el origen de los guardianes 2 la nueva guardiana

Parte 22

narrodor

gisel y los niños estuvieron jugando durante mucho tiempo. al final todos se acostaron en la nieve por el cansancio de la guerra. lo que nadie notó es que la luna en ese momento ilumino a gisel por unos pocos segundos

gisel

todos estábamos agotados por jugar tanto. fue increíble,

-tenía tiempo que no jugaba de esta manera - dije para mí

- siempre que jack esta cerca nos divertimos así - me dijo evelyn

- por eso  él es guardián de....- no terminé la oración, ya que noté que algo muy extraño había pasado. me levante mirando a Evelyn y ella hizo lo mismo. - ¿tú... puedes entenderme? - le pregunté

- yo te iba a preguntar lo mismo - me miró con la misma cara de confusión que yo tenía. *¿que es lo que esta pasando?*

- ¿ahora si nos entiendes? - dijo uno de los pequeños.

- creo que si - le dije, estaba tan sorprendida de que pudiera entenderlos, pero, ¿como eso es posible - deberíamos volver. debo decirle a jack de esto - dije poniéndome de pie

- no, queremos jugar un rato más - dijeron los dos gemelos con una carita adorable. iba a decirles que no pero, no hará daño esperar ¿verdad?.

- esta bien - les dije.

- yo me voy. puedes cuidarlos ¿no? - me dijo Evelyn. 

- si no hay problema - le dije. ella se fue. todavía no la notaba del todo amigable conmigo, pero, tengo una sospecha de por qué.

ahora un grupo de niños estaban jugando en el parque. excepto uno que estaba solo viendo a los demás. era de piel oscura y debía tener 10 años. tenía un balón de baloncesto en sus manos, pero, no hacia nada con él. su mirada era triste y extraña. no pude evitar acercarme a él. quería ayudarlo, no es normal que los niños estén así de triste 

- hola - dije actuando muy amigable y sentándome a su lado, ya que estaba sentado en una banca.

- hola - me dijo sin muchos ánimos.

- ¿te gusta el baloncesto? - le pregunté. el no me respondió - sabes. siempre quise aprender a jugarlo ¿tu podrías enseñarme? - le dije. él se negó con la cabeza. yo tome aire profundo. extendí mis manos hacia el balón - ¿puedo usarlo un momento? - él me lo dio y yo me levante y comencé a hacerlo rebotar. lo lance hacia él niño y este lo atrapo. - ¿no te gustaría jugar conmigo un rato? - él me miro - por favor - le puse una cara de suplica. él se levanto y comenzó a hacerlo rebotar. la verdad es que lo hacia mejor que yo.

él me lo lanzó y yo lo atrapé - mi nombre es giselle. ¿como te llamas? - le pregunté mientras hacia rebotar el balón.

- Aaron - me dijo. 

-bien Aaron ¿crees poder enseñarme como lanzar? siempre lo hago mal - le dije él negó con la cabeza.

- soy malo en baloncesto. nunca encesto - dijo eso con tristeza

- pues yo tampoco - agarré la pelota muy mal aproposito - ¿así se debe sostener? - le pregunté

- no. esta mal -

- entonces enséñame - le dije lanzando el balón. el lo sostuvo como debía ser - ahora lánzalo - cree un aro con mis manos, pero, apenas hice eso soltó el balón y volvió a sentarse en a banca *no entiendo que tiene* - ¿pasa algo? - dije hacercandome. él no me respondió - bien. si no quieres intentarlo, entonces ayúdame a mí - dije tomando el balón. - puedes crear un aro por favor - él se levantó y lo hizo y yo enceste en el aro, solo que con una sola mano.