❀; Thirty Six.

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Felix no tocó ni nada para entrar, al fin y al cabo se trataba de su propia casa. Era temprano en la mañana, y estaba totalmente libre de trabajo o responsabilidades en ese día (sin contar a Seungmin, que era su independiente responsabilidad todos los días), así que aprovechando el tiempo que no siempre era dichoso de disfrutar, él y Changbin habían planeado parar en una cafetería y después manejar hasta la zona de Youngdong y para junto en el Parque Nacional de Songho que al parecer se estaba poniendo de moda en estos días y el novio del rubio no quería quedarse afuera. Seria algo asi como un dia de paseos, por lo que tuvo que volver a su casa para buscar su uniforme y simplemente cambiarse, porque ya se había bañado en casa de su novio y de paso avisarle a su mejor amigo que no estaría en todo el dia, otra vez.

En el trayecto con dirección a su casa, Felix quiso creer que las cosas entre Hwang y Kim se arreglaron ya que de otra forma alguno de los dos hubiera terminado llamándolo para avisarle que las cosas estaban igual de mal se habían puesto peor.

Y así como estaba en lo correcto, lo vio.

Fue reconfortante encontrarse con dos cuerpos en su sillón apenas abrió la puerta. El pequeño artista se encontraba con la cabeza recostada sobre el pecho del insoportable de Hwang, escondiendo su cara en el hueco de su cuello, y el más alto que se hallaba abajo tenía abrazando por la cintura al pequeño. Hacía mucho no veía a su mejor amigo dormir tan plácidamente, no se oía el ritmo de su respiración a causa de lo calma que se encontraba.

No pudo sentirse más contento por todo aquello. Se arriesgó a confiar en las palabras de su novio acerca de darle una oportunidad al idiota de Hwang. Permitió, como si de una figura paterna se tratara, que ellos tuvieran su omento para arreglar sus inconvenientes entre ellos y de una vez por todos encontraran el camino correcto en su acarreada vida. Si era Seungmin, básicamente se estaba nombrando a una de las personas que más amaba en el mundo. Si era Hwang Hyunjin, era sinónimo de una persona que prefería mantener lejos.

Todo aquello tampoco fue fácil para el chico de pecas.

Sigiloso, se metió en su habitación, sacó rápidamente el uniforme con el feo logo amarillo del supermercado de su mochila y en su lugar metió varias prendas que seguramente necesitaría -Felix siempre llevaba consigo únicamente lo necesario- y otra vez corrió de puntitas por todo el living hasta la puerta, misma que cerró con llave, ya que arriba de la mesa estaba la copia de Seungmin, por que cuando despertaran podrían tranquilamente abrirla ellos mismos.

Se metió tanto en su papel de no hacer ruido que hasta el camino de la casa al portón tambien lo recorrió sin apoyar su pie completamente, y esto fue visto por el pelinegro de grandes ojos en el auto. Al entrar al auto, tambien cerro la puerta intentando hacer el menor ruido posible.

Otra vez estaba exagerando.

— ¿Por qué corres sin hacer ruido?— Le preguntó divertido Changbin. —Te ves gracioso.

— Seungmin y Hyunjin están durmiendo juntos en el sillón.

Tiro su mochila a los asientos traseros del auto sin mirar a su novio sentado en el asiento del conductor. Lo conocía tanto que ya imaginaba a la perfección su expresión luego de esa simple frase.

— Oh...

— Sí, oh.— Contestó ante la vaga expresión de su novio. —Anda, vamos. Tengo hambre.

Arrancó el auto, yéndose lejos de esos dos que recién comenzaban su día y su relación.

Dentro de la casa, quien primero se movió fue Seungmin, como siempre, quien intentó separar los cuerpos que tan pegados se hallaban, sin embargo, como si fuera una película repetida una y otra vez, nuevamente sus intentos de separase de Hyunjin fueron en vano como consecuencia de los fuertes agarres que éste proporcionaba al dormir.

WATERCOLORS || HyunMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora