"Perhaps love" - (Theo James/ Dylan O'brien)

Capítulo 14

Como se los prometí, miércoles.

ps. Para los que no han visto el cast "Marcus" es Dylan O'Brien (aja, el papasito de teen wolf) y también el de la película "The Maze Runner" (basada en un libro (que es demasiado bueno, léanlo)) el trailer se estrenó ayer, así que sería bello si pudieran verlo :)

*Theo's POV*

No fue hasta que di la vuelta cuando vi algo que me llamó la atención. Marcus estaba agarrando a Donna de una manera no tan agradable. Vi como Donna trataba de alejar sus manos pero este la acercaba hacia él más y más.

- Maia. - Maia levanta su cabeza de mi pecho y me mira. - Espérame acá un momento. - Dejo a Maia en la pista un poco confundida y empiezo a avanzar entre las personas. Tengo que apurarme, sino será demasiado tarde.

- ¡Muévete imbécil! - Un idiota acaba de derramar su bebida en mi polo.

Hay demasiada gente, levanto mi cabeza para ver si Donna y Marcus siguen ahí. Al notar que ya estoy cerca me apresuro un poco más, pero... ya es tarde.

Justo cuando llego hacia ellos, Marcus agarra a Donna de la cintura y la besa. La besa como si fuera su último día, Donna al principio trata de alejarse pero después lo acerca hacia ella y lo besa también.

Mientras que veo como sus lenguas juegan siento que voy a vomitar, voy a vomitar. Donna...me mentiste, me dijiste que tú y Marcus no eran nada, ¿Por qué? ¿Por qué mentirme? Trato de protegerte, te advierto y me haces esto. Y Marcus...

Tengo que matarlo ahora.

Mis puños están cerrados mientras que observo como el beso va disminuyendo hasta que se separan. Donna voltea y me mira, trato de encontrar algún signo de arrepentimiento en su mirada pero en vez de eso, encuentro felicidad.

Donna es feliz, pero no conmigo.

Avanzo un poco más, pero ya no puedo soportarlo, voy a vomitar. Empujo a un par de chicos a la vez que salgo corriendo de la casa, lo lamento por el jardín de la dueña, pero vomito en sus orquideas lilas. Cuando creo que ya es todo, el mismo olor de mi vómito me produce otra arcada más y vuelvo a vomitar. Escucho como la fiesta sigue y el sonido de los vasos al chocar. Hace tiempo que no vomitaba y me alegro, porque no se siente para nada bien.

Uno suele vomitar cuando algo le ha caído mal, ha tomado de más, o ha visto algo que ha producido que todo su cuerpo tiemble de dolor.

Creo que me quedo con la segunda.

- ¡Theo! ¡Qué paso, estás bien! - Siento las manos de Maia en mis hombros. - Tranquilo... - Me dice mientras que me los frota.

Le hago una seña con la mano a Maia para que se vaya, no quiero mancharla.

- No me iré Theo, no lo haré. - Vomito nuevamente. Genial, la chica de la cual estoy enamorado me está viendo botar el desayuno, almuerzo y cena.

- Maia.. - Vuelvo a decir mientras que siento otra arcada más; sin embargo, esta vez ya no vomito.

- Si supieras cuántas veces hacía esto con mis amigos de París. - Excelente, ahora me habla de sus amigos.

- Necesito un vaso de agua. - Le digo aún agachado.

- Por supuesto. - Maia entra corriendo a la casa. Rayos, si que debo tener la peor suerte del mundo, seguro que es porque me llamo "Theodore". Maia vuelve con mi vaso de agua.

- Gracias. - Le digo mientras que me paro bien para tomarlo.

- ¿Mejor? - Me dice Maia mientras que acaricia mi cara. No puedo evitar cerrar los ojos cuando lo hace. Esto era lo que necesitaba para calmarme.