Ley de Profesor |LouisTomlinson|

Capítulo 34

Abri los ojos debido al calor que recorria mi cuerpo, lo primero que vi al abrirlos fue la persiana de la habitación levantada hasta el cielo. ¿Tan difícil era bajarla?

Louis seguía durmiendo tranquilamente agarrandome de la cintura. Sus piernas, enredadas a las mías, no me dejanban casi espacio para salir de la cama.

Con movimientos lentos conseguí salir, Louis agarró una almohada y siguió durmiendo abrazado a ella.

Agarré algo de ropa y me dirigi al baño para asearme, mientras pasaba el cepillo numerosas veces por mi pelo después de una ducha pensé en la noche anterior, en la forma en la que me acalló Louis para no decir las palabras mágicas. Posiblemente estuviese siendo muy melodramatica pero no podía hacer otra cosa, iba a confesarle mis sentimientos a alguien por primera vez y esa persona me dió la patada.

Frustada, guarde las cosas en el necesser de mala gana y fui hacía la cocina para desayunar dejando a Louis roncando un poco en la habitación.

Encontre un paquete de galletas María y con ellas me prepare un colacao. Me lo tome sentada en la silla de la isla de la cocina. Todo era de aspecto rústico, con tonos marrones oscuros. No podía imaginarme a Louis viviendo en un entorno rodeado de naturaleza, él siempre fue más de ciudad, de poder ir de compras cuando quisiese. Me lo imaginaba bajando a la panadería en pijama para comprar el pan. En esté entorno no podría hacerlo.

Rodearon mi cintura mientras dos galletas estaban en el colacao. No me asuste ya que el olor de Louis llenó mi cuerpo. Él depositó un pequeño beso en mi sién y con voz adormilada dijó:

-Buenos días.

-Hola. ¿Qué tal has dormido?- pregunté agarrando una galleta medio desecha y llevandomela a la boca. Reprimi un gemido de gusto.

Louis caminó hacía la tetera y se sirvió un poco de té para después darle un sorbo. Se había cambiado de boxers pero seguía con el pelo despeinado. Mi ojos no paraban de mirar la frase que tenía tatuada en el pecho. Increíble que siendo profesor tuviese tatuajes.

-Muy bien, quitando el hecho de que cuando entre de nuevo en la habitación estabas roncando.

-¡Yo no ronco!- protesté. Louis pareció divertirse con mi reacción y dandole un sorbo al té me miró.

-¿Respiras fuerte?

- Ja-Ja- reí de forma sarcastica- El único que ronca aquí y se le cae la baba mientras duerme es a tí.

Louis volvió a reirse pero se encogió de hombros sabiendo que tenía razón, sin embargo, yo nunca he roncado, mi madre no me hizó ningún tipo de broma o comentario a mi manera de respirar mientras dormia.

Cogi la otra galleta, a medio romper, y me la lleve a la boca. Me había comido medio paquete de galletas María en muy poco tiempo.

-Hay un acantilado cerca de aquí, podríamos ir allí después de desayunar.

-¿No hace mucho frío para salir?- pregunté con la esperanza de que cambiara de idea y nos quedaramos aquí dentro juntos y calentitos.

-Es para dar una vuelta y mostrarte esto. Supongo que no habras salido tú sola para explorar.

Negue con la cabeza, la naturaleza no era exactamente mi fuerte.

-Pero tú tendras que ir a cambiarte- dije mirando los boxers de Louis, aparte la mirada rápidamente avergonzada y mire su rostro- Quiero decir... para no resfriarte.

-¿No te gusta cómo luzco en boxers?- preguntó de manera juguetona, mis mejillas se volvieron tomates.

-Me gusta pero volverias loco a más de una y no sería divertido.

-¿No lo sería para quién?- siguió picandome. Hice un mohín para que parara y fuera a cambiarse de una maldita vez. Louis comenzó a reirse y dejando la taza de té me informó de que iba a cambiarse.

Terminede beberme el colacao y me vesti con el abrigo para salir fuera de la casa. Nada más llegar ayer entramos directamente en la casa y no pude ver nada. Guarde las manos en los bolsillos para resguardarlas del frío. La casa esta rodeada de árboles y un pequeño camino empedrado lleva a unas cuantas casas más.

-¿Emma?- gire hacía la voz que dijó mi nombre pensando que sería Louis.

Mierda, ¿qué demonios hacía Caitlin aquí?

-¿Caitlin?- pregunté sorprendida.

-Pues claro- dijó- ¿Qué haces aquí?

-Eh... Y-Yo...- comienze ha hablar pero como siempre que me pongo nerviosa sale el rídiculo tartamudeo- Estoy con un amigo por aquí... ¿Y tú?

-Te dije que iba a pasar el fin de semana en la casa de la familia de Zayn- cuando terminó de hablar tuve ganas de meterme de hostias yo misma ¿cómo se me podía haber olvidado?¿pero cómo iba a saber yo que ellos estarían en la misma zona que Louis y yo?

-Es verdad- dije dandola la razón.

Mire al frente cuando Louis se comenzó ha acercar a nosotras, quise hacerle alguna señal para que se detuviera pero tenía a Caitlin delante y me era practicamente imposible.

-¿Emma, qué haces aquí fuera?- me preguntó Louis cuando llegó a nuestras, Caitlin se giró y abrió los ojos.

-¿Profesor Tomlinson?- preguntó la rubia sin creerselo.

-¿Caitlin, qué hace aquí?

Ella pareció darse cuenta de la forma en que nos hablaba a cada una de nosotras. Mientras a mi me hablaba en primera persona a los demás lo hacía en tercera. Lo que me hizó ponerme más nerviosa.

-Estoy con mi novio. ¿Y usted?- nos miró a ambos y con el dedo nos señaló- ¿Ambos?

-Tengo una vivienda aquí- contestó Louis y luego ambas miradas fueron dirigidas a mi.

-Yo estoy con un amigo.

Caitlin pareció creerselo, frunció el ceño y me miró cruzando los brazos, toda la atención que tenía hacía Louis se había desvanecido.

-¿Con un amigo? Tía, Liam esta colado por ti y después de lo que pasó en San Valentín con él, ¿te vas con otro?

Desconcertada mire con ojos grandes a Caitlin, la mirada de Louis no paraba de fulminarme dandome a entender que no entendía nada de lo que decíamos y que después hablaríamos. Había pensado en guardarme el beso que me di con Liam para mi, pero no salió bien.

-¿Cómo te has enterado?- pregunté.

-Me lo contó Zayn.

-Joder. Luego hablamos del tema, ¿vale, Caitlin?

-No, tronca- insistió, estaba muriendome de la verguenza- Me parece muy fuerte que prefieras a cualquier idiota que te usara, que a Liam que es un trozo de pan- siguió hablando sin parar, las ganas que tenía de meter un trozo de tierra en la boca de Caitlin eran muchas- Zayn ha estado hablando con él. Piensa como es Liam y probablemente de replantees muchas cosas.

-Ya lo sé, joder- exploté- Cuando vuelva a Londres hablare con él pero ahora no.

Suspiró cansada y cuando se despidió de nosotros mire a Louis por primera vez desde que ella se fue. Tenía los brazos cruzados dandome a entender que estaba cabreado y que yo era la causa de su enfado.

-¿Qué pasó con Liam ese día?