Parte 41

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La castaña estaba petrificada y demasiado sorprendida, mirando Camila, observando cómo varias lágrimas salían de sus ojos.

-¿Qué estás haciendo, Mila? –Preguntaba Lauren, mientras Austin la esposaba.

Camila no respondió, simplemente continuó apuntándola y dejando que las lágrimas salieran de sus ojos, mirándola.

-¡Dijiste que confiáramos la una en la otra, que confiabas en mí! –Comenzaba a gritar Lauren, mientras Austin le hablaba, diciéndole sus derechos- ¡Eres una mentirosa, una falsa, una imbé*cil! –Comenzaba ahora a insultar, con los ojos húmedos- ¡No...

Lauren no pudo acabar la frase, pues Austin la empujó hacia la salida del almacén. En cuanto se llevaron a Lauren, Normani abrazó a Camila, quien lloraba desconsoladamente.

-Hiciste lo mejor Mila... -Fue lo único que se le ocurrió decir, mientras la abrazaba.

Camila no respondió a eso, simplemente lloró, dejando caer su pistola al suelo.

-Me va a odiar de por vida Mani... -Decía la pequeña, entre tanto llanto.

-Y tú deberías hacer lo mismo –Respondió claramente, abrazándola- Olvídate de tanta tontería y piensa que es tu enemiga, ¿vale? Es tu enemiga, nada más.

-¡Me acosté con ella Mani! -Dijo rompiendo el abrazo y gritando, sin importarle que los demás policías la oyeran- La amo, la amo Mani, la amo... -Decía, provocando que al decir esas palabras sus lágrimas salieran aún con más intensidad- Eso no es una enemiga para nadie.

-Bueno pues... íntima, a partir de ahora es tu enemiga íntima, ¿Ok? Olvídate de todo lo demás.

-¿Cómo va a ser mi enemiga íntima, Mani? Por Dios, déjate de tonterías –Dijo, secándose las lágrimas y tratando de tranquilizarse un poco.

-Lo es Mila, quieras o no es tu enemiga íntima –Camila guardó silencio, pensando en eso- Y... ya, no hablemos, vamos a la comisaría, tenemos un interrogatorio que hacer.

-¿Yo también tengo que interrogarla? –Preguntó, caminando en compañía de Normani hacia la salida del almacén.

-Si quieres sí, tú eres la jefa, tú decides.

-Suspiró- No sé... no sé qué haré.

Camila y Normani se dirigieron a la comisaría, dónde ya estaba Austin.

-¿Qué tal? ¿Cómo está? –Preguntó Camila, entrando en el despacho de Austin.

-Pues mal, muy mal, de los nervios –Respondió el castaño- Se puso muy agresiva y costó meterla en el coche, pero ya está en la celda. En un rato voy a mandar a que la suban a la sala de interrogatorio. ¿Quieres hacerlo tú o prefieres que lo hagamos nosotros? –Preguntó.

-Lo pensó un momento- Yo, quiero hablar con ella –Respondió finalmente.

-¿Segura? –Preguntó ahora Normani.

-Sí, necesito... que me explique

-Está muy nerviosa Mila, te va a decir de todo menos bonita –Advirtió Austin.

-Me da igual. Voy a hablar con ella y punto –Decidió.

Veinte minutos más tarde habían trasladado a Lauren a la sala de interrogatorios. Había un cristal en el que, desde fuera, se podía ver lo que pasaba dentro, pero desde dentro no se podía ver lo que pasaba fuera. Camila respiró hondo y entró, encontrándose con la mirada de Lauren.

-¿Qué haces aquí? Lárgate –Exigió la Castaña, casi sin dejar que Camila entrara.

Camila no respondió, simplemente entró y cerró la puerta, sentándose en frente de ella.

-Todavía no sé como tienes la cara de venir aquí, sinvergüenza –Comenzaba de nuevo Lauren.

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Chicas me desperté con la fea noticia de que Camila confirmó que esta de novia del mojón,¿Es cierto?.
Las quiero mucho <3
   

Enemigas intimas CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora