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Cuando desperté tenía ciertos malestares en la cadera, no sé porque. Quizás la vejez... no no no aun soy joven.

Me levanté aún adormilada y revise mi teléfono, me maldije al recordar que hoy Lauren salía a trotar temprano... ¡muy temprano! Estoy tan emocionada por la boda. Lo único que sé que quiero algo sencillo... pero eso aún lo debemos debatir.

Salí de la habitación y avance hasta la oficina de Lauren. Estaba vacía. Mire por uno de los ventanales y aún las estrellas estaban visibles aunque el cielo estaba más claro de lo normal.

Baje las escaleras refregándome el ojo y la vi de pie al lado de la cocina tarareando una canción. Estaba solo con el top y unos shorts que apenas cubrían lo necesario.

Me acerqué por atrás y la abrace por la cintura apoyando mi cabeza en su espalda.

- ¿Qué haces despierta tan temprano? -cerré los ojos apoyada en su espalda, la que debería preguntar eso soy yo-

- ¿Dónde estabas? Son las 6 de la mañana -murmuré bostezando-

-Fui a correr... -asentí, en este último tiempo Lauren salía a trotar muy temprano y al volver se bañaba y volvía a acostarse a mi lado- Me acabo de duchar...

Asentí y ella volteó rodeándome con sus brazos.

- Vamos a acostarnos... podemos levantarnos tarde hoy...

- Si... vamos -dije y no me moví-

- Si... ¡Vamos! Camina -dijo entre risas-

- Lau... llévame -dije con un puchero y los ojos cerrados casi cayéndome de sueño-

- Vale...-dio un piquito en mis labios y me agarro estilo nupcial- Vamos, princesa

Eso y mi espalda tocando el colchón fue lo único que recuerdo antes de dormirme profundamente de nuevo.

_____

- Camila... mi amor -sentía pequeños toquecitos en mis mejillas- Mi vida... -seguía tocando mi cara-

- Lauren... para -escuche su tierna risita y abrí un ojo- ¿Qué hora es?

- Las 10... -rodé los ojos y me tumbe en su pecho- Papá llamó...

- ¿Qué dijo?

- Qué estamos cordialmente invitadas al cumpleaños de mi tía rosa...

- ¿Quién es ella? -dije riendo y recordando que Lauren tenía descendencia cubana al igual que yo-

- Es esa tía que siempre anda de metiche viendo tus relaciones y no se preocupa de su vida -dijo con rapidez y enojo-

- ¿Te ha pasado?

- ¡Cada año! Llegó y lo primero que me dice es: ¿y la novia?... ¡agh! Me dan ganas de matarla

- Tranquila -dije riendo porque me solía pasar lo mismo- ¿a que hora es?

- A las 3 -asentí pero luego fruncí el ceño- Cancele la reunión

- Ah... ¿Qué le comprarás a tu tía?

- Lo que su amargada hija no puede comprarle

- ¿Que?

- UNA VIDA

Negué riendo y me levanté de la cama para ir a ducharme.

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- ¡Lauren! No seas infantil -me miro con cara de ofendida- Solo compra el maldito helado con fresas...

- ¡Pero! No me gustan...

- Mi amor, el helado se llama vainilla y fresas... no por ser tu te van a sacar las fresas

Changed by loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora