𝑭𝑬𝑳𝑰𝑫𝑨𝑬: 𝑇𝐻𝐸 𝐻𝑈𝑁𝐷𝑅𝐸𝐷 | 𝐁.𝐁

16

—¿Te sientes mejor?

—Gracias a ti, sí.

Skyler soltó una risa amarga. Gracias a Finn, ella y Bellamy podían estar juntos, en ese pequeño búnker que encontró. Desde ahí, Skyler envió medicina para el campamento por medio de Octavia y Finn, pero Bellamy se había negado a dejarla sola, alegando de que Clarke podía ocuparse de eso.

Bellamy estaba sentado en el pequeño sofá, con sus piernas alzadas en la mesita frente a él. A un lado, Skyler estaba colocándole paños fríos en su frente, para que todo indicio de fiebre desapareciera. Bellamy se hubiese acercado mucho más, pero había un leve detalle...

Entre ellos había una pila de cachorros felinos que interrumpían sus deseos. Estos dormían entre los regazos y pechos de ambos, ronroneando demasiado fuerte, pero eran una ternura.

—Cuando estábamos en tu casa —comenzó Bellamy, acariciando el cabello de Skyler—. Llegó este tipo...

—Tobias —nombró Skyler.

—Sí, ese —rodó los ojos—. ¿Quién es?

—Considéralo tu cuñado —insinuó.

Bellamy sonrió, y ella se rió por aquel intento de coqueteo. Dejó de colocar paños fríos en su frente y se acercó un poco más para quedar a centímetros.

—¿Y cuántos cuñados tengo? —preguntó, limpiando una mancha de sangre seca en el mentón de la pelirroja.

—Hmm —pensó, mirando hacia arriba, para después bajar la mirada y reír—. ¿Quince, tal vez?

—¡¿Quince?! —exclamó, asustando a los cachorros quienes dormían, dando un brinco— Tú sólo tienes una.

—Bueno... Cuñados de verdad tienes seis

—Y tú sigues teniendo sólo una —continuó.

—Pero los otros se podría decir que son hermanos —acotó—. Amigos desde que nací. Era tan común que nos tratáramos de hermanos, que ya ni siquiera ocupamos el término "amigo".

—Eso es genial —respondió—. Me hubiese gustado tener amigos y familia así.

—Bueno, Octavia y tú son mi familia ahora —murmuró—. Pronto todo esto terminará, y serás parte de la familia.

—¿Tú crees eso?

—Yo sé eso —reafirmó—. Mi familia sentará cabeza, Bellamy. Deberán entender que no quiero separarme de ti. Y Lincoln no querrá separarse de Octavia.

Sonrió internamente. Entre todas las chicas que había conocido, nunca encontró a alguien parecida a ella. Aunque, tal vez sí, pero ella estaba en el Arca, probablemente muerta. Skyler era su presente, y futuro.

—¿Por qué no vas al campamento? —preguntó Skyler, otra vez.

—Ya te dije. No quiero dejarte sola.

—Puedes enviar a Octavia. O Lincoln puede venir, no creo que le moleste de todas formas.

Hizo una mueca de desagrado. Eso era de lo único de lo que no habían hablado, por lo demasiado incómodo que era. No quería hablar sobre cómo su familia la intentaba tratar de traidora, sólo por apoyar a su hermano y no querer una guerra. No necesitaba una en contra de adolescentes, la mayoría inocentes. 

—¿Quieres hablar de eso? —susurró Bellamy. Skyler negó con la cabeza, tragándose sus palabras y a la vez todo lo que pensaba— Creo que deberías.

—Zak... Él... Rechazó a Lincoln. Lo echó de la familia como si nada, como si no hubiesen compartido décadas juntos, como si no hubiesen peleado juntos, como si nada. Sólo lo encontró...