[Capítulo 24]

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PDV ALICIA


La semana trascurre jodidamente aburrida. No puedo salir de mi casa, ya que Des me ha informado que las cámaras están en Holmes Chapel, buscándome por debajo de cada roca que halla en su paso. Harry me visita por las tardes, vemos películas, hablamos, cocinamos o simplemente comenzamos a golpearnos con almohadas, como dos adolescentes maduros que somos.

Estamos a sábado, y Harry prometió venir para hacer cualquier idiotez que se nos ocurra. Puedo decir que en el poco tiempo que lo conozco, me… agrada. Ya no ha intentado tocarme o besarme, eso me tranquiliza. No he podido contarle cosas muy profundas de mi, que espero no sepa jamás. Adeleine me ha llamado, preguntándome cuando iré a correr nuevamente, le he tenido que mentir, y le he dicho que me he herido el tobillo. Ha insistido en venir a visitarme, pero le meto pequeñas escusas y para mi suerte, cede.

No he tenido otros repentinos desmayos, aun no puedo entender que son todas esas imágenes que se me vienen a la cabeza, una pequeña niña con un niño, una señora mayor muy familiar y el paisaje en diferentes sitios que no he estado. Me dan pequeñas clavadas en la cabeza, antes de que aparezcan aquellas imágenes. No sé si son producto de mi imaginación, pero no le he mencionado nada a Des.

Lo único que me entretiene, luego de que Harry se vaya, es montar mi motocicleta y recorrer el gigantesco lugar. Paseo todas las noches a Rocco, y luego veo la televisión, maldita sea, siguen hablando sobre mí, no tienen nada más para entrometerse.

No he soñado con mi padre, añoro bastante hacerlo, lo siento my real, y me encanta la sensación de sentir que él está a mi lado.

Se que tarde o temprano tendré que hablar, y dar la cara a las cámaras, como me dijo Jace, quien me llama todos los días, y me pregunta como estoy. Des ha arreglado todo para que solamente de los exámenes libre. Sorprendentemente Harry no se ha topado “la gran noticia” sobre mí, pero intuyo a que no durara mucho, antes que sepa, de alguna forma se que lo sabrá.

Harry me ha contado que Anne desea verme de nuevo, pero lamentablemente no puedo salir de esta mierda.

Escucho el pequeño timbre que resuena por toda la cocina. Me dirijo a un pequeño cuarto, que está justo a un lado de la cocina. Allí están las cámaras de la casa, y la que enfoca en la reja, veo el auto de Harry, y una gran sonrisa en su rostro, mirando a la cámara y con una mano en el volante. Apretó el pequeño botón rojo y lo mantengo para hablar.

-“Que desea señor Styles”-Le digo al chico de rizos, que no quita la sonrisa de su rostro.

-“Deseo ver a una chica preciosa que vive en esta casa”

-“Lo lamento, se ha equivocado”

-“Estoy seguro que no”

Ya me he acostumbrado a que me diga “preciosa”, aunque no esté de acuerdo. Dejo de apretar el botón rojo y apretó uno verde, donde puedo observar, abre las grandes rejas.

He olvidado mencionar que les di a Elizabeth y a Richard el día libre, ya que el hijo de Elizabeth, cumplirá años, y la hermana de Richard, está en el hospital, porque esta mañana dio a luz a una pequeña criatura.

Harry desaparece en la pantalla, y corro a la puerta de entrada con una pequeña sonrisa. Es la única compañía que tengo, aunque no esté muy acostumbrada.

En el momento preciso cuando abro la puerta, puedo observar el auto del rizado, aparecer ante mí.

Aparca no muy lejos de la entrada y sale del auto con su masculina figura. Estoy superando la presencia de Harry, y eso me alegra bastante.

-“Hey”-Esta con sus pantalones ajustados, una camisa abierta, la cual muestra una polera lisa blanca, sus botas café y sin esfuerzo alguno, se ve lindo.

-“Hola preciosa”-Se coloca delante de mí, y me sonríe. Sus dientes blancos están perfectamente cepillados.

-“Hazza”-Le hago una seña y me aparto para que entre. El me hace caso, entra y cierro la puerta.

-“¿Cómo estás?”-Le pregunto, mientras me dirijo al sofá.

-“¿Muy bien, y tú?”

-“Encerrada”-Me dejo caer al sofá y abrazo mis piernas, colocando mi mentón encima, y mirándolo.

-“Aun no entiendo sobre los tipos del otro día”

-“Yo tampoco”-Miento sin una pisca de pudor.

Harry se sienta a un lado de mí y me mira.

-“¿Qué quieres hacer?”

-“No lo sé, ¿y tú?”-Tomo el mando de la televisión que está a mi lado, y lo dejo en medio de ambos.


-“¿Te gustaría preparar cupcakes?”

-“¿Enserio?”

-“Claro, ven”-Me tendió su mano y sin pensarlo, la tome y me sonrió. Me guio hasta la cocina sin soltarme mi mano, era una de las pocas veces, que me la tomaba y no le daba algún reclamo. De alguna extraña forma, me sentía a gusto, y para nada incomoda.

Cuando llegamos a la cocina, nos colocamos a un lado de la isla, y le solté la mano.

-“¿Haz preparado antes?”

-“Si, ¿tú no?”

-“No”

-“Entonces, comencemos”


Harry me guio en cada paso. Tomamos un gran tazón para colocar la mezcla. Buscamos todos los ingredientes, que el rizado dijo, y lo colocamos alrededor del tazón.

-“Lo primero es doscientos gramos de harina”

busco entre los cajones de la cocina, ese objeto que se ocupa para tamizar la harina. La encuentro y se la tiendo.

-“Tú colocaras la harina”-Me dice y yo asiento. Tomo la harina, la abro y la sostengo al lado. Harry coloca la vasija agujereada encima del tazón grande, y comienzo echando harina encima, poco a poco. Harry me para, y me indica el siguiente ingrediente.

Es bastante fácil cocinar con Harry, de indica con voz suave cada paso, y me gusta ver su cara de concentración.

Cuando la mezcla esta lista en el recipiente de cupcakes, y Harry lo coloca en el horno para calentarlo.

-“Ya está, tenemos que esperar”

-“¿Que hacemos mientras?”

-“¿Dónde está Rocco?”

-“Esta por algún lugar de la casa, seguramente dormido”-Le sonrió, y salimos de la cocina, hasta mi habitación.

-“Preciosa, ¿es enserio que nunca has salido con alguien?”

Me coloco al instante tensa, mierda, odio este tema.

-“Es enserio”-Murmuro con los dientes apretados y miro a mi escritorio, fijo mi vista en el cajón que tiene.

-“Aun no puedo creer eso”

-“Que tu hayas follado ya con media escuela, no significa que sea igual a ti”

-“No te coloques a la defensiva Alicia”-Se acerca lentamente a mi por detrás, y sigue hablando-“Dejemos a tras el yo follando que siempre dices”

-“Es la simple verdad”

-“No lo es”-Me dice en el oído, y me sobresalto, me giro rápidamente y quedamos cara a cara.

-“Y tú, ¿has salido con alguien, que no sea algo por una sola noche?”

-“No”-Niega con la cabeza-“Pero puedo intentarlo”-Me mira fijamente a mis ojos, y siento como me clavan y me investigan. Siento una indirecta en sus palabras.

-“No podrías hacerlo”

-“Si podría”

-“No”

-“Si”

-“No”

-“Si”

-“Hagamos algo”-Paro la pequeña cadena idiota que siempre hacemos-“Se que tienes la apuesta con Zayn, sobre buscar una novia por cuatro meses, pero hagamos una tu y yo.

-“Te escucho”

-“Dejemos a tras de que yo pensare unas cuantas semanas para decirte si soy tu novia falsa o no. Tendrás que buscar a otra chica, y seguir con tu apuesta con Zayn, la cual será igual a la nuestra”

-“Es algo enredado, pero te entiendo”

-“Entonces si yo gano, no podrás hacer tus salidas nocturnas para follar”

-“¿Y si gano yo?”-Me pregunta realmente interesado.

-“Escoge algo”

Harry asiente y comienza a pensar. Aparta su vista de la mía y comienza a recorrer la habitación, cada paso me coloca más ansiosa.

-“Lo tengo”-Dice de repente, y se gira a mirarme-“¿Puede ser cualquier cosa, ¿cierto?”

-“Follar no”

-“Ya lo sé”-Sonríe abiertamente antes de hablar-“Si yo gano, tendrás que besarme”

Todo paro en un segundo. Oh mierda, no, no, no.

-“¿Qué?”

-“Lo has oído, tendrás que besarme si logro tener una relación con una chica”

-“¿Po-porque besarte?”-Este chico quiere volverme jodidamente loca.

-“Porque ya lo he decidido”-Extiende su dedo meñique y me observa, esperando mi respuesta.

Besarlo, ¡tendré que besarlo!

No lo lograra, no debe lograrlo, no lo hará.

-“Esta bien”-Le estrecho el dedo meñique y sé que ya no hay vuelta atrás.

Me da una gran sonrisa confiada, y nos separamos, cuando un timbre se escucho.

-“Están listos”-Me informa, y me hace una seña para que lo siga.

Volvemos a la cocina y Harry se coloca dos guantes de cocina para poder sacar del horno los queques.

Me limito a observarlo. Sus rizos están perfectamente, se ven suaves, aun no los he tocado, me sorprendo porque me apetece hacerlo. Harry frunce el ceño de concentración y saca la bandeja de queques, colocándolo en la isla.

-“En unos pocos minutos, podemos decorar”-Se saca los guantes de cocina y asiento. Comienzo a guardar cada cosa que sobra en la isla de la cocina, y Harry me ayuda en ello. Guardamos las cosas y sacamos otras, que nos servirán para decorar.

Como exactamente no sé hacer la cubierta, el rizado la hace. Espero pacientemente y él me mira por unos segundos.

-“Ahora colocamos todo esto en la manga pastelera, y decoramos”

Le sostengo el tazón mediano que saque, y Harry coloca la mezcla en la manga pastelera.

-“Ten”-Me la pasa y yo sonrío en agradecimiento.

Decoro unos cuantos, y Harry hace otros. Le coloco color encima de cada cupcakes, y sonrío cuando veo que hemos terminado.

-“Quedaron bien”-Dice Harry a mi lado.

-“Espero que sepan igual a como se ven”-Hemos hecho un buen trabajo juntos.

Miro mi móvil que esta encima de la nevera, y camino hasta allí para tomarlo.

-“¿Puedes colocarte a un lado de los cupcakes para poder tomarte una foto?”-Le digo y me giña un ojo en aprobación. Es la primera foto que le hare.

Desbloqueo le móvil y coloco la camarita, la enfoco.

-“Sonríe”-Harry obedece y da una preciosa sonrisa a la cámara. Saco la foto y la observo.

-“Perfecto”-Dice Harry a un lado de mi. Esta también mirando la fotografía.

-“Engreído”-Niego con la cabeza divertida.

-“Uno tiene que quererse”

-“Pero no te vayas al extremo”-Guardo el móvil y me acerco a un mueble. Harry me observa, pero luego le vibra su móvil, lo saca y lo mira. Es mi oportunidad, esta distraido.

Saco la harina rápidamente, tomo un puñado y me acerco por detrás.

-“Hey, Harry”-Llamo su atención, y se da vuelta, al momento que le tiro el puñado de harina en su rostro. Harry queda sorprendido y escupe la harina que se metió a su boca.

-“¿Pero que mie…?”

Suelto una gran risa al mirarlo.

-“Te pareces a Gasparín”-Sigo riendo sin poder detenerme y Harry me mira, achinando sus ojos.

-“Tu lo pediste”-Se acerca a la encimera, donde deje la harina, toma un puñado y me observa. Mi risa para al instante.

-“Oh no, no, Harry, no lo hagas”-Retroceso y Harry avanza con una sonrisa malvada.

Comienzo a correr por la cocina y el rizado me sigue.

Como era de esperarse, me atrapa desgraciadamente y me avienta el puñado de harina en el rostro.

-“¿Ahora quien es Gasparín?”-Su risa ronca suena en mis oídos y sonrío.

Voy en busca de la harina y es así como comenzamos la gran guerra de harina entre los dos.

Harry me atrapa y me avienta harina, yo me escabullo y puedo tirarle a él. Uno persigue al otro, y no me había divertido así hace bastante. Le agradezco mentalmente por haber venido hoy.

¿Fobia a los hombres? |H.S| #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora