Capítulo 7

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—¿Dónde estoy? ¡Joder, me duele la cabeza!, todo me da vueltas, creo que voy a vomitar

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—¿Dónde estoy? ¡Joder, me duele la cabeza!, todo me da vueltas, creo que voy a vomitar.

—Estás en mi casa, y te duele la cabeza porque te he tele transportado, he quitado todo el alcohol de tu cuerpo. Se te pasará en unos minutos —añade como si fuese algo normal.

—¿Me has hipnotizado?, ¿cómo has podido hacerme esto? ¿Quién te ha dado permiso?, ¿pero quién coño eres tú? —pregunto llena de emociones contradictorias.

—No me dejaste otra opción, tuve que hacerlo, no podías controlarte, vi que no ibas a cerrar esa boca sucia que tienes. No me dejaste otra alternativa, es así de simple.

—¿Qué no te dejé otra alternativa?, ¿te estás escuchando? No soy una puta amenaza, ustedes son la amenaza para nosotros, no yo... ¡Joder! —puntualizo enfadada.

—¡El local estaba lleno y todos te estaban escuchando, no puedes ir por ahí amenazando a los míos, soy el jefe y primero está mi clan, yo protejo a los míos! No tienes la menor idea de cuantas amenazas nos acechan.

—Espera... ¿He oído bien? ¿Ahora soy una amenaza para tu clan? ¡No me lo puedo creer! ¿Dónde nos ha metido Alma?, yo no he amenazado a nadie, simplemente habéis leído mi maldita mente, no dejáis de hacerlo —grito señalando mi cabeza.

—Has hecho que mi clan se tensara esta noche. Nos has llamado chupa sangre, y eso no ha sido una gran idea por tu parte, ya te he dicho que no somos así. Voy a darte una pequeña clase de historia, voy a explicarte de dónde venimos y quién nos creó.

—¿Una pequeña clase de historia? ¡Esto es de locos, qué alguien intente despertarme de esta horrible pesadilla!

—¿Qué es lo que te asusta?, ¿qué sepa lo que piensas de mi? ¿Qué no sea lo que tú creías?, ¿qué existamos en tú magnífico mundo lleno de ignorancia? —pregunta lleno de ironía.

—Todo, me asusta todo, que lean mi mente no me gusta. No quiero vivir así, quiero vivir como siempre lo he hecho, ustedes no existen, es imposible. ¿Por qué tenéis qué saber lo que pienso?, yo no sé lo que piensan las personas, no es justo. ¡Diablos!, no tengo ni idea de como explicarme, no quiero volver más a ese local. ¡Si existen todas esas amenazas, mi hermana y yo estaremos siempre en peligro, no viviremos tranquilas sabiendo lo que sois, o lo que nos rodea! No quiero esta clase de vida para nosotras, nos iremos lejos —confieso llena de nervios llevando mis manos hacia mi cabeza.

—No nos alimentamos de vuestra sangre, no somos unos asesinos, no tienes que tenernos miedo. Créeme, no vamos por ahí matando a nadie.

—¿Ah no?, ¿entonces quién atacó a Alma? Si ustedes no se alimentan de nosotros, ¿quién lo hizo? ¿Cuántos de ustedes hay por toda la ciudad?

—Estoy intentado explicártelo, no me interrumpas, es una larga historia.

¡Dios, es tan sexy cuando se pone serio, este hombre es un pecado andante!

Entre Luces y TinieblasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora