- capítulo 11 -

2.1K 71 43
                                    

Narra Julia

Estábamos a sábado, y por el cumpleaños de María nos habían preparado una fiesta.

Pero no como las anteriores, una fiesta de verdad, con pizza y cerveza.

Lo único que esperaba era que, después de casi un mes sin beber, no nos afectase demasiado e hiciésemos cosas de las que nos pudiésemos arrepentir.

-Julia, ¿no bailas?- me dijo Marilia.

-Claro, vamos.- le contesté cogiéndole de la mano y dándole una vuelta, gesto que hizo que ella riese.

Marilia era como mi hermana pequeña, le quería mucho.

Todos iban y venían, algunos paraban a ratos para descansar, otros estaban yo que sé dónde...

Las chicas estábamos todas bailando, y Miki también.

Nos separamos un poco y fuimos más a nuestra bola, yo bailé un rato con Natalia, otro con Noelia...

A Noelia le perdí de vista a cierto punto de la fiesta, sabía que me había dicho algo pero ya ni me acordaba.

Entonces vi a Carlos acercarse a mí, y no pude evitar ponerme nerviosa a pesar del alcohol en mi cuerpo.

Bailábamos pegados, muy cerca.

Por un momento nuestros labios se rozaron, él se separó un poco pero después pegó su cadera a la mía.

Seguimos así un poco más y fue él quien se separó del todo.

-Ahora vuelvo.- me dijo sonriendome, y por mi cabeza empezaron a pasar pensamientos que tenían de todo, menos inocencia.

Le vi alejándose, y mis pies empezaron a funcionar solos, porque antes de darme cuenta estábamos los dos en el baño.

-Hola.- le dije apoyándome en la puerta.

-Hola.- me respondió él de la misma manera, pero enfrente.

Recorrí la distancia que nos separaba y casi podría decir que tenía mi peso sobre él.

Carlos retrocedió hasta apoyar del todo la espalda en la pared.

Ambos respirábamos entrecortadamente.

-¿A qué has venido aquí?- le pregunté.

-¿Yo? Necesitaba relajarme un momento.- me dijo mirando mis labios.

-¿Ah sí? ¿Y eso por qué?- le pregunté pegándome más a él.

-Ya lo sabes.- me respondió con sus manos en mi cintura.

-No sé de qué me hablas.- le dije levantado una ceja.

-Esto está mal.-dijo entonces.

Pero no se separó.

Me acerqué más, y cuando nuestras bocas estaban tan cerca que nuestras respiraciones se mezclaban, le susurré:

-He roto con Javi.

Se lo solté así, sin más, no sabía qué reacción esperar por su parte.

Él cambió posiciones, quedando yo apoyada en la pared y él enfrente, y juntó nuestros labios en un beso nada parecido al primero que nos dimos.

Seguimos besándonos como si lo necesitásemos para sobrevivir, pero es que realmente sentía que era así.

Parábamos un poco a veces para tomar aire, pero no pasábamos separados más de dos segundos.

La cosa avanzaba muy rápido.

Muy, muy rápido.

Luego tendría que buscar mi ropa, porque no sabía a dónde había ido a parar.

Necesitaba cada centímetro de su cuerpo, éramos como dos imanes, no podíamos separarnos.

Y no lo hicimos.

*Espero que os guste un montón (ya no están enfadados xd)
Igual os parece una mierda, pero yo tenía muchas ganas de subir este capítulo.

Gracias por leer, mañana más 💙

Pídeme Más -julright-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora