Enamorada de un fantasma ( Justin Bieber & Tú)

Capítulo 18 Sola

Capítulo 18.

Narra _____

- ¿Hora de la muerte?.- preguntó la gruesa voz del doctor.

- Las una y media de la mañana.- taparon el cuerpo inerte, la ayudante del doctor Kennedy salió por la puerta caminando a la sala de espera donde la familia Bieber y algunos amigos esperaban noticias del reciente difunto.

- Familia Bieber.- todos se levantaron deseando saber que él estaría bien, creándose falsas esperanzas, deseando que ese accidente de tráfico no hubiese sido tan grave. Ninguno habló esperando a que la doctora hablara pero por su expresión y su suspiro, no era nada bueno.- Lo siento.- tan sólo esas dos palabras bastaron para que ____, su mejor amiga, se pusiera pálida, que sus ojos se aguaran, que su mundo se parara, que su vida ya no tuviera sentido. Él chico que la hacia sonreír cuando estaba triste o simplemente por que él quería ver esa sonrisa, él chico que la consolaba cuando mas lo necesitaba.

Sobresaltada me incorpore y seque el sudor de mi frente. Mire mis manos temblorosas y las frote. Ha sido la peor pesadilla sin duda, pensar que casi estamos así, Justin esta en coma pero es como si estuviera muerto.

- ¿Estas bien?.- mire a Justin que estaba sentado en mi silla giratoria.

- No.-negué con mi cabeza.

- Duerme, estarás cansada.-

- No creo que pueda.- el suspiró y no se de donde pero sacó una guitarra y sonreí por que sabia lo que iba a hacer y eso me tranquilizaría y a lo mejor conseguía dormir otra vez.- ¿Cuanto tiempo llevas aquí?.- él me miro y sonrió abiertamente, me alegra que este aquí, conmigo.

-  Desde que te dormiste.- me hizo una seña con la cabeza para que me recostara cosa que obedecí y comenzó a tocar la guitarra complementándola con su melodiosa voz. Así pasaron todas las noche durante dos semanas, los días los pasaba sola o con mis amigas, visitando a Justin para hablar con los doctores porque yo ya hablaba con él. Quede con Austin dos veces mas y se disculpó conmigo por lo del otro día,cada vez me gustaba mas. Por suerte Justin no hizo nada para estropearlas.

- Te llamo y quedamos otra vez.- me dijo Austin.

- Si, esta bien.- fui a abrir la puerta del coche pero Austin me lo impidió y me beso. Lento y dulce, genial. Nos separamos y nos miramos , sonreí mordiéndome el labio, el sonrio y me dio un casto beso para dejarme ir.

Me tumbe en la cama después de haber echó mis necesidades, como ponerme el pijama y lavarme la cama.

Espere a Justin horas,deseando que apareciera y me cantara otra canción para que yo durmiera.

Pero el nunca apareció.

Finamente cerré mis ojos.

Era de noche, estaba todo oscuro solo alumbrado por la luz de la luna. Sentía rabia y el no saber porqué hacia que creciera. Cogí una piedra y la tire al lago fuertemente. De repente mis oídos comenzaron a pitar haciendo que me los tapara con mis manos, solté un grito de dolor mientras las lágrimas se derramaban por mis mejillas. Abrí mis ojos y observe que me rodeaban grandes y alargadas figuras desiguales. Eran negras lo que hacia que el miedo aumentara.

Las pesadillas no cesaron en el resto de la semana. La desaparición de Justin me tenia preocupada, me sentía desprotegida por la noche sin el allí, se había vuelto imprescindible en mis noche y en mis días pero parece que el no lo sabia porque nunca aparecía.

El timbre sonó y acomode mi liso pelo, alisé mi vestido y abrí la puerta. La fiesta ya había comenzado y la casa de Noelia estaba a rebosar de gente. Sus padres habían salido de la ciudad y ella había aprovechado esa ocasión. Bailabamos todas las canciones. Mis pies dolían y decidí sentarme. Estaba sola , no encontraba a ninguno de mis amigos, suspire y cerré mis ojos.

Sentí unas manos tapando mis ojos y una risa de fondo que reconoci al instante.

- Hola Austin.-

- Hola preciosa.- dijo sentándose a mi lado.

- ¿ Estas bien? Estas pálida.- frunci mi ceño.

- Si, estoy bien, aunque un poco mareada.-

- Ven, te llevaré a un lugar.-

- Esta bien.-

- Vamos.- me cogió la mano y en ese momento se me olvido todo, me olvide de avisar que me obra aunque si iba con Austin estaría bien. Me subió en su coche. Fuimos por un camino de tierra, era de noche, la luna llena iluminaba aquel campo. Mi corazón paro de latir en cuanto reconocí el lugar, donde transcurrían mis peores pesadillas, siempre soñaba con lo mismo, me despertaba cuando veía la luz proveniente de un granero.

Primero vi el lago, mi miedo aumento, mire a Austin quien no tenia expresión alguna. Mis respiración se volvía irregular y creo que si antes estaba pálida, ahora estaba mas que eso.

-¿ Dónde me llevas?.-

- Callate.- y después río, una risa inquietante con un toque sicópata. Vi una luz a lo lejos, tenia una idea de lo que era y efectivamente era lo que yo pensaba.

El granero.

Ahora sabría lo que no desvelaban mis pesadillas, lo que nunca vi. Lo que ahora descubriría.