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—¿Y me dirás dónde está él?

Demonios, esa chica salía de cualquier lado, llevaba siguiéndolo todo el día.

—¿Por qué te interesa tanto?— preguntó una vez llegaron a la azotea, admitía que estaba sólo un poco celoso.— ¿Te interesa?

—Oh sí, me interesa saber dónde está, así puedo preguntarle si pones una cara tan erótica cuando te lo hacer. Sé que tú no me vas a responder eso, así que se lo voy a preguntar a él.

Hablaba tan rápido que parecía que no respiraba, e incluso con esa velocidad, Taehyung había entendido a la perfección, sorprendiendo se.

—¿Qué?...¿De qué hablas?, ¿Quién eres?

—Oh, olvidé presentarme...—Sonrió aún más, mostrando su dentadura blanca.—Me llamo Nicole. Newyorkina de padres coreanos.

Taehyung aceptó el apretón de manos que la joven ofrecía. Aún estaba inseguro.

—Kim—

—Kim Taehyung, te conozco, te ví en clases.

—¿Compartimos clases?

—Es entendible que no me conozcas, —Restó importancia.— estás en tu mundo con Jeon siempre. Nadie puede traspasar su burbuja.

—Sí... Bueno, ¿Para qué querías saber dónde está?

—Ya te lo dije, Quiero saber si en verdad es tan erótico cuando ustedes tienen relaciones.

—Pe...Perdona, nosotros no tenemos relaciones.— Su rostro ardía, tenía mucha Vergüenza.

—¿No?— Taehyung negó.— ¿Ni siquiera son novios?— tardó un poco, pero recibió otra negación.— Uh...Pero...¿Qué son?— Lucía decepcionada.

—¿A-amigos? Tal vez.

—Amigos. —Hizo un puchero.— En Verdad parecen novios, ¡Son tan lindos juntos! Son el uno para el otro.

—Sí, mira, debo volver a casa, Jungkook me debe estar esperando en la salida.

—¡OH, claro, claro! Intercambiemos números ¿Sí? — le extendió su teléfono celular.

—Umm...¿Para qué?

—Pues... Para ser amigos. ¿Sí?

Lo pensó, pero aún así, no perdía nada.

Aceptó el aparato y agendó el número a una gran velocidad.

—Bueno ya me— su celular sonó en ese instante, luego de verificar quién lo llamaba, atendió. —Jungkook. Sí, ya estoy saliendo...¿Estás en casa ya? Oh, okey. Nos vemos.

—¡Suerte!

...

—¿De verdad no lo esperaste?— Seokjin se veía molesto.

—Estaba bien.—respondió sin siquiera apartar la vista de la televisión.

Seokjin tomó el control remoto y apagó el aparato.

—Estaba viendo eso.

—Y yo te estaba hablando. Taehyung está volviendo sólo de la escuela, estuvo así durante tres días. ¿Puedes decirme qué te ocurre?

—Sólo me canso de esperarlo. Eso es todo.— se encogió de hombros. No quería hablar de eso.

—¡Lo acosan en la calle! Demonios Jungkook, no puedes ser tan infantil. Taehyung es amable y frágil, siente miedo al estar sólo.

—¡Tiene diecisiete años!

—¡Y la mayor parte de su adolescencia estuvo aguantando tus golpes!

Un silencio filoso se mantuvo en el lugar, mientras ambos se observaban fijamente.

—¿Quieren dejar de gritar? Joder, mis padres se largaron y ustedes siguen con este ambiente horrible.

—Namjoon. —Seokjin lo llamó.— A partir de mañana, estás a cargo de vigilar que Jungkook esperé a Taehyung.

—¿Qué?— exclamó sorprendido. ¿Él qué tenía que ver?

—Ya me oíste. Ahora debes ir arriba y esperar para hablar con él.

—No tengo nada que hablar.— realmente era un adolescente obstinado.

—¿Acaso pelearon?— ahora fue Namjoon quién preguntó.

Jungkook mordió su lengua, no debía decir por qué estaba molesto ni mucho menos decir que no quería ver a su hyung con otra persona. Es joven, y aún no puede entender sus propios sentimientos, con sólo diecisiete años, sentía un gran revoltijo en el estómago y un horrible dolor de cabeza. Quería estar la mayor parte del tiempo detrás de Taehyung, protegiéndolo, y siendo sinceros, esa chica, de la cuál no sabía nada, a quien veía en los pasillos con su hyung caminando y charlando alegremente, aferrada a su brazo...Odiaba todo eso. Y no tenía idea del por qué.

—Eso no importa.

Dicen  ≥VKook≤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora