Capítulo 23

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Solo sentí que me agarraron del brazo evitando que el auto me atropellara.

-Grazie - le digo aturdida al joven que me salvo.

-Prego (de nada)

Antes de cruzar me fijo bien esta vez, subo al bus y mis ojos se me cierran por el cansancio trato d no dormirme y que mi parada está cerca y no quiero que se me pase.

Luego de llegar a casa solté mis cosas en el sofá de la sala y fui directo a la habitación. Abracé la almohada de Gino aspirando su aroma y así me quedo dormida.

Siento el perfume de Gino aspiro para llenar mis pulmones de tan embriagador aroma, mi cuerpo siente sus manos en suaves caricias y mi cuello siente su humedad boca. No sé si estoy soñando pero se siente muy real y no quiero despertar, deseo tanto tenerlo a mi lado.

-Amore mio - escucho su ronca voz susurrarme al oído.

Abro los ojos la habitación esta oscura pero veo su silueta a mi lado.

-Gino...

-Estoy aquí mi vita

Me froto los ojos para confirmar que es él ya que lo veo y escucho y confirmo que no es un sueño realmente es él y esta aquí a mi lado.

-Amor llegaste... Te extrañe.

Lo beso con desespero, lo abrazo y no quiero separarme.

-Por favor no vuelvas a irte de esa manera.

-Dispiace amore (lo siento amor)

Besa mis labios suavemente mientras recorre con sus manos mi cuerpo haciendome estremecer... Ni es que sea adicta al sexo pero si soy adicta a él.

Quito su chaqueta y luego su camisa embriagandome con su aroma varonil y disfrutando de su cuerpo. Ni recordaba que aún estaba vestida así que Gino se encargó de quitar todo lo que estorbaba para poder estar dentro de mi y hacerme sentir amada con cada embestida, cada caricia, cada beso emanaba el deseo y pasión que ambos sentíamos, era como estar en el paraíso. Realmente este hombre conoce mis puntos débiles donde el placer es más intenso llevándome a la gloria.

Feliz por estar a su lado me quedo dormida en su regazo.

El molesto despertador no deja de sonar quiero seguir durmiendo pero luego recuerdo que hace dos días atrás que no despertaba así por ese molesto ruido ya que no dormía, pero el motivo de mis develó ya estaba conmigo así que no había de que preocuparse me sentía relajada...

Abro los ojos y lo veo plácidamente dormido sus cabellos revueltos lo hacen ver despreocupado. Paso mis manos por sus cabellos y él abre los ojos... Esos ojos azules que tanto me enamoran.

-Buon giorno amore

-Buenos días hermoso

El sonrie y da un tierno beso en la punta de mi nariz, luego con un ágil movimiento me sube encima de él.

-Extrañe tenerte así.

-Igual yo.

No perdió tiempo para volver a danzar en mi interior dándome el mejor de los buenos días.

Desayunamos en casa y luego nos fuimos al trabajo.

-Amore almorzaremos juntos así que espérame.

-Ok te esperaré.

Le doy un beso y bajo del auto siento la mirada de alguien y volteo para ver de quien se trata... Allí estaré otra vez ese hombre. Al verlo me sonrie causandome un desagradable escalofrío. Me giro para avisarle a Gino pero y es tarde se encuentra en el flujo vehicular. Vuelvo a ver hacia donde estaba el hombre y no está miro a todos lados y no está así que sin pensarlo entro de inmediato al restaurante, saludo a los chicos y sigo a la cocina.

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