—¡Sal de ahí, imbécil!
—¡Déjame sólo!
Escondido, Jungkook escuchaba el escándalo que hacían padre e hijo.
Con dieciséis años, estaba escuchando la amarga pelea de ambos Kim. No tenía ganas de abrir las puertas debajo de la mesada de la cocina, las cuales se supone tendrían alimentos, y estaban vacías.
Siempre se escondía allí cuando Taehyung era atacado por su padre. No hacía nada, sabía que Taehyung era rápido para esconderse en su habitación y cerrar con llave hasta que su padre llegase. Sabía que ahí no sería golpeado.
—¡Te pasará lo mismo que a tu madre si no abres la puerta!
Cubrió sus ojos con las palmas de sus manos, raramente la madre de Taehyung y la de él murieron en situaciones similares.
Ah, aún recordaba ese día.
Tenía 15 recién cumplidos. Acababa de volver de la escuela. En casa, su madre lo estaba esperando, pues iba a presentarle a quien sería su nuevo padre. Sí, su madre estuvo años conociendo a un tipo e iba a presentarselo a su hijo cuando estaban por casarse. No la entendía, pero tampoco la juzgaba.
El padre de Jungkook se fue de casa cuando él tenía dos meses de vida. Por lo que nunca le importó tener un padre.
Kim se veía diferente a los idiotas que su madre solía invitar a casa. Kim era un hombre que se veía respetuoso y tranquilo, siempre con una sonrisa. Pero Jungkook sabía algo, su hijo no era bueno ocultando moretones.
Nunca se habría imaginado que esas lesiones eran causadas por la pareja de su madre.
Ese día, más exacto en la noche, sentía paz. Algo inesperado para él, pues siempre sentía que algo malo pasaría.
En fin, estaba en su habitación, escuchando música fuertemente en sus audífonos. Cuando la canción terminó, escuchó un grito y un golpe seco.
Preocupado de que su madre se haya lastimado, corrió fuera de su habitación, lanzando sus audífonos al suelo y tropezando una vez en el pasillo.
Tirada en el suelo, ensangrentada, sostenida por un preocupado y viejo Kim. Eso era todo lo que recordaba aquella noche, y también aquella frase.
»— Cayó de las escaleras, no pude atraparla a tiempo.«
Odiaba ese recuerdo.
Así que cuando escuchó la puerta de la habitación romperse, y a Taehyung gritando, se asustó.
Pero no salió, no lo hizo porque Taehyung se lo había advertido.
»—Él es capaz de matarnos, por favor, nunca lo enfrentes. Sé por qué te lo digo.«
No quería morir, pero no podía dejar que el mayor sea lastimado, no más de lo que lo era frecuentemente.
Un ruido sordo nuevamente, esa noche era horrible.
—¡Debiste romperte el cuello al caer! ¡Como tú madre!
Cubrió sus orejas con miedo, no quería escuchar más. Incluso podía jurar oír como Taehyung escupía sangre.
Esperó al tan ansiado portazo de la puerta principal. Ese que les avisaba que vivirían otro día más.
Con cuidado, abrió la pequeña puerta, desde allí sólo podía ver los pies de Taehyung, tirado en el suelo.
Salió rápidamente de su escondite, y resbalando con la sangre para luego caer de rodillas, se agachó a su lado.
—Sigo vivo.— ¿Cómo podía sonreírle tan sinceramente luego de caer de las escaleras? No lo comprendía, quería llorar de la frustración, pero no se lo podía permitir, no delante de Tae.
Ese día había sido uno de los peores, porque casi había perdido al amor de su vida.
...
Abrió los ojos de golpe. Más que un recuerdo se trató de una pesadilla que había vivido en carne y hueso.
Cuando pudo desvestir al mayor en aquella ocasión, pudo observar las viejas heridas producidas por caer de las escaleras en la zona de sus costillas.
Observó al joven que dormía plácidamente a su lado, y lo envolvió en un abrazo. Porque ambos lo necesitaban, se necesitan.
Su abrazo fue correspondido. Pudo sentir el dulce aroma de sus cabellos, y en ese momento se prometió el hacerlo la persona más feliz. No importaba si luego él era quien caía escalón por escalón.
Quería lo mejor para su amor.
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Dicen ≥VKook≤
FanfictionTodos decían que eran enemigos. Que se odiaban. Que peleaban. Que no podían siquiera verse. Que estaban juntos por obligación. Decían, pues no sabían la realidad. No sabían que esas miradas iban más allá del odio, y que esos moretones no eran de ira...