el origen de los guardianes 2 la nueva guardiana

Parte 15

jack

- esto salió mucho peor de lo que imaginé - dije rascándome mi nuca ¿y ahora qué haremos?

- quizás si hubieras hecho el trabajo bien, no hubiera salido tan mal...- decía el canguro, solo logrando irritarme. *no tiene el derecho de echarme la culpa, hice todo lo que pude*

- quizás si alguno me hubiera escuchado, no lo habría tomado tan mal - le dije.

- ¡basta los dos! - nos ordeno hada - esto no es culpa de nadie. ella no abandonaría toda su vida para ser una guardiana, no importa como recibiera la noticia -

- ¿no hay otra manera? ¿no puede seguir con su vida normal después de ser una guardiana? - pregunté.

- ser un guardián a veces demanda sacrificios. si se convierte en guardiana, no envejecerá y llegará un momento en que sólo los que creen en ella la verán. es imposible seguir con una vida normal. además, ser guardián, no es solo un trabajo, es una vida - dijo norte. tiene razón, ser guardián no es un trabajo de medio tiempo, es toda tu vida.

- entonces ¿que aremos? - pregunto conejo.

- seguiremos siendo los 5 y encontraremos a Pitch y lo encerraremos otra vez - dijo norte decidido.

- ¿como se enteraron de pitch? - pregunté.

- encontré a varias de sus pesadillas. se están regando por todas partes, aun son pocas, pero si no hacemos algo se multiplicaran y pitch se volverá más fuerte - dijo conejo

- y por eso debemos encontrar su escondite. partiremos en mi trineo en unos minutos -

- que bien. me gustará darle una paliza a pitch otra vez...-norte me interrumpió.

- tú no iras Jack. - me dijo norte.

- ¡que! ¿por que no iré? - pregunté con un poco de molestia.

- te encargaras de cuidar de Gisel hasta que encontremos la forma de convencerla de ser una guardiana - ¿como? ¿yo?. *¿porque siempre me toca hacer lo aburrido?*

- que baya conejo. noté que le cayó bien gisel - sugerí. él no se negaría, ya que, aría cualquier cosa con tal de no subir al trineo.

- amigo, me cae bien todo aquel al que tú le caes mal - me dijo conejo. *que chistosito*

- no. ira jack. ya lleva más tiempo conociéndote a ti - me dijo - así que debe tener más confianza contigo - si supiera que es exactamente lo contrario - además, tienes que ir a deshacer el invierno. sino tendremos problemas con Madre Naturaleza -

suspire rendido, ya que, norte no iba a cambiar de opinión - esta bien, pero a la próxima que valla otro - dije apuntó de irme, pero el me detuvo.

-espera. ten una por si les hace falta - dijo dándome una esfera de nieve. yo salí por la ventana y fui a cuidar a la nueva guardiana.

momentos después...

aterricé en el balcón de gisel, abrí la puerta, entré y la cerré lentamente tratando de ser sijiloso.

- tendré que acostumbrarme a pasar el seguro - me volteé hacia donde venía la voz y vi que cierta castaña todavía seguía despierta. estaba sentada en su sofá *que raro que no la vi* - ¿te asusté? - me preguntó calmadamente.

- no, solo que, creí que estarías dormida - ella se levantó, se puso su sudadera y se dirigió hacia mí dirección.

- mejor hablemos afuera - me dijo señalando al cuarto de su mamá. salimos al balcón. por unos minutos. ninguno de los dos dijimos algo, pero luego ella me hizo una pregunta.- ¿y eso que todavía sigues aquí? -