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Estábamos sentadas en una de las orillas de la playa, llevábamos minutos en silencio y por primera vez, lo sentía incómodo.

- Bueno... -aclaro su garganta- Dime, ¿Qué pasa?

La mire con temor y al parecer, lo noto porque se pego a mi abrazándome y me subí a su regazo escondiendo mi cara en su cuello.

- He estado con esto hace casi dos semanas -ella asintió- y no es fácil para mí, Lauren -una lágrima vago por mi mejilla-

- Camila, me estas asustando -Agarre su mano y la junte con la mía-

- Cuando tenía un par de meses secuestrada, estaba asustada pero por algún motivo, también estaba algo tranquila porque Austin no había pasado de lo verbal, una de las noches sentí risas y voces en la otra habitación y escuchaba algo conocidas esas voces, me paralice escuchando eso; Austin les decía que estaba pensando en usar otros métodos en mí; algo así como que me iba a enseñar lo que era estar con un hombre, ellos accedieron diciendo que siempre y cuando mi enfermedad se quitara, me destruí, Lauren y si no te lo dije fue por la simple razón de que no quiero que te metas en problemas por mi culpa... después de eso él cambio y me empezó a golpear y a.... a abusar de mi

- Camila... ¿Quiénes son ellos? -susurro, vi sus lágrimas en sus ojos y me partió el corazón haciendo que llorará también con ella- Camila.. por favor, dime

- Mis padres... -y solo eso basto para que los ojos de Lauren se inyectaran de furia-

*****

No me hablo en todo el camino, estaba furiosa, lo veía en la forma en la que apretaba el volante y como su respiración cada vez salía con más pesadez.

Al llegar a casa solo baje y me adentre en ella; extrañaba a Sean.

Su presencia se extrañaba, sus risas o gritos, todo de él.

Saqué mi teléfono y marque a Michael.

****

Fue casi 1 hora en la que hable con mi pequeño, estaba realmente emocionado contándome lo que había hecho con sus abuelos. Me alegraba que estuviera lejos de toda esta tensión.

Me recosté en la cama, cerrando mis ojos y deseando que esto terminara.

Muchas veces reflexiono sobre mi vida y por muy cruel que suene, agradezco que Austin me secuestró, por el simple hecho de que si no lo hubiera hecho, no tendría a mi hijo y tampoco hubiera conocido al amor de mi vida.

****

Me removí en la cama y mire la pantalla de mi teléfono, eran las 2 de la mañana y Lauren no estaba a mi lado.

Me levanté adormilada y salí recorriendo la casa, no encendí ninguna luz y busque en todas las habitaciones hasta que me frene en el balcón que daba la vista a el patio trasero.

Me acerqué a ella y la abrace por detrás, respiro hondo y no dijo nada; supongo que me vio por el vidrio, tiro su cabeza hacia atrás apoyándola en mi hombro y deje un tierno beso en su cuello.

- Lo siento mucho, mi amor -hable temblorosa y ella se volteo- Quería decírtelo pero tu reacción me preocupaba y...

- Esta bien, entiendo tu punto y lo comparto, si lo hubiera sabido, tu padre ahora estaría con la cara reventada...

- Pero porqué estas tan distante conmigo, yo... yo te necesito -dije y ella sonrió de manera genuina-

- Necesitaba pensar y descargar mi ira en el aire... -atrapo mis labios en un dulce beso que terminó en un abrazo-

- Vamos a descansar -Asintió y caminamos a la habitación-

- Buenas noches, princesa -se volteo y fruncí el ceño-

- Lauren... abrázame -escucho su risita seguido de sus manos en mi cintura-

*****

Desperté y nuevamente Lauren no estaba a mi lado, baje de la cama sintiendo el frío en mis pies, bajé a la primera planta para desayunar. Aún eran las 8.

Me acerqué al papel que había sobre la mesa y reí al ver la perfecta caligrafía de Lauren.

Amor: salí antes ya que me llamaron por una emergencia. Te espero allá, conduce con cuidado

Te amo ♥

Reí como idiota y hice mi aseo matutino; al ver la comida mis ganas de desayunar se esfumaron, así que, me dispuse a salir de casa.

Tome mi cartera, las llaves del auto y salí cerrando la puerta principal, el día estaba soleado y había una brisa agradable.

Salude a unos cuantos vecinos que había conocido hace poco y subí al auto, deje mi cartera en el asiento del copiloto y conduje por las ajetreadas calles de Miami.

Llevaba con un volumen moderado una canción aleatoria que pasaba en la radio.

Pare en un semáforo y mire a mi  alrededor, ¿de verdad tengo todo esto? Siento como si fuera ayer que estaba llorando por salir al mundo y ahora que lo tenía... sentía que podía hacer cualquier cosa.

Seguí mi camino y estacione fuera de la empresa, baje con mi cartera y llevaba mis lentes en la mano.

En la entrada fue que casi caigo desmayada, Estaban mis padres ahí y Sofi, pensé en devolverme pero las palabras de Lucy retumbaron en mi cabeza: Que te vean fuerte.

Camine a paso firme y quite todo tipo se temor de mi mente, al verme sus caras se volvieron ¿Esperanzadas? Sofí se acercó y me abrazo.

- ¡Hola! ¿Qué hacen aquí? -le pregunté y ella se encogió de hombros-

- Hola -dijo mi padre temeroso, me dieron ganas de golpearlo-¿Como estas?

- Como si nunca me hubieran secuestrado -dije sarcástica sonriendo y el bajo la mirada-

- Camila... ¿crees que podamos hablar con Lauren? -parpadee, ¿es una puta broma?- Es importante

Los mire poco convencida pero la mirada de Sofí me hizo acceder. Confiaba mucho más en ella que cualquier otra persona.

- Bien... síganme -me subí los lentes y me adentre en el ascensor, espere que ellos subieran y sentía sus miradas sobre mi-

Al llegar al último piso, Miriam me recibió con una sonrisa que se borro al ver a mis padres, negué dándole a entender que luego le contaría y ella asintió.

- ¿Está desocupada? -pregunte a Miriam que justo se sentaba-

- Si, termino hace poco.

Asentí y abrí las puertas de su oficina, su sonrisa se amplió al verme pero al ver lo que venía detrás de mí; la hizo tornarse de furia.

- ¿Qué mierda hacen aquí? -mis padres agacharon la cabeza, ¿Acaso es lo único que saben hacer?!-

- ¡Si, mi amor! Buenos días, ¿Cómo estás? ¿Bien?... yo también -dije y ella volvió su vista a mi-

- Buenos días, mi vida -me beso cortamente- Hola, psicópata -saludo a Sofí quien le sacó el dedo del medio sutilmente-

Reí y Lauren volvió a sentarse de nuevo con su cara seria, nos miró y les hizo una seña a nuestros padres para que se sentarán, yo por mi lado me senté en su regazo. Y si, quería que se molestaran. Quería que vieran que toda la mierda de Austin nunca funcionó y que ahora le tenía un mayor rechazo a los hombres, por culpa de ellos.

- ¿Qué quieren? -mi padre aclaró su garganta mirando nuestra posición-

- Esto es importante... A ambos nos despidieron y...

- ¿Quieren trabajo? -preguntó Lauren y ambos negaron-

- Bueno, antes de que sigan, me despido -Sofía se acerco a mi y me dejo un beso en la mejilla, a  Lauren, por su lado le pegó en la frente, adoro que tengan esa relación-

- Alejandro... Estoy esperando

- La otra empresa esta haciendo fraude con tus contratos

Changed by loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora