CAPÍTULO 12

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Black Veil Brides~ In the end.

TENEIS FOTOS DE LOS PERSONAJES EN MI INSTAGRAM "juliaamontero_" EN HISTORIA DESTACADA.

CORREGIDO. 

¡Mierda! ¡Mierda! ¡Y más mierda! No me he puesto las jodidas lentillas.

Subo corriendo las escaleras y entro a la habitación. Me dirijo al baño y me pongo las lentillas marrones. Vuelvo a bajar las escaleras, esta vez más despacio, en realidad no quiero bajar y no quiero ver a Niall. Per Los golpes en la puerta no han cesado. Niall está desesperado, oigo como me llama y llama insistente a la puerta. 

Bajo y tomo varias respiraciones antes de cruzar el pasillo y llegar a la puerta. Me paró frente de esta y levanto mi mano lentamente, hasta que la poso sobre el pomo. ¿Cómo le explicó mis ojos violetas? ¿Que ha sido el reflejo de la luz? ¡Eso no se lo cree nadie!

Estoy nerviosa y varios mechones de pelo me caen sobre el rostro. Me meto los pelos sueltos detrás de la oreja con la mano que no está sobre el pomo. Aun no abro. Estoy retrasándolo lo más posible, y se que en verdad eso va a ser peor.

-Delia... ¡Delia abre! ¡Se que estas detrás de la puerta! -oigo a Niall gritar, separado de mi por una puerta entre nosotros. Puerta que no quiero abrir.

Los licántropos oyen mejor que los humanos y sabe perfectamente que estoy a centímetros de él, justo detrás de la puerta y que llevo algo de tiempo aquí, sin abrir. 

Con todo el cuerpo en tensión giro el pomo lentamente, mientras tomo una gran bocanada de aire y tatúo una sonrisa en mi rostro.

Niall está parado frente a mí. Tiene el entrecejo fruncido, entre enfurecido, curioso y confundido. Calle al instante en que me ve, después de llevar varios minutos gritando mi nombre y aporreando la puerta.

-¡Niall, qué alegría verte! ¡Hace tanto...! -digo con voz alegre e inocente intentando disimular, olvidando que le he cerrado la puerta en las narices y lo he tenido bastante tiempo ahí fuera, esperando que yo me decidiera a abrir.

-Déjate de tonterías, Delia. -dice intentando no reír por el acento que he utilizado antes.

-¿Yo? Pero si no yo digo no hago tonterías...-digo inocente.

Creo que nunca había dicho y hecho tantas estupideces juntas. 

Veo como se cruza de brazos, y los músculos de sus brazos se tensan, tiene una ceja alzada y algo agachada la cabeza, para poder mirarme a los ojos. Niall es bastante más alto que yo. 

-¿Me dejas pasar ya o seguimos con las estupideces?

-Bueno... -dudo, y me rasco la cabeza con una de mis manos-Podrías seguir con las etupi...

-Eres... Exasperante...

Me aparta suavemente y entra en mi casa como si fuera la suya. Me quedo estática, viendo como se dirige a mi salón sin siquiera yo haberlo invitado. Y luego yo soy la exasperante. Yo ruedo los ojos y bufo, este hombre si que es insoportable. Se pasea por mi casa con esos aires de superioridad y creyéndose que por su bella cara todo el mundo tiene que hacer y decir lo que él quiere. Creo que la palabra "noble" no entra en su vocabulario. Agarro el pomo y cierro la puerta.

Entró en el salón y Niall ya está sentado en el sofá.

-Y bueno... ¿De que querías hablar, príncipe Niall? -digo con mi sonrisa inocente.

Él me mira y enarca una ceja, creo que nunca había escuchado "príncipe" y "Niall" en la misma frase saliendo de mi boca.

-¿Príncipe Niall? ¿Desde cuándo me llamas así, ojos violetas? 

-Pues es que eres el príncipe, por eso te llamo... ¿Espera que? ¿Ojos violetas? ¿De que...? 

Estoy actuando como estúpida, pero no voy a decirle que si, que tengo los ojos morados, o violetas, como él los llama, y descubrir mi secreto tan fácilmente. No tengo ni idea de que decirle, y no puedo concentrarme con él mirándome y esos fuertes brazos.

-Venga ya, Delia. En cuanto los he visto has cerrado la puerta.

-Sabes sido la luz del sol reflejada en mis ojos. -eso es la vieja confiable de las películas y suele funcionar- y antes te he cerrado... Por qué... Cuando has llamado a la puerta yo estaba haciendo mis necesidades y me ha llegado la menstruación... Si la menstruación y al tu llamar no me puse nada entonces me acordé cuando te vi y... Tuve que ir a ponerme lo que tú ya sabes y no hace falta decir para no manchar nada. ¿Entiendes? -en realidad la historia no es tan mala.

Lo alucino yo sola. Acabo de inventarme una historia en dos segundos. Espero que se lo crea. Aunque ahora mismo no estoy en periodo, me terminó ayer.

-¿Enserio? -dice sin creérselo.

-Enserio...-digo segura.

-Pues no te creo... Los licántropos, por el olor que emana tu cuerpo, si te centras bien, puedes saber si está o no en tu periodo. Y ahora mismo tú no emanas ese olor. Pero si lo desprendidas hace unos dos días.

-¿Qué? Pues te fallara tu olfato. Por qué yo estoy...

A un lobo no le suele fallar el olfato, pero vamos que también espero que pueda darse el caso.

-No mientas Delia. -dice serio.

Me mira fijamente, su pelo rubio totalmente despeinado y con los brazos descubiertos, dejando al descubierto sus tatuajes. La chaqueta que traía se la ha quitado y la ha posado cerca suya.

-Pero si no estoy... -vale no tengo ni idea de cómo argumentar eso.

-Y tampoco mientas sobre tus ojos...

-¿Mis ojos? Si son de un color café normal. Los odio son muy simples...-digo mirando hacia cualquier lado meno a él.

-Ahora mismo llevas unas lentillas de un color café simple, pero tus ojos son exóticos, y hermosos por lo que he podido ver...

-¿Eh? ¿Yo...?

-¿Y como explicas lo del juicio? Estoy seguro de que fuiste tú. Te vi. No sé muy bien lo que hiciste. Pero lo hiciste. Y salvaste esos humanos. Tal como querías hacer. Me dijiste que harías cualquier cosa y lo has hecho.

-Yo no...

-Da igual... Acabaré descubriendo tu secreto. Sé que no me los vas a contar tan fácilmente.

-Yo no tengo...- es una tontería que siga negándolo pero tengo que intentarlo.

Su móvil suena y yo cierro la boca de inmediato, él saca su móvil de uno de sus bolsillos y lo enciende. Mira el mensaje y se lleva unos segundos así, luego dirige su mirada a mí.

-Tengo que irme. -dice, y por el tono veo que no tiene muchas ganas de hacerlo, puede que no le guste lo que le han dicho- Pero recuerda... -me mira a los ojos- Voy a descubrirlo. Adiós.

Dicho esto se levanta del sofá y agarra su chaqueta. Cuando está justo al lado mía, se para y me mira a los ojos, nuestros rostros están separados por centímetros. Yo estoy con los brazos cruzados, apoyada en la pared y siendo observada fijamente por los ojos claros de él. No decimos nada ninguno de los dos por unos segundos, que se me hacen eternos. 

Niall sale del salón y escucho sus pisadas detrás mía mientras se aleja. A los segundos escucho la puerta principal ser cerrada. Él ya se ha ido. 

Joder... Va a descubrirlo, lo sé. Pero va a ser lo más tarde posible.

Se que es cortito... Pero no me ha dado tiempo a más.

Sorry💓

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JULY❤

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