconocimiento 9293-2A. Su equipo, de la misma manera, es eximido. Sin embargo, desde este mismo momento, usted y el joven Kim Taehyung dejarán de ser parte del Concejo de los Doce Sabios, y retomarán sus obligaciones como ciudadanos, libres de la jurisdicción militar. A excepción de todos los que trabajan para el ejército, quienes deberán presentarse formalmente en el cuartel al que pertenezcan en un plazo de siete días, el resto queda en libertad, y pueden marcharse a casa".

Ellos, más que nada, son lo único que me importa ahora mismo. Ese monstruo no llegará siquiera a tocarles uno de sus cabellos, y de eso me voy a asegurar.

Innombrable o no, es momento de colocar las cartas sobre la mesa, y se requiere llamar a las cosas por lo que son para dejar de tenerles miedo. Han pasado más de treinta años, y quisiera decirle a mi padre que he tratado con demasía no volver a pronunciar esas terribles palabras, pero no tengo opción. Abrir los ojos a la verdad ha sido tan difícil como doloroso, y si mi gente necesita pasar por eso para defenderlos, entonces lo acepto.

—¿Crees que Taehyung esté bien? —pregunta Taesung a mi lado y asiento sin verlo. Me he perdido por milésima vez dentro de mis pensamientos, y agradezco que mi esposo siempre me traiga de vuelta con un simple gesto.

Reforzando nuestro agarre, respondo: —Sí. Es sólo que está molesto conmigo por permitir que Jin haya sido expuesto de esta manera. Y tiene sentido, él únicamente trata de proteger a su hermano mayor.

—No es tu culpa, cielo. Tenías que hacerlo —regaña, y siento mis labios curvarse con melancolía. Por mucho que Taesung lo diga, sigo sintiendo lo contrario.

—De todas formas, estoy segura que Jin lo traerá a casa. Hablaremos con él por la tarde.

—Y, ¿con Jin?

Vuelvo a asentir y me quedo en silencio, sin palabras que puedan darle sentido a lo que debería hacer al respecto. Es más que obvio que me comporté como una perra delante del chico que se ha robado el corazón de mi hijo, y sé que debería disculparme. Pero, sencillamente no puedo.

Sigue siendo el mismo niño que Jin trajo de la mano aquel día, hace tantos años. Esa mezcla de olores en su piel es prácticamente inolvidable. Y, tal como aquella vez, la chispa en sus ojos no sólo indicaba determinación y coraje debajo de esa capa de temor momentáneo, sino que también mostraba lo mucho que anhelaba mi aprobación, y el amor infinito que siente hacia Jin.

WOLF SONG 》JINSUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora