Capítulo 45

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El domingo que llegué a Londres lo pasé encerrada en casa, pensando. Mis pensamientos siempre dirigidos a dos personas en concreto:

Louis o Liam.

Liam o Louis.

Nada más. No podía centrarme en otra cosa, incluso había estado evitando hablar con mi madre sobre como le iba la vida a mi padre y a su novia.

Lo peor de todo aquello era que no podía contar con nadie para que me ayudara, o me diera consejo, nadie sabía que había estado con Louis y prefería que siguiera siendo así. Sólo era elegir un nombre pero elegirlo me resultaba difícil. Pensé en echarlo a suertes pero sería una tontería. Era complicado, por no decir casi imposible, así que agarré un cuaderno y apunté ambos nombres en una página blanca separandolos por una línea horizontal.

Había visto en muchas series y películas que esto le servía la protaginista para decidirse por el hombre de su vida y rezaba para que a mi también me funcionara.

Los pros de Louis eran bastantes: divertido, inteligente, sarcástico, sincero, bueno en la cama.

Los de Liam eran dulce, tierno, inteligente, de mi edad y le caía bien a mi madre.

Los contra eran más dificiles, no conocía por completo a Liam y aquello me aterraba de una forma inimaginable pero eran tan dulce conmigo que no pensaba que tuviera alguno. Los de Louis eran posesivo, algo celoso y que había estado con chicas jovenes antes que yo.

Observé el cuaderno y arranqué la hoja doblandola y tirandola a la papelera de mi habitación. La única conclusión a la que había llegado era una. Estaba jodida, pero mucho.

En la vida real hacer una lista de pros y contra nunca funcionaba. Era sí o no. Sin objeción alguna, sin importarme los contra de uno u de otro y llegando a acostumbrarme a ellos.

Me incorporé de la cama cogiendo el papel. Volví a mirar los contra de uno y de otro. Divagué por la habitación, mordiendome las uñas. Después escuche música para relajarme y aclararme un poco las ideas pero nada funcionaba. Ni los chicles en aquella ocasión conseguían aclararme. Hice añicos la hoja y la tire, esta vez por la ventana. El clima en Londres cada vez era menos frío lo que significaba dos cosas. La primera que faltaba menos para el verano y para que el curso finalizara y la segunda era que faltaban unos pocos días para mi cumpleaños número dieciocho.

Sólo faltaban diez días para mi cumpleaños y ya podría hacer lo que me diera la gana, podría beber tranquilamente, fumar e incluso estar con yo quisiera.

En un impulso repentino, agarré mi móvil, pronto serían las nueve y mi madre me llamaría para cenar pero podría retrasarme cinco minutos.

"¿Podemos vernos en cinco minutos?" tecleé y envié el mensaje esperando nerviosa la contestación.

"Claro. ¿Voy a tú casa?"

"Vale"

Dejé el móvil en el escritorio y fui a cambiarme para decirla a mi madre que iba a salir cinco minutos. Cuando cerré la puerta de casa y bajé las escaleras vi a Liam que estaba a punto de llegar a mi casa. Comencé a caminar hacía su dirección, él sonrió cuando me vió.

-Hola, guapa- susurró abrazandome.

-Hola.

Me aparté de él. Tenía que cortar con él, ya traté de cortar de raíz con Louis y las cosas se fueron a la mierda. Tenía que hacerlo con Liam antes de encancharme más a él.

-Liam, tengo que decirte algo y creo que no te va a gustar- su suave semblante cambió.

-Dilo.

-No puedo seguir con esto, te estoy haciendo ilusiones cuando yo...- corté mi voz para mirarlo, Liam estaba impasivo, sólo me miraba como si estuviera loca- Cuando yo... Yo no siento lo mismo.

-¿Me estas diciendo que quieres dejarme?

-Quiero que sigamos siendo amigos- me encogi de hombros- Liam, eres un buen chico y no quiero hacerte daño.

-Si no querías hacerme daño... ¿por qué empezaste a salir conmigo?- preguntó alzando la voz.

-Porqué me gustabas.

-¿Y qué ha cambiado? Me he portado bien contigo y no te he hecho daño.

Me encogi de hombros, me sentía como una puta, hablando mal y pronto. Había utilizado a Liam y ahora no sabía como arreglarlo.

-No quiero jugar contigo.

-Es lo que has hecho desde que empezamos- eso había dolido. -¿Es por el tío ese del que sigues enamorada?

Afirme con la cabeza mirandole, Liam estaba dolido y se lo podía notar en la cara pero no hizó nada darmelo a saber, prefería hacerse el chico duro delante mía.

-Lo siento...

-No hace falta que lo sientas.

-Quiero que seamos amigos.

-Emma, no puedo ser tu amigo cuando siento esto por ti. Así que será mejor que no hablemos durante un tiempo.

Sentía ganas de llorar, mis ojos quemaban pero no dejé en ningún momento que aquello saliera a la luz. Liam se despidió con un abrazo algo incómodo y él se fue, miré como se iba con tristeza, pero no podía hacer otra cosa, quería a Louis y aquello era un hecho que nadie podría cambiarlo por mucho que quisiera.

Entré de nuevo en casa recibiendo la llamada de mi madre de que la cena estaba ya en la mesa.

-¿Dónde vas? Vamos ha cenar ahora- me regañó mi madre viendo como entraba en mi habitación.

-Dame unos minutos.

Cerré la puerta y rápidamente envié un mensaje a Louis.

"Ya lo he decidido. He cortado con Liam"


(Dedicado a FlorcisBelieber)

Ley de Profesor |LouisTomlinson|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora