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POV Lauren

Estaba durmiendo plácidamente hasta que mis ojos se abrieron al escuchar el ruido de la cortina abriéndose con fuerza, mis ojos sufrieron... mis hermosos ojos.

- ¡Joder! ¡Lauren debes ir a la casa de los padres de tu chica! -abrí los ojos con dificultad viendo a mi padre de brazos cruzados frente a mi-

- ¡Pa! No es mi chica... aunque quisiera que lo fuera -eso último lo susurre, menos mal no escucho, y por cierto, ¿quien carajos le dio mis llaves?-

- Lau... debes ordenar esto, ¿para que compraste esta casa gigante si no ocupas más de 2 habitaciones? -mire a su alrededor fijándose en todo y me encogí de hombros-

- Era linda... -me defendí tratando de no darle la razón-

- Lo que sea, ¡tengo las fotos! -me mostró un sobre y estire mis manos hacía el-

Me las dio y rasgue el papel algo brusco sacando un montón de fotografías.

En la primera aparecía Camila de espalda, y las demás eran de una pequeña habitación, casi me coloco a llorar al verla, pero algo me llamó la atención...

¿Eso era?... no puede ser... ¿era un niño?

- ¡Papá! ¿Esto es un niño? -el tomo la foto y sus ojos se abrieron con una expresión temerosa-

- Hijo de puta -susurró mirando con detalle- Lauren, debemos sacarlos de ahí

- Dame un poco de tiempo -dije tomando mi cabeza, la policía era una mierda que no quería tomar el caso porque lo dieron como una 'fuga adolescente'-

- Claro, pero hazlo... ese pequeñito necesita salir al mundo real

Asentí aun algo conmocionada por aquel niño... mi padre solo se despidió porque tenía una reunión de la empresa.

Tome una vez más la foto entre mis manos, era un pequeño hermoso, su cabello castaño, ojos grandes pero no veía su color.

Necesito sacarlos cuanto antes.

Me levanté y hice mi aseo personal para solo comer una tostada que dejó mi padre en la cocina, tenía una flojera inmensa así que no tome desayuno, tome mi teléfono, un pequeño poleron formal y las llaves de mi auto.

Salí y desactive la alarma, desactivó uno de los autos que tenía un par de problemas, hice una mueca y me devolví a buscar las llaves del otro.

Subí y seguí las indicaciones del detective que contrató papá, me perdí y demore más de lo esperado, punto en contra, Jauregui. Pero era pasable, no estaba muy familiarizada con las calles.

Cuando al fin llegue, me quede contemplando la casa que tenía frente a mí, era una casa humilde de color crema con un pequeño jardín fuera, se veía bastante acogedora a decir verdad, tome aire, baje y camine directo a la puerta.

Toque suavemente con mis nudillos y en segundos me abrió una mujer de estatura mediana, pelo café y unos lentes, me miró de arriba a abajo y me incómodo un poco pero carraspee y me miró a los ojos.

- ¿Se te ofrece algo? -dijo en un tono neutro, eleve mi ceja y asentí-

- Vengo a hablar con ustedes... -me inspeccionó una vez más y algo desconfiada me dejo pasar.

- ¡Mujer! Tráeme la cerv... ¿hola? ¿tu eres? -voltee a la voz masculina que se coló por mis oídos como agua fría, no me sorprendía aquel hombre, debía ser el típico individuo que estaba acostumbrado a que le hicieran todo.

- Lauren Jauregui... -estire mi mano y él la estrechó- ¿tu eres Alejandro Cabello?

Asintió sonriendo y después de casi vomitarle en la cara me senté en una silla frente a ellos.

Changed by loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora