Capitulo 13

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Eran menos de las diez de la mañana. Desde hacía una hora, Pepper no había salido de su posición actual. Apenas despertó, se sentó en la cama y estuvo así incluso cuando Christine se despertó y fue al baño, y se mantuvo así cuando ella volvió. No había pasado nada, pero teniendo en cuenta que ese mismo día volverían a la ciudad, quería que hicieran algo. No estaba muy segura de qué, pero algo debía salir o se iba a morir de aburrimiento. Hasta el momento, no se le había ocurrido nada, y Christine parecía estar en pensado en lo mismo. Ni habían desayunado y ya estaban pensando en qué podían hacer.

-Bueno, oficialmente estoy en blanco-declaró Christine, acostándose de nuevo y mirando el techo, mientras sus ojos parecían querer cerrarse de nuevo.

-Yo también. Creo que deberíamos hablarlo con los chicos y ver si ellos piensan en algo-contestó Pepper, cruzando las piernas sobre la cama.

-Conociéndolos, no tendrán ni ganas de eso. O proponemos algo o nos quedamos aquí hasta la tarde.

-Sí, también lo pensé. Pero no se me ocurre nada. Ir a nadar no creo. Preferiría hacer otra cosa para poder contarles a mis padres.

-De todas formas, dudo que tu emoción dure mucho. El miércoles es la reunión de padres, y el director sabe que Tony no habló con los suyos-dijo Christine, cruzando las manos sobre su estomago-. Él dijo que, si era así, llamaría a los padres de aquellos alumnos que no les informaran cuando hay una reunión.

-Ah, sí. Eso también.

-No lo entiendo. Él debe tener notas iguales a las de Stephen. ¿Por qué tendrían que ir sus padres?

-La verdad... ni yo lo sé. ¿Y qué hay de Stephen y Wong? Ellos también tienen buenas notas-señaló la rubia.

-Creo que el tema de Stephen es por su actitud hacia los profesores. El hecho de que les responda y que encima se duerma en clase no le da una buena imagen-respondió Christine, suspirando-. Y sobre Wong... Él había faltado unos días por haber estado enfermo. Y, en dos de esos días, tomaron trabajos un poco «esenciales» para la nota del trimestre, que eran tomados más que nada para quienes tuvieran notas un poco bajas en algunas materias. No dijeron si sus notas bajaron, pero espero que no.

Pepper se sentó más cerca de la pared y pegó su espalda en ella. No les había hablado a sus padres sobre la junta porque le preocupaba un poco que vieran sus notas en Filosofía y en Educación Física. Esas dos materias estaban un poco bajas para ella, pero todavía tenía chances de levantarlas. Sus padres no eran muy exigentes, aun si siempre le decían con firmeza que no debía reprobar absolutamente nada si quería poder entrar a la universidad con una beca. Claro que había algunas que eran públicas y no debían pagar; el tema era que ellos querían que su hija fuera a una de las mejores. Por esas razones, ella solía discutir bastante con sus padres.

Christine estaba al tanto de eso. Qué diablos... Ella sabía todo de todos. La vida personal de Stephen, los problemas de Tony, las discusiones de Pepper, las exigencias de Wong hacia él mismo. Nada se quedaba fuera. Y sabía que Pepper también sabía que, muchas veces, ella no llegaba a tiempo al instituto por quedarse dormida después de ayudar a su madre en la pastelería algunas veces. Los padres de su amiga eran bastante estrictos con el tema del dinero, diciéndole siempre que, para ganarlo, debía trabajar duro y esforzarse para salir adelante. Christine era una chica responsable, pero muchas veces se sobrecargaba un poco con las cosas.

-En fin, no hablemos de eso-pidió Christine.

Cuando terminó de decir aquello, uno de los chicos golpeó la puerta de la habitación.

-Adelante-dijeron ambas.

-Buenos días, chicas-saludó Wong.

-Buenos días-dijeron al unísono, sonriendo.

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