Changed by love

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Anoche con Lauren si que volvimos tarde, luego de pasar a comer sushi, fuimos a la playa, misma playa que visitamos con frecuencia cuando estamos libres.

Me removí al lado de ella y fruncí el ceño cuando toque su cara.

Estaba caliente y lo digo por temperatura, algo extrañada, la destapé un poco y vi la hora, 5:30, en todo caso, Lauren y yo debíamos levantarnos a las 6:30. Prendí la luz de mi velador, observando su ceño fruncido al dormir, sonreí como idiota en cuando resopló como un pequeño bebé.

Estaba más que claro que se iba a enfermar, había estornudado bastante y seguía igual de caliente, la deje dormir porque suele despertarse de mal humor si no duerme bien.

Trate de conciliar el sueño y mi mente empezó a reflexionar en mis padres.

Me salió un sollozo y sequé una lágrima que caía por mi mejilla y casi como un acto de reflejo, sentí a Lauren tomarme de la cintura y jalarme con cuidado a su cuerpo.

- Amor, dime que no estás llorando -dijo adormilada y negué contra su cuello- Hablaremos luego

- Lau, estas hirviendo -asintió y respiró hondo-

*****
Cuando volví a despertar, Lauren no estaba a mi lado.

Sentí unos ruidos en el baño y me levante rápidamente, Lauren estaba de rodillas frente a la taza del baño, me acerqué y tomé su cabello sacándolo de su cara, estaba vomitando.

Le pase una toalla y ella se puso de pie jalando la cadena, salí del baño, mientras sentía como se cepillaba los dientes y se aseaba.

Me fui a la cocina y prepare el desayuno, subí con la bandeja a la habitación y ella estaba recostada.

- Buenos días, mi vida -Dejé la bandeja a un lado y abrí el ventanal-

- Mi amor -me miro y sus ojos estaban brillantes- Me siento mal

Me acerqué a ella y puse mi mano en su frente, seguía caliente. Suspire, definitivamente, Lauren estaba enferma.

- No la saques -me dijo cuando iba a retirar mi mano- Está helada

Me recosté a su lado y apoyé mi frente en su mentón.

- Odio estar enferma -acaricie su mejilla, creo que todos lo odiábamos-

Su teléfono vibro en la mesita y lo tome entre mis manos viendo el nombre de su asistente en el. 

- Hola -conteste carraspeando- Habla Camila, Lauren no irá a trabajar hoy, esta enferma -corte y ella murmuró un gracias- Deberíamos ir a la clínica -negó frunciendo el ceño-

- Es un resfriado, siempre me da en este tiempo, ahí hay unos remedios

Era tan terca, si algo se le metía en la cabeza no se lo sacaba y muchas veces, odiaba que fuera así porque si por algún motivo llegaba a equivocarse, se ponía rabiosa.

- Ahora... no te vas de acá hasta que me digas porque te encuentro llorando de la nada -la mire con temor con el cambio de tema repentino- Camila... -tomo mi mano- ¿Fue algo que hice o yo...? -negué frenéticamente pasando mi mano libre por mi cara- Entonces dime, cariño... Odio verte llorar y no saber qué te pasa, no me gusta que me dejes afuera de tus problemas, siento que estoy haciendo algo mal o tu ya estas aburrida de m... -negué de nuevo dando un casto beso en sus labios- Dime ¿Cómo estas?

- Estoy bien -dije temblorosa y Lauren suspiro frustrada- 

- ¿Quieres hablar con alguien? Puedes hacerlo con Lucy

Salió de la cama y trate de frenarla pero me hacía a un lado, no quiero decirle... se como es y probablemente explote y se meta en problemas por ir a encararlos.

- Vamos -salió y sacó las llaves, ella estaba enojada-

Subió al auto y partió sin decir una palabra, me pase mirándola todo el camino, al llegar solo bajo y entrelazo nuestras manos.

- Una vez más, ¿quieres entrar? -dude pero asentí- Bien... -dijo algo triste- quiero hablar con Lucy -abrí mis ojos y ella sonrió-

- ¿Es psicóloga?

- Difícil de creer pero lo es -Lucy salió con una gran sonrisa y nos saludo con cariño a ambas-

- ¿Quién viene? -Lauren me apuntó- 

- No quiero que sea una plática profesional... ella confía en ti un poco más -Lauren le dijo sin dejar de mirarme y Lucy asintió-

- Vamos, Mila.

Lauren dio un beso en mi mejilla y me deje guiar por Lucy, su oficina era bastante amplia, un sillón alargado de cuero marrón, una silla enfrente de él, unas cuantas mesas y su escritorio.

- Toma asiento -obedecí- ¿Qué paso, Cami?

- mmh... he tenido demasiadas pesadillas, con respecto a lo pasado -me rasque la nuca cerrando mis ojos por un momento- Son cosas que me dañan demasiado -Lucy asintió-

- ¿Qué es? -suspire- ¿Es sobre Austin? -cerré los ojos y asentí- Tranquila, ¿alguien más? -asentí- ¿Quien?

- Mis padres -dije en un susurro y vi su cara de asombro- Ellos... ellos sabían de mi secuestro

Lucy jadeó levemente y estiro su mano, la tome y ella me dejo una pequeña caricia en esta.

-¿Lauren lo sabe? -negué- ¿Por que?

- No quiero que se meta en problemas por mi culpa -ella comprendió pensando un momento en sus próximas palabras- 

- Entiendo, ¿alguien más sabe de esto? -negué- Camila, ¿quieres saber qué opino? -la observé asintiendo- Que por muy duro que sea, debes hablar con ellos, conocer su versión y que saques todas las dudas que tienes, si quieres empezar de 0 debes borrar bien el pasado,  es duro pero esa será la forma de que liberes la tensión que cargas; Camila, piensa en eso... tu eres una mujer fuerte y puedes lidiar con esto, aprovecha que estás sin Sean y trata de recuperarte porque si sigues con esto, te va a consumir y eso no le hace bien ni a ti ni a tu familia -asentí- Dime, ¿Los viste?

- Ellos prácticamente me entregaron a Austin -ella cerró los ojos y suspiro-

- Tranquila, no le des el gusto de que te vean mal, te digo como amiga que la mejor forma es que ellos vean que a pesar de todo el daño que te hicieron, no les sirvió de nada porque demostraste que eres capaz de tomar decisiones por ti misma, refriégales en la cara que eres mejor que ellos

Sonreí y la abrace dejando un beso en mi mejilla.

- Gracias  -asintió y me pare para salir-

- Una cosa -me gire a ella- Habla con ella... -sonreí y salí de la consulta, no vi a Lauren en la sala de espera y supuse que estaba afuera, hablar con Lucy me ayudo bastante, me saco una presión que cargaba; creo que hablar con los hijos de puta me servirá para desahogarme y mandarlos a la mierda de una vez.

No puedo dejar que me afecte y como dijo Lucy, debo hacer que vean lo feliz que soy junto a mi hijo y la mujer de mi vida.

Ahora me siento realmente culpable en apartar a Lauren, lo más probable es que ahora ella este dolida con todo esto, para mas problema,  está enferma y ni siquiera se deja cuidar.

La vi sentada en la acera y me acerqué rodeando su cuello.

- Hey -susurró acariciando mis brazos- ¿Estás bien?

Se levantó y volteo abrazándome por la cintura mientras rodeaba su cuello nuevamente.

- Lauren... ¿te parece si vamos a la playa a hablar? -asintió- Debo decirte algo

- Pero, ¿ya estas mejor? -susurro contra mis labios-

- Algo... ¿Qué tal tu? ¿Sigues enfermita? -asintió con un puchero- Awww, bebé...

- Vamos, mi amor -jalo mi mano y nos dirigimos al auto-.

Ella debe saberlo.

Y esto puede cambiar todo.

O en su defecto, nada...