(Ryan)
Me despierto veo a Sam en mis brazos dormida, me da pena que ella no sepa cuanto la quiero, como dije siento una extrema adoración por Samantha, ella cree que estoy loco, que estoy mal, pero no es así.. bueno puede que si me pone algo loco, quererla como lo hago inclusive, pero me tiene mal, abandono mis sentidos por mi pequeña e inocente Samantha, sólo diré que yo no quiero lastimarla, sólo quiero que ella sea mía, que me quiera tanto como la quiero yo, pero tendré que ser paciente.
No quise dormir solo así que decidí dormir con Sam. En fín me levanto aún que no quería separarme de ella. El reloj marca las ocho de la mañana. Me voy a bañar, decido ponerme una camiseta, un jean y zapatillas.
Ya son las nueve, bajo preparo el desayuno para mi pequeña Samantha, para ella una taza de chocolate galletas, para mi solo una taza de café y llevo el desayuno a la habitación, ella estaba despertando.
(Samantha)
-Buenos días mi niña- me dijo Ryan dejando el desayuno en la mesa de luz que está al costado de la cama, dejó un beso en mi frente.
-Hola- respondí con una voz muy baja.
-¿Cómo estás?- me preguntó mientras yo me acomodaba en la cama.
-Con dolor de cabeza, gracias por el desayuno- le contesto.
-Que lindo humor, Sam, espero que el chocolate te levante el ánimo.
Yo no le respondí nada, no estoy bien, así que sólo me dediqué a tomar el chocolate, está delicioso ¿Ryan lo preparó? Ryan está acostado a mi lado con su celular, escribiendose con su "novia", al parecer lo miré por mucho tiempo porque logré que me mire con una sonrisa, quité la mirada, Ryan guardó su celular, mientras yo trato de dar unos sorbos al chocolate, Ryan tomó mi mano entrelazando sus dedos con los míos, deja besos en mi mano, luego en mi hombro.
-Ryan, déjame no quiero terminar tirando el chocolate en la cama.
Ryan me quitó la taza, ya no quedaba mucho, la dejó en la mesa de luz, me acostó en la cama, se puso encima de mi, entre mis piernas, lo miro fijamente a los ojos aquel verde azulado estremecedor, una mirada fuerte la cual nunca puedo sostener.
Ryan no me deja pensar más al haber unido sus labios con los míos, acarició mi pierna lentamente pegó toda su mano en mi.
-Sam quiero...-
-¿Qué está pasando aquí?.
Diana interrumpió pasó de repente a la habitación. Ryan se va a molestar, y es que siempre la regaña por lo mismo pero sin embargo Diana no cambia. Diana preocupada pasaba cerrando la puerta, Ryan y yo obvio nos separamos, debido a la sorpresa ambos casi nos tiramos de la cama, mi corazón se va a salir de mi pecho me asusté mucho.
-Diana ¿por qué entras de esa forma?- dijo Ryan enojado, Diana rodó sus ojos.
-Sólo venía a ver a mi hermanita... oh perdón, volveré a intentar corregir eso.
Ryan sólo me dio un beso en la mejilla, se dirige hacía la puerta, Diana se alejó de Ryan inmediatamente el cual no tardó en dejar la habitación.
Que vergüenza.
Tomé la almohada y la pegué en mi rostro.
-¿Qué pasó Samantha? Woo ustedes se estaban besando... eso no es todo lo que acabo de ver.. niña lo tenías encima guaau, yo sabía acerca de ustedes mi instinto no me fallaba.
-Diana por favor no es lo que parece- respondí mientras me levantaba para vestirme.
Diana se quedó callada, yo miré por la ventana, el día estaba nublado creo que va a llover ojalá que si, saqué ropa me voy a bañar, al terminar me vestí, me puse ropa interior negra, una blusa roja, un jean azul y mis zapatillas negras. Despues de ordenar todo, me acosté en la cama con Diana la cual me dice.
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Eres Mía [1]
RandomLa protagonista de ésta historia es Samantha Lawrence, pronto convertida en una víctima de su historia, víctima de sus miedos, sus malas decisiones, obligada a permanecer en silencio.. Tuvo personas buenas en su vida y luego también malas personas. ...