Eres Mía [1]

Capítulo 24 No me siento nada bien

(Ryan)

Dejé a Elizabeth en su casa, le agradecí.. pues fuera de que no le agrada Samantha se preocupó por ella también, fue tan amable de prestarle ropa, obvio no dejaré a Samantha en su casa en ese estado, sus padres no tienen por que preocuparse yo mismo me encargaré de que a Samantha nadie jamás la vuelva a lastimar, sólo necesita quedarse conmigo y nada malo va a pasarle. Acuesto a Samantha en mi cama, enciendo la luz. Samantha está profundamente dormida sólo dormida no se ve como si estuviera descansando se ve muy triste.

¿Por dónde empiezo? Le quité todos esos accesorios los voy a botar a la basura en cuanto ordene todo por aquí, al quitarle ese horrible vestido me quedé boquiabierto, pues no trae nada de ropa interior, sólo cerré mis ojos con fuerza, respire profundamente, me levanté totalmente fuera de control tirando al suelo todo a mi alcance, salgo de la habitación, bajo la escalera. Sólo quiero beber. De una patada tiré los taburetes al suelo, tomé un vaso coloqué unos cubos de hielo, para servir Whisky, bebí un poco.

—Cuando te encuentre te mataré.. mierda sólo quiero tenerlo enfrente.

Samantha me necesita, debo tomar el control, pierdo al ser tan impulsivo, le doy un último sorbo a mi bebida, regreso a mi habitación, veo a Samantha mientras duerme buscando la manera de cubrirse con la sábana.

Me acerco a ella, la tomé en mis brazos, para mi sorpresa abrió sus ojos, me vuelvo a enamorar una y otra vez de ella y es que cada vez que tengo la fortuna de mirarla y de tenerla simplemente pasa, ella es toda mi vida, es mía y yo soy todo suyo. Arqueo sus cejas un momento para luego cerrar sus ojos y acurrucarse más cerca de mi.

¿Qué mierda? No entiendo se puede ser tan hijo de puta para cortarle así su cuello, no se ve tan mal como suena pero le cortaron así intencionalmente, mi corazón se acelera más y más provocando así que mi pecho comience a doler.

MALDITO nadie.. absolutamente nadie toca lo que es mío, ese infeliz tuvo sexo con ella, me da asco como ese enfermo la ha dejado, debo bañarla en cuanto antes.. pero no quiero despertarla por otro lado. Lo lamento totalmente pero no puedo dejarte así ni un minuto más. Preparé todo para bañarla, la cargué en mis brazos, la llevé y la dejé en la tina. Samantha se aferró a mi brazo.

—¿Qué pasa?— preguntó exaltada.

Muevo mis labios por un momento sin saber como actuar, no debo tratarla ni mal ni demasiado bien debo ser más positivo sin preocuparla. Le sonreí, acaricio su cabello mojado y le digo.

—Pasa que necesitas bañarte Sam, será rápido relájate, todo va bien tranquila— terminé de bañarla, secarla y vestirla. Samantha camina lentamente y le digo.

—Samantha.

—¿Um?.

—¿Te traigo algo? Pide lo que sea.

—Sólo un vaso con agua por favor— la veo llevar sus manos a su espalda baja hizo una expresión de dolor.

—¿Qué te duele?.

—Todo, Ryan— dijo sonriéndome sin desear hacerlo se le nota.

—Iré por tu vaso con agua no tardo.

Samantha después de beber agua se acostó a dormir, me cambié la ropa, apagué la luz y me acosté con ella, me abrazó es tan cariñosa apesar de toda la mierda que ha tenido que pasar, antes de quedarme dormido dejé un beso en su frente y le dije lo mucho que la amo.

(...)

Me despierto, Samantha no está en la cama, tomé mi celular le escribí a Sam.

—¿Dónde estás?.

—Preparando nuestro desayuno Ryan no te tardes ya casi está listo.

—Voy.

Me levanto, desde aquí puedo sentir el olor a café, salgo de la habitación, bajo la escalera, voy a la cocina, Samantha está sirviendo café, la abrazo por detrás, dejo un beso en su mejilla, haciéndola sonreír, Samantha llevó mi desayuno a la mesa, tomé asiento, le doy un sorbo a mi café, mirando a Samantha apoyada en la mesada sosteniendo su taza y le digo.

—Ven siéntate aquí Samantha tenemos que hablar— dije moviendo la silla para ella.

Samantha abrió sus ojos aún más, se sentó a mi lado, dejé la taza, tomé su mano y le digo.

—Dime su nombre.

—¿De.. de qué hablas?— cerré mis ojos un momento intentando conseguir algo de paciencia y le digo.

—Quiero que me hables del tipo con el que has estado.

—No.. no sé de que hablas.

—Hablé con él, dije que lo voy a encontrar con o sin tu ayuda Samantha ¿me dirás quién es?.

—Olvidemos eso, no hagas nada, nadie puede ayudarme déjalo así, quien lo intente perderá más de lo que se puede imaginar.

—Lo mataré.

—No eres un asesino, amor no te arruines la vida por ese maldito que no vale nada, por esos motivos preferí no contárselo a nadie.

—Bueno lo encontraré sin tu ayuda.

Samantha cubrió sus labios con su mano ¿y ahora que le pasa? Samantha se levantó rápidamente saliendo de la cocina me levanto voy por ella y digo.

—Samantha estábamos hablando no puedes irte de esa.. manera.

La encontré vomitando, sostengo su cabello, mientras también masajeo su espalda, terminó de vomitar al parecer.

—Ay no me siento nada bien.

¿Será por que bebió anoche? No sé la  llevaré al hospital igualmente. Samantha estaba lavando su boca y le digo.

—¿Te sientes mejor?.

—No, peor.

—Bien vamos.

La llevé al hospital, la revisaron supongo, Samantha no me ha dicho nada. Finalmente nos dirán que le pasa, espero que no sea nada, yo creo que fue porque bebió alcohol.

—Bueno tengo los resultados, su novia está embarazada, fuera de eso todo está en orden si desean algo más estaré por aquí cerca— asentí brevemente, el doctor se retiró. Miré a Samantha se quedó ahí inmóvil con la mirada perdida y le digo.

—Samantha.

—Llevame a mi casa Ryan.. por favor— en el camino no dijimos ni una sola palabra, la dejé en su casa, Samantha sólo salió del auto sin decir nada. ¿Puede ser que seré padre? No lo sé, no me deja tranquilo la reacción de Samantha se veía muy mal.

¡hola!

Baby en camino

¿Qué tal el capítulo? Ya saben si les gustó no dejen el capítulo sin antes darme tu voto o comentario y gracias por el apoyo

Hasta luego.