[Capítulo 18]

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Estaba parada en medio de la nada, todo estaba oscuro a mí alrededor y no sabía dónde diablos estaba. De repente apareció algo en frente de mí, un espejo largo y grande, podía verme, estaba con la ropa de esta mañana, intente moverme, pero mis pies no cooperaban, estaban pegados al suelo. Intente hablar, pero al abrir mi boca, no salía nada de ella.

No podía hacer nada más que mirarme al espejo ¿Por qué?

Mire fijamente mi silueta, y en un pestañar de ojos, cambio algo en el espejo, apareció una pequeña niña, cabello  castaño lacio, con puntas rizadas, y un pequeño vestido verde, con calcetas cortas blancas, y zapatos blancos.

Entre cerré mis ojos en el espejo y la pequeña niña imito mi gesto. Levante una mano, y la niña la levanto, joder… no puede ser, esa pequeña niña era yo.

La niña de vestido verde desapareció, y con ello mi silueta. El espejo se volvió negro y muchas imágenes aparecieron rápidamente en ella, no podía ver exactamente que salían en las imágenes, estaban borrosas a mi vista.

De repente las imágenes salieron del espejo, en mi dirección y me agache rápidamente cubriendo mi cabeza con las manos, no podía oír nada, pero las imágenes volaban a mi alrededor. Cuando ya ninguna mas salió del espejo, saque mis manos de mi cabeza y me levante lentamente, no sabía que pasaba, las imágenes seguían dando vuelta rápidamente a mí alrededor.

Una imagen paro ante mí mientras las otras seguían dando vuelta. Apareció una pequeña niña jugando en una habitación con unas muñecas de trapo en sus manos, estaba sentada en el suelo, dándole la espalda a la puerta, cuando una mujer mayor entro en la habitación moviendo las manos al aire, no podía escuchar nada, pero la pequeña niña negó con la cabeza ,y la mujer le pesco el brazo, tirando de ella para que se parara, la niña seguía negando con la cabeza y la mujer se le veía enojada, y arrastro a la niña, quien boto sus muñecas al suelo, mientras salían por la puerta.

La imagen desapareció, estaba confundida, ¿qué mierda estaba pasando?

Había muchas imágenes volando, puedo decir que me rodeaban y ahora solo podía ver aquellas. Otra imagen apareció en frente mío, esta vez era un pequeño niño de cabello lacio y castaño, su sonrisa era grande, estaba esperando al lado de la puerta, y miraba a la ventana que estaba al lado, y volvía a colocarse en la misma posición, estaba jugando con sus manos, se veía nervioso, sus ojos eran verdes, unos hermosos esmeraldas. La puerta se abrió y paso una señora mayor, no mucho, pero se parecía bastante al pequeño niño, movió sus labios, le hablaba, pero no podía escuchar nada, entonces el niño miro detrás de la señora, una pequeña niña, la he visto antes, es la misma que estaba en la habitación jugando, solo que ahora llevaba otra ropa, y la señora no era la misma que saco a la pequeña. Ella le sonrió y el pequeño se acerco a abrazarla y le tomo la pequeña manito para guiarla al centro de la sala, donde se podían ver los juguetes y unos cuantos libros tirados en el suelo, la niña sonrió y asintió.

Entonces la imagen vuelve a desaparecerse, pero con ella, todas las demás también. Todo quedo nuevamente de negro, intente hablar, pero todo era un fracaso, hasta que aparece un rostro en grande, está en frente mío, y solo se puede observar un rostro, es una persona, pero no sé quién es, tiene los ojos cerrados, intento acercarme, pero mis pies me lo impiden. Los ojos se le abren de golpe, e intento gritar por el susto, pero nada sale. Puedo reconocer quien es el rostro, y empieza a hablar, joder lo odio, ese rostro lo detesto con todas mis fuerzas.

-“Eres una pequeña puta, ¿lo sabes, no?... nadie te va a querer en tu vida… tu padre ya no estará más contigo… eres una perra… tu madre no te quiere, entiéndelo… nadie vendrá a salvarte, esto es la vida real… te encontrare, a donde vayas lo hare”

Levanto las manos a mis oídos para no seguir escuchando y cierro mis ojos fuertemente, por favor, déjenme salir, me están torturando, déjenme salir, no quiero verlo, es un demonio, quiero salir de aquí ya, ¡ayúdenme por favor!, negué con la cabeza frenéticamente, esto no puede estar pasándome, es una jodida pesadilla, el volvió, esta hablándome, esta su rostro delante de mí.


-“Alicia, preciosa, ¡despierta ya, por favor!”-Escuche una voz, y una ligera sacudida, esa voz la conozco, es Harry, joder, no puedo abrir mis ojos, sigo en el horrible lugar. Concéntrate Alicia, vamos Alicia, puedes hacerlo.

Todo paso muy rápida por mis ojos y Harry aparece ante mí, está muy cerca, siento una mano en mi mejilla y otra en mi costado, mi respiración esta acelerada y me encuentro con dos esmeraldas mirándome preocupadamente.

-“Harry”-Susurre débilmente, mierda, ni siquiera me importa si está muy cerca, me alegro de que el este aquí, así que mi primer instinto es abrazarlo fuertemente, colocando mis manos debajo de sus brazos y hundiendo mi rostro en su cuello. Lo siento suspirar y se deja caer lentamente en su espalda, atrayéndome a mí y rodeándome con sus brazos, me está abrazando y me importa una mierda.

-“Tranquila preciosa, ya estás aquí, fue solo una pesadilla”-Me susurró en mi oído, y siento pequeñas caricias en mi espalda. Mi respiración empieza a calmarse, pero sigo temblando,  me sorprendo de que esté muy cómoda.

Harry no dice nada en unos largos minutos, sigo con mi rostro en su cuello, y he dejado de temblar ya, dios, jamás me había pasado eso, intento dejar mi mente en blanco y me levanto lentamente del cuello de Harry, el me mira atento en cada movimiento que hago y me aparto un poco, pero no mucho, no quiero alejarme, el puede volver a mi mente a atormentarme.

-“¿Estás bien?”-Me pregunta, su voz es muy suave

-“Si”-Le susurro bajo, levanto mi mano para tocarme la frente, dios, estoy sudando

-“¿Quieres hablar?”

-“No por favor, de eso no”-Le suplico, mi voz empieza a alterarse en segundos

-“Tranquila, si no quieres, no debes hacerlo”-Estira su mano hasta tocarme la mejilla, y me la acaricia lentamente, eso me relaja y apoyo mi mejilla en su palma y la tomo con mi otra mano, no quiero que la saque.

-“¿Dónde estamos?”-Me acabo de percatar que estamos en una cama y la habitación está iluminada por los rayos del sol que traspasan las ventanas.

-“Estamos en la cabaña”

-“¿Qué hora es?”-Le pregunto mirándolo, y luego quito la vista rápidamente, mierda, ¿cómo no me di cuenta que estaba sin una camiseta?

Harry con su mano libre, busca su celular en la mesita de noche que esta por su lado y lo prende para ver la hora.

-“Son las nueve cuarenta y dos”

-“¿Qué paso?”

Retiro su palma de mi mejilla y la dejo caer a la cama, sin soltarla aun. Harry me sonríe

-“Ayer llegue al lago, y no estabas, te espere por una hora y luego fui a por ti, me devolví al farol y me fui por el camino que tomaste, entonces comenzó a llover y te encontré, estabas en el suelo, apoyada en un árbol”-Cerro su boca y tomo un gran respiro, continuó hablando-“Intente que despertaras, pero estabas inconsciente, entonces te tome en brazos y te traje a la cabaña, espere a que despertaras, pero nunca lo hiciste, hasta ahora”

-“Lo siento por despertarte”-Fue lo único que dije, baje la vista y pude ver que no tenía mi camiseta de tirantes, estaba con un suéter negro, bastante grande. Harry debió darse cuenta que estaba sin comprender y se aclaro la garganta.

-“Tu ropa estaba mojada, y tenía un suéter con unos pantalones de deporte en mi auto, entonces espero no te moleste que te haya puesto eso”-Se mordió el labio inferior, estaba nervioso

Todo eso significaba que  Harry Styles me vio en ropa interior

Jodida

Mierda

-“¿Cuanto rato viste?”-Intente que mi voz sonara calmada, pero apreté mis dientes, y salió algo dificultosa las palabras

-“No me aprovecharía de ti Alicia, por si es lo que te preocupa, solamente te saque la ropa y luego te coloque el suéter, estabas helada y asía frio, no era el momento”-Me sonrió, pero no estaba del todo tranquila. Aparte esos pensamientos de mi mente y me centre en mirar un punto fijo.

-“¿Tienes hambre?, no has comido nada desde ayer”-Harry se levanto de la cama y no fue hasta ahí, que escuche a mi estomago sonar, el lo noto y rio suavemente.

