Similar Enough |Harry Styles|

3ª Temporada: Capítulo 5

¡Hola! Os aviso que este será el PENÚLTIMO capítulo de Similar Enough, he decidido terminarla pronto, los capítulos serán más largos pero solo habrá dos (contando este) y el epílogo. Voy a publicar una versión NO fanfic de SE y tengo que editar toda esta versión así que no voy a enrollarme más, iré al grano pero no por eso dejará de ser Similar Enough. 

Escuchar la canción que dejo en multimedia mientras leéis el capítulo, es muy Karry (Kath y Harry por si no lo habíais pillado ._.)

Subiré cuando suba, votad y comentad.

Un beso xx

KATH

Llevé la última caja a la casa y me senté en una silla, hacía un calor de cojones y el corazón me latía a mil por el esfuerzo.

-¿Ya te has cansado? Después de todo eres una debilucha. -Me dijo Harry para fastidiarme mientras salía de nuestro nuevo aseo.

Aquí va la explicación: llevabamos cajas porque nos habíamos mudado a Estados Unidos, concretamente a Washington. Llevábamos dos días aquí pero las cosas acababan de llegarnos desde Inglaterra.

Quizás mudarnos juntos a otro país era un asunto demasiado importante para haberlo aceptado tan rápidamente pero cuando estas medio secuestrada en Islandia y vienen a rescatarte y te dicen que tienes la oportunidad de mudarte con el chico que más quieres a otro país para empezar de cero, una no se lo piensa mucho.

Rodé los ojos ante su comentario y me levanté a beber agua.

Comparada con la casa de mi madre y Ben, era pequeña pero comparada con el nido de mierda en la que vivía antes, era una mansión. Había muchas formas de ver las cosas.

-¿Te gusta? -Me preguntó el rizado abrazándome por la espalda mientras me daba un beso en el cuello.

-Claro que me gusta, si no me gustara te lo haría saber a patadas, literalmente. -Ambos nos reímos- ¿Crees que aquí estaremos bien? -Le pregunté girándome para poder mirarlo. -Él se encogió de hombros y me dio un beso.

-Seguro. -Sonrió para tranquilizarme pero no me gustaba ese sentimiento porque cuando estás tranquila, todo te sorprende de golpe y te afecta más. Nunca hay que tranquilizarse, siempre viene bien estar alerta.

Era extraño estar con Harry, es decir, habíamos estado tanto tiempo separados que el sentimiento de añoranza era muy fuerte pero ahora que lo tengo a un par de centímetros, ese sentimiento se había desvanecido por completo. Y era raro, estaba confundida.

-Voy a sacar cosas de las cajas para empezar a colocar algo. -Me separé porque la falta de espacio me estaba empezando a agobiar.

-¿Te ayud...? -Empezó a decir pero lo interrumpí.

-No. Puedo sola- -Dije y salí de la cocina.

Era gilipollas y no sabía que narices me había pasado. Necesitaba despejarme así que cogí mis llaves y salí de la casa. Empecé a caminar por la acera sin rumbo, me iba fijando en lo que había en mi alrededor.

Mucha gente caminaba deprisa hacia todas partes, otros hablaban en cafeterías y restaurantes y luego estaba yo, que iba lentamente para intentar no llegar muy lejos y perderme. A unos metros vi un banco vacío, fui y me senté en él.

Apoyé los codos en mis rodillas y la cabeza en mis manos. Intentaba encontrar una explicación lógica a lo que había hecho pero no la había, porque yo no era lógica, era un desastre con patas.