Enemigas intimas CAMREN

Parte 3

- ¿Eso es todo lo que sabes hacer? –Preguntó la castaña desde arriba, con una amplia sonrisa.

 

Rápidamente Camila se levantó y dirigió una fuerte patada al abdomen de la castaña, patada que fue muy bien esquivada por ella y respondida con un fuerte puñetazo a su cara, imposible de esquivar. Camila se llevó la mano al lugar de la cara donde había sido golpeada, dolida.

 

-Vas de mal en peor  -Se reía Lauren, observándola.

 

Nuevamente Camila hizo un rápido movimiento con su pierna, esta vez dirigida a las piernas de Lauren, consiguiendo que la Castaña no la esquivara y provocando que cayera al suelo. Camila sacó las esposas y, cuando fue a acercarse a ella, la castaña sacó su pistola, apuntándola a la cabeza.

 

-Suelta eso –Exigió Lauren, refiriéndose a las esposas, levantándose y acercándose a Camila.

 

Camila obedeció rápidamente, dejando caer las esposas al suelo, ahora sí se temía lo peor.

 

-¿Sabes? Creía que los que se ponían pasamontañas eran los ladrones, no los policías –Decía con una sonrisa vengativa, llevando su mano al pasamontañas de Camila, dispuesta a quitarlo.

 

Camila agarró rápidamente la mano de Lauren y la giró, provocando que, por la presión, Lauren se agachara.

 

-¡Jo*der! –Se quejó la castaña por el dolor en su muñeca.

 

Aprovechando ese momento de distracción, Camila se agachó para coger la pistola, pero fue detenida por Lauren, quien la empujó, provocando que volviera a caer al suelo. Esta vez sí Lauren se posicionó encima de ella, ya sin pistola y agarrándole los brazos para que no la golpeara.

 

-Venga, déjame ver tu asquerosa cara –Pidió Lauren, llevando sus manos al pasamontañas de Camila y quitándolo en un rápido movimiento.

 

Lauren dejó al descubierto la cara de Camila, quedándose sorprendida pues, para nada, era una cara asquerosa, todo lo contrario, tenía unos ojos hermosos. Camila, por su parte, se dio cuenta de que era mucho más guapa en persona y de cerca que en fotos y no pudo evitar dirigir su mirada a los carnosos labios de la Castaña, por alguna razón que no sabía deseaba besarlos.

 

Silencio, silencio y silencio, eso era lo único que se escuchaba mientras ambas se miraban, analizando cada detalle de sus caras. Todo ese silencio fue interrumpido por Austin y Normani, quienes entraban en el almacén preguntando a gritos.

 

-¿¡Camila estás aquí!?

Lauren, desde arriba sonrió.

 

-Así que te llamas Camila

Camila no respondió, estaba demasiado nerviosa.

 

-Encantada ­–Dijo Lauren, con una amplia sonrisa y quitándose de encima de Camila-Espero volver a verte.

Después de escuchar esa frase Camila observó como Lauren echaba a correr y ella sólo la miró, sin hacer nada para intentar detenerla. A los pocos minutos llegaron Normani y Austin, quienes la vieron tirada en el suelo y sin pasamontañas.

 

-Mila, ¿estás bien? –Preguntó rápidamente Mani, acercándose a ella, asustada por si le había pasado.

-Aún sorprendida por todo lo que había pasado- Sí… -Dijo simplemente, incorporándose.

-¿Qué pasó? ¿Estuviste aquí con ella? ¿Te vio la cara? –Preguntaba Austin.

-Sí, sí me vio… -Dijo, nerviosa, llevándose las manos a la cabeza y respirando hondo- Además sabe mi nombre –Informó.

-¿Qué? Pues estamos jodi*dos… -Dijo Normani.

 

Camila guardó silencio y cerró los ojos, recordando ese momento de cercanía que había tenido con Lauren.

 

-¿Te dijo algo? –Preguntó Austin, provocando que Camila saliera de sus pensamientos.

-      No… no sé, no me dijo mucho… yo ni si quiera le hablé, no escuchó mi voz –Explicaba Camila.

-Bueno, yo creo que ya está bien por hoy, es mejor que regresemos a la comisaría –Propuso Mani.

- Sí, tienes razón, ya mañana vemos qué hacemos –Apoyó Austin a Normani, agarrando las manos de Camila para que se levantara.

-¿Y a ustedes cómo les fue con Justin y Joe? –Preguntó Camila, recogiendo su pistola y su pasamontañas, ya de pie.

-Pues… mal, se escaparon y como nos dijiste que no disparáramos, no lo hicimos –Explico Austin.

-Mañana tenemos trabajo –Anunció Camila- Tenemos que averiguar quién era la mujer con la que quedaron en el restaurante y dónde van a volver a actuar. También quiero toda la información de la Castaña. Padres, amigos, enemigos, hermanos, primos, novios, ex – novios… todo, lo quiero todo.

­-Sorprendida por esas peticiones- ¿Para qué? –Preguntó Normani.

-Porque sí, lo quiero saber todo de ella –Respondió seriamente, mientras los tres se dirigían a la salida del almacén.

-Bien, como quieras, entonces mañana comenzamos la investigación –Concluyó Austin.

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Apartir de hoy solo actualizare los Jueves ya que mañana entro a clases ><" 

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