-“Vamos, levanta tu trasero de la cama”-Se acerco a la ventana y recogió algo de ellas, se dio vuelta y camino hasta a mí, tenía mi ropa en sus manos.

-“Gracias”-Le dije, la ropa estaba seca, debió de haber despertado antes y haberla dejado en la ventana para que se secara. Harry seguía mirándome-“¿Puedes darte la vuelta para cambiarme?”

-“Como gustes”-Se alejo un poco más y se giro.

-“Te estoy vigilando”-Le advertí y me saque rápidamente el suéter por la cabeza, y lo remplace por mi camiseta de tirantes.

-“Sigue vigilando, tienes casi una buena vista, que pena que este de espaldas”

Harry seguía sin ninguna camiseta, entonces podía verle la espalda, tiene una gran espalda, pero nada exagerado. Me coloque el short rápidamente y lo abroche.

-“Ya puedes darte la vuelta, pero colócate algo”

-“¿No quieres que este así?”-Me preguntó juguetón, su estomago estaba marcado, no con unas líneas marcadas exagerado y unos brazos con unos grandes músculos, pero estaba bastante… atractivo con aquel físico

-“Esta demás la pregunta, sabes que no”-Busque por la habitación mis zapatos, y los encontré al lado de la puerta, camine hasta allí, los tome y me senté en el sofá para poder colocármelos.

-“Las calles ya están abiertas, ¿quieres ir a starbucks?”-Me preguntó, se estaba colocando la camiseta y tenia los zapatos a su lado.

-“Bueno, pero antes tengo que hacer una llamada”

Diablos, Elizabeth debe de estar buscándome como una endemoniada.

Tome el móvil de la mesita de noche y lo prendí, estaba apagado. En la pantalla tenia treinta llamadas de Elizabeth y Richard, diez de Des y cinco de Adeleine, y un mensaje. Me quedaba veinte por ciento de batería, y mi celular comenzó a sonar, era Des, descolgué la llamada y le di la espalda a Harry.

-“Alicia, dios, hasta que respondes”-Fue lo primero que oí antes de decir nada, dio un gran suspiro de alivio

-“Hey, estoy bien, no paso nada, solamente se me apago el móvil”-Mentí, no podía decirle que estaba con el chico que me llevo a enfermería y que ayer me desmaye en medio del bosque, le daría un infarto, sin siquiera siendo mi padre.

-“¿Estás segura?”

-“Si”

-“¿Dónde estás ahora?”-Se oía unos cuantos ruidos detrás de él

-“Voy de regreso a la casa, pero pasare a un starbucks, ¿qué es todo ese ruido?

-“Son los de reparto, acaban de traer la cuna del bebe”

-“Enhorabuena”

-“Gracias, hasta ahora todo va perfecto”

-“Espera a que tenga unos meses más, se te hará difícil”-Me burle de él, está esperando a un bebe y esta terriblemente emocionado por ser padre.

-“Tu me ayudaras”

-“Ya lo veremos”-Me gire y Harry me miraba fijamente, me hizo una seña con la mano a que nos fuéramos-“Me tengo que ir, adiós”-Le colgué antes de esperar respuesta y guarde mi móvil en mi bolsillo trasero, me acerque hasta Harry quien tenía la puerta de la cabaña abierta para mí y le agradecí silenciosamente, pase por al lado de él y baje las escaleras de la cabaña.

Espere a que Harry cerrara la cabaña y observe el lago, había solamente una canoa, debió de haberla dejado en el otro lado, ya que no podía llevar la otra y asegurarse de que no me cayera de la canoa dormida.

-“Por aquí preciosa”-Escuche una ronca voz en mi oído, y luego unas pisadas, Harry se dirigía al auto, que lo divise a lo lejos, estaba bastante sucio por fuera, camine rápidamente hasta quedar al lado de Harry.

-“Debemos lavarlo”-Le dije refiriéndome a su auto

-“Eso veo”-Sonrió y  no dijo nada más.

Unos cuantos metros más y estábamos en el auto, Harry me abrió la puerta del copiloto y suspire, nunca lograría que dejara su “caballerosidad”, que no es tan incómoda, si no fuera para las otras chicas.

Rodeó el auto y se subió, estaba todo silencioso, entonces conecto su Iphone a la radio y Ángel de  Massive Attack invadió mis oídos.

¿Fobia a los hombres? |H.S| #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora