Ley de Profesor |LouisTomlinson|

Capítulo 9

-Gran hipótesis, Sherlock.

-Me encanta cuando te enfadas. Te ves adorable.

Este es tonto. Mi mano estaba a punto de volar hacía su rostro cuando hizó que tirara la mochila al suelo y me pusiera contra la pared. No me dio tiempo a protestar porque Louis había unido sus labios con los míos y en poco tiempo volvía a estar con las bragas por los tobillos. Me penetró con fuerza haciendo que gritara, tapó mi boca con la suya y comenzó a moverse. En poco tiempo mi cuerpo estaba llegando al orgasmo.

-Oh, mierda- le oí cuando me corrí, el seguía moviéndose como un loco hasta que también encontró su liberación.

Me dejó poco a poco en el suelo, mis rodillas se volvieron gelatina.

-Te queda bien el pelo después de una buena cogida- me dijó.

Mire como se quitaba el condón haciéndole un nudo y tirandolo por la ventana abierta de la clase. ¿Cuándo se lo había puesto?

-¿Y este mete-saca tan rápido que acabamos de tener?- pregunte peinandome.

Louis recogió sus cosas mientras yo me arreglaba el pelo y me ponía las bragas. Mi corazón seguía latiendo con fuerza.

-No queria que estuvieras enfadada.

Louis tenía sentimientos o más bien lo había hecho para aumentar su ego masculino haciendo que una chica pueda tener un orgasmo. Aun era raro sentirlo, pero habia pasado 17 años sin tener sexo y la mayoria de chicas de este instituto son unas perras y perdieron la virginidad a los catorce o a los quince.

-¿Nadie nos ha oído, verdad?- pregunté preocupada.

-No, ya habrían venido para ver que pasa. El timbre soñara dentro de un rato, podemos ir a comer.

-No puedo- dije apenada- Mi madre descubrió que pase la noche fuerza el sábado y estoy castigada. De casa al instituto y del instituto a casa.

Louis se pasó la mano por el pelo echandoló hacia atrás.

-¿Y sí llamo a tu madre y le digo que tienes que hacer un trabajo para el instituto conmigo?

-¿Harías eso?

-Claro. Asi podemos pasar la tarde tranquilos.

-Esta bien.

Louis me tomó de la mano y me sacó de clase, los pasillos seguían desiertos así que no había ningún peligro de que nadie nos pillara juntos pero tampoco estábamos haciendo nada malo. Su mano estaba caliente y apretaba la mía con fuerza como sí quisiera ¿protegerme?

Entramos en la sala de profesores, está estaba conectada con el despacho del director y la cafetería. ¡Se lo tenía bien montado el director!

Vi como Louis descolgaba el teléfono inalámbrico y me pedía el número de mi madre.

-¿Por qué no la llamas desde tú móvil o desde el mío?

-Porque se supone que tenemos que hacer un trabajo en el instituto.

Me encogi de hombros sintiendome tonta por haber hecho una pregunta tan simple. Louis se colocó el auricular en la oreja y espero, yo comence a morderme las uñas mientras esperaba impaciente.

-¿Señora Anderson? Si, la llamó desde el instituto de su hija- Louis hizó una pausa mientras me miraba- No, no ha hecho nada malo- ¡joder con mi madre! la llamaban desde el instituto y se pensaba lo peor de mi- Emma tendria que quedarse un rato más para hacer un trabajo conmigo... Si, yo la llevaria a casa... Esta bien, no se preocupe. Adiós.

Louis dejó el teléfono en su sitio.

-Tu madre no se fia de ti.

-Lo sé, pero de ti si.

Louis agarró de nuevo mi mano y me sacó de la sala de profesores.

-Vamos, la campana sonara dentro de nada y estoy muriendome de hambre.

Nada más entrar en su coche la campana sonó y decenas de adolescentes comenzaron a salir como locos.

(Dedicado a 21danny)