Louis sonrió complacido cuando le dije que él para mi no era solo un polvo fácil, o un simple polvo.
-Tú tampoco lo eres para mi.
Seguimos comiendo tranquilamente, le conte lo sucedido en clase de filosofía y estalló en una carcajada, él me contó lo que estuvo haciendo todo el día y me confeso que sentia celos de Liam. Celos irracionales, no tenían sentido, era como sí un niño estuviera celoso de que su hermano tuviera una piruleta.
-¿Por qué?- pregunte metiendome un último trozo de un taco en la boca. Me había comido cuatro y ya estaba empachada.
-Porque se lo has presentado a tu madre como tu novio- Louis se acercó a mi. El plato vacío estaba tirado en el piso para que no molestara, y nosotros estabamos sobre la sábana blanca mirandonos enfrentedos- Él a podido besarte delante de ella.
Incline mi cabeza hacia adelante dejando mi boca a centimetros de la suya.
-Ha podido cogerte de la mano. Ha podido oler tu perfume.
-Pero eso tú ya lo has hecho- dije con voz ahogada- Y contigo ha sido mucho mejor que con él.
-No lo dudo- dijó, agarró mi nuca y me besó. Sus labios se comian los mios y viceversa. Su lengua trazaba finos caminos en mi boca, agarró mi labio y tiró de él provocandome un pequeño dolor que me puso cachonda.
Me separe de él con la respiración jadeante. Abri mis ojos y detras suya vi un par de botes empotrados contra la pared.
-¿Qué es eso?- pregunte señalando con la cabeza los botes. Louis giró y los vió.
-Es pintura- dijó para después mirarme, sonrei con malicia- Oh, no, Emma ni se te ocurra.
-¿Por qué no? Sera divertido- me puse de pie y camine hacia los tubos.
Todos estaban etiquetados por su gama de color.
Cogi un verde fosforito y me acerque a Louis con una sonrisa divertida.
-¿Qué pretendes?- preguntó desde el suelo.
-Pintarte el cuerpo entero- dije desenroscando el tapón.
Louis sonrió divertido, se pusó de pie y agarró un bote, este era azul electrico.
-Si yo termino como un alien. Tu terminas como un pitufo. Quitate la ropa- indicó, le mire levantando la ceja ¿quería hacer el amor ahora?- No es lo que piensas, es para no mancharte la camiseta y que tu madre no te mate.
-Que considerado- me mofe.
Agarre el borde mi camiseta y tire de ella para arriba, la deje en una silla y después me quite los pantalones. Louis hizó lo mismo hasta quedar boxers. Aún no me había acostumbrado a verle asi pero no me importaba, si no todo lo contrario, me ponia perra perdida.
-Tumbate- me ordenó Louis señalandó la sábana donde habiamos estado sentados antes.
-¿Por qué tienes que empezar tu?- me queje.
-Porque luego dejare que me hagas lo que quieras.
ESTÁS LEYENDO
Ley de Profesor |LouisTomlinson|
Novela JuvenilDicen que las leyes de atracción son las más peligrosas de todas. La seducción, al igual que el sexo o el amor, es un arte que se va perfeccionando a medida que pasa el tiempo y se practica, a diferencia de otros, Louis Tomlinson sabe que es un expe